Fanfic Angel Ciego by Izbet46

Firmas, avatares, dibujos, fics y mucho más. Muéstranos el artista que llevas dentro.
Responder
Avatar de Usuario
Arwen
Supersaiyano dai san dankai
Mensajes: 884
Registrado: Jue Ene 10, 2019 9:53 am

Fanfic Angel Ciego by Izbet46

Mensaje por Arwen »

CAPITULO 1
Spoiler:
Ha pasado el tiempo, Gohan y Videl están por casarse, ambos están sumergidos en los preparativos, faltan 15 días para la boda, Videl espera a la madrina de boda, ella eligió a quien le enseño artes marciales, Izbet, la entrenó hasta que tuvo 12 años. Luego se alejó de a poco de su vida, aunque sólo la ve pocas veces al año, Videl le tiene mucho cariño. A media mañana llega una mujer, unos 30 años, vestida de oscuro, en su cabello también negro que le llega a los hombros, se destaca un mechón blanco, Videl la ve y corre a abrazarla.

Videl: Por fin llegaste.
Izbet: Cuando te he dejado de cumplir una promesa.
Videl: Amigos… ella es Izbet, la madrina de la boda.

Todos se acercan a conocerla, y recién entonces se dan cuenta que usa un bastón, y tiene lentes oscuros. Es ciega. Milk y Bulma son las primeras en conversar con ella.

Milk: Soy la madre del novio, Milk.
Bulma: Y yo la mejor amiga de la familia del novio, Bulma.
Izbet: Un gusto, soy Izbet.
Bulma: ¿Tienes algo que ver con el Conglomerado HEAVEN…?
Izbet: Si, es una de mis empresas.
Bulma: He escuchado mucho sobre sus últimos adelantos en servo partes.

Y así siguen conversando, ya que el tema les apasiona a ambas. Luego deriva hacia la boda.

Izbet: Agradezco mucho a Videl haberme pedido ser su madrina de bodas. La quiero como si fuera mi hija - en eso grita - no es así Satán… sé que estas cerca, diría que por ese lado - apunta a un florero - sigues usando esa colonia barata…

Mr. Satán: Pensé que esta vez sí podría sorprenderte.
Gohan: ¿Qué fue eso?
Videl: Es una especie de juego, Papá siempre trata de sorprender a Izbet, y nunca lo logra, ella nació ciega y tiene muy desarrollados sus otros sentidos.

Izbet va a la casa por un poco de agua, Gohan quiere ayudarla, pero Videl lo detiene.

Videl: No la ayudes, le molesta mucho.
Gohan: Pero como llegará… - y ve como ella con ayuda de su bastón logra entrar a la casa, y una vez allí camina como si viera perfectamente.
Videl: Usa su bastón, y cuando ya está en casa, si no se cambian las posiciones, puede caminar sin problemas. Has escuchado del “Ángel Ciego”.
Gohan: Si, es una luchadora ciega… ¿Es ella?
Videl: Sí, al final de su espectáculo pelea con 6 personas al mismo tiempo, hasta ahora nadie ha podido ganarle.
Gohan: Siempre pensé que ese tipo de cosas estaban arregladas.
Videl: Para nada.

Cuando Izbet vuelve de la casa, llega Piccolo.

Gohan: Mira Videl, llegó el Sr. Piccolo, aprovechemos que viene Izbet y los presentamos ¿Sr. Piccolo, cómo está? Permítame presentarle a la Madrina de la boda, Izbet.
Piccolo: Mucho gusto.
Izbet: El gusto es mío. Disculpen, pero Satán está impaciente por contarme la mejor parte de su lucha en el último torneo.

Transcurre la tarde, en un momento, Izbet trata de acercarse a Bulma, pero a pesar del cuidado que tiene y su bastón, tropieza y cae, Piccolo que está cerca trata de ayudarla, pero ésta al sentir una mano en su brazo lo rechaza, se levanta sola y sigue su camino.

Piccolo: Al menos debería dar las gracias.
Izbet: Gracias por nada
Videl: Lo siento mucho, Sr. Piccolo, a mi maestra le molesta mucho cuando la ayudan.
Piccolo: Hum…

En ese momento aparece una nave espacial de la que salen guerreras de diferentes razas, con una esmeralda en la frente, atacan y disparan hacía todas partes, los guerreros Z se preparan para defenderse, pero la líder aparece con una perla gigante en las manos que hace brillar, y todos los hombres caen inconscientes, menos Piccolo. Entre él, Videl, y N°18 (que deja a Marron con Bulma para que la cuide) empiezan a defenderse en el aire. En la tierra, Izbet empieza a luchar con las que quieren atacan a las mujeres y la niña, pero son muchas.

Bulma: Necesitamos ayuda acá, rápido.
N°18: Piccolo, ve a ayudarlas.

Él llega justo para parar un rayo que casi da en Milk, Bulma y Marrón. Las atacantes logran poner una esmeralda en la frente de Videl y N°18, e inmediatamente ellas quedan sin voluntad, y se las llevan en la nave. Todo fue tan rápido que los que quedan no pueden hacer nada. Ya pasada una hora que las guerreras se han ido, los guerreros Z no despiertan, en la televisión dicen que lo mismo pasa en todo el mundo (incluidos los niños). Piccolo lleva a sus amigos al templo para que los cuiden. Cuando vuelve de dejar al último, nuevamente se acerca una nave, igual a la anterior, pero ahora las mujeres que salen son todas de la misma raza, sin esmeraldas en la frente, físicamente igual a los humanos, pero con alas blancas en su espalda.

Comandante: Venimos en paz, estamos buscando unas renegadas de nuestro planeta.
Piccolo: Estuvieron acá, hicieron brillar una perla gigante, y todos los varones quedaron inconscientes, se llevaron a dos de nuestras amigas.
Comandante: Temíamos que pudiera pasar algo así, están secuestrando mujeres para su ejército - en eso sale una mujer vestida con una túnica celeste, todas las mujeres inclinan la cabeza.
Piccolo: ¿Quién es usted?
Sagrada Madre: Soy la Sagrada Madre del Pueblo Celestial.
Izbet: ¿El Pueblo Celestial? Yo soy Izbet, hija de Zurra.
Sagrada Madre: Así que tu madre vino a este planeta, donde está ella, nos serviría de mucho en este momento.
Izbet: Murió cuando yo nací.
Sagrada Madre: Entiendo - se da vuelta - Debemos volver, no lograremos atraparlas.
Izbet: Espera Sagrada Madre, déjeme ir con ustedes, una de las mujeres que se llevaron es como una hija, debo rescatarla.
Sagrada Madre: Lo siento, sabes que no puedes ir a nuestro planeta, prometo que intentaremos no dañar a las mujeres secuestradas en la batalla, si tu amiga sobrevive, la devolveremos. Vamos.

Izbet: Debo ir tras ellas para salvar a Videl.
Piccolo: Le toma el hombro - ¡Qué vas a hacer!
Izbet: Soltándose - Que te importa, no necesito a nadie, yo la traeré de vuelta.

En eso la voz del Kaiosama se escucha.

Kaiosama: Izbet, deja que Piccolo te acompañe, si las rebeldes ganan el dominio del Planeta Celestial, el universo estará en peligro, la joya que ellas portan es la perla de la sirena, que deja inconsciente a los varones, en ese planeta la líder de las renegadas la encontró, y la usa para tratar de tomar el control, luego de conquistar su mundo, planea seguir con toda la galaxia.
Izbet: ¿Quién eres? No te siento acá.
Kaiosama: Soy Kaiosama, dios de la galaxia del norte
Izbet: Si claro, y yo soy el conejo de pascua…
Kaiosama: No seas insolente, tú perteneces a una raza de extraterrestres, así y todo no puedes creer que haya más seres distintos en este universo.
Izbet: Será porque nunca HE VISTO nada así… - dijo con ironía - bien, irás conmigo grandote, pero sólo porque no quiero perder más tiempo en tonterías.

En eso llega Dende, que les trae dos semillas del ermitaño.

Dende: Lo siento, pero el maestro Karin no tiene más, es una lástima que hace tan poco se hayan usado las esferas del Dragón.
Piccolo: No te preocupes, gracias.

Izbet aprieta una parte del bastón, un rato después llega una nave. Marrón les pide que traigan de vuelta a su mamá. Ya en la nave, Izbet pone las coordenadas, y el viaje empieza.

Izbet: Demoraremos 5 días en llegar.
Piccolo: Que me puedes decir de tu pueblo.
Izbet: Ellos no son mi pueblo, yo nací en la tierra - desaparece por una puerta.
Kaiosama: (Sólo Piccolo lo escucha) Ellos son el pueblo celestial, creen en la perfección, y no se mezclan con otras razas, es lo único que puedo decirte. Por favor, Piccolo, trata de llevarte bien con ella, presiento que será importante para esta misión.
Piccolo: Gracias, intentaré no ahorcarla durante el viaje - sonríe.
Kaiosama: Les deseo suerte, veo que la necesitarán.

Se abre nuevamente la puerta, y aparece Izbet con un pantalón corto y una polera sin cuello y sin mangas, aprieta un par de sectores de la pared, y aparecen dos camas.

Izbet: ¿Dónde quieres dormir?
Piccolo: Me quedaré acá – se acomoda en posición de meditación.

Izbet hace desaparecer una cama y se acuesta. Piccolo piensa será un largo viaje. Al otro día él despierta con el ruido de Izbet que está preparando el desayuno. Ella hace salir del piso una mesa, y dos sillas, coloca todo.

Izbet: Ya grandote, sé que estas despierto, es mejor que comamos ahora…
Piccolo: Levantándose – Me llamo Piccolo, no grandote…
Izbet: Piccolo… quería pedirte que luego del desayuno, me enseñaras a volar, y concentrar el ki para atacar… Videl me contó y dijo que me entrenaría, pero no alcanzó.
Piccolo: Porque debería hacerlo, “ya que no necesitas ayuda de nadie”.
Izbet: por un momento queda silenciosa… se arrodilla con la cabeza baja frente a Piccolo, con los puños apretados, y el rostro rojo - por… favor… puedes enseñarme…
Piccolo: Esta bien, pero levántate.
Izbet: Gra… cias… come ahora que todo está recién preparado - se sienta, para calmarse.
Piccolo: Gracias - sentándose - pero yo no como, sólo tomo agua.
Izbet: Que extraño… ahora que lo pienso, si la perla de la sirena deja inconsciente a todos los varones ¿Por qué a ti no te afectó?
Piccolo: No soy humano, soy del planeta Namek, allí no existen las mujeres.
Izbet: ¿Y cómo se reproducen?
Piccolo: El Gran Patriarca es el padre de todos, nacemos de un huevo que se expulsa de la boca… aunque yo nací en la tierra.
Izbet: silencio - verdaderamente me dejaste sin saber que decir… y eso es difícil. Te molesta si hablamos un poco mientras como, me ayuda a digerir rápido la comida… que tal es Gohan, Videl me contó que habías sido su maestro... - él le cuenta su historia, al terminar - ya pasó la hora tierna, recogeré todo y me prepararé para entrenar…

Al empezar a ordenar la mesa, uno de los hombros de la camiseta se suelta, y deja parte de su seno al aire, Piccolo no sabe si decirle o arreglarle la ropa, hizo dos o tres pequeños ademanes de acomodarla, tiene una gotita de sudor en la frente.

Piccolo: Cof… cof… es mejor que te arregles la ropa, se te soltó del hombro.
Izbet: Si vas a combatir con mujeres, debes dejar de complicarte por cosas así…

Esa jornada entrenan duro, aprende muy rápido, al terminar el día ya logra sentir el ki, hacer pequeñas esferas de energía, y mantenerse en el aire, pero siempre choca con algo.

Piccolo: Te vi moverte sin problemas en la Tierra, y acá chocas con todo… - le dijo al verla golpear una pared por enésima vez.
Izbet: El bastón me manda señales, así logró sentir si hay algo delante de mí, pero en el aire esta señal no se transporta bien, y no calculó las distancias.
Piccolo: Usa tus otros sentidos, dependes mucho de tu oído.

Ya al cuarto día de su rutina, en el desayuno, en vez que fuera Izbet quien le pregunte por él y sus amigos, Piccolo le pregunta…

Piccolo: Porque eres tan altiva, y soberbia con todos…
Izbet: Sé que todos me ven así. Cuando quede huérfana, todos me juzgaban sin conocerme, por eso me volví lo más fuerte e independiente que pude, con el tiempo me di cuenta que no sólo debía serlo físicamente, por eso cree el Conglomerado HEAVEN, y me volví una empresaria exitosa y temida… además... todos a quienes he querido han muerto, por eso sólo me tengo a mi misma. DEBO salvar a Videl, es la hija de la única amiga que he tenido en la vida.
Piccolo: Es difícil perder a tus seres queridos, si no amas a nadie, no hay dolor ni miedo a perderlos, pero tampoco cariño en tu vida - luego de un largo silencio entre ambos…
Izbet: Ya falta un día para llegar, no sé si nos dejaran quedarnos, allá son muy orgullosos de su raza, y sé que no querrán una mestiza ciega como yo - suspira con resignación - llegue a romper su perfección. Apenas bajemos, quédate al lado mío, y no digas nada, pase lo que pase.
Piccolo: No por ser todos iguales quiere decir que son perfectos.

En su interior Izbet siente que puede confiar en Piccolo, pero no logra olvidar que en el pasado, por eso, perdió al ser más importante de su vida. Al llegar al planeta del Pueblo Celestial, bajan al lado del palacio, todas las guardias les apuntan con sus armas, Izbet sale, y exige hablar con la Sagrada Madre:

Guardia: No puedes verla.
Izbet: Ni aunque quisiera, no podré VERLA nunca… - dice con ironía.
Guardia: avergonzada… - Quiero decir que no puedes ir a su presencia, no eres perfecta…
Izbet: Si no me llevas, dejare tu perfecto rostro como rompecabezas - Piccolo sonríe al escucharla

La Sagrada Madre aparece en una de las ventanas, y pide que los lleven a su presencia.

Izbet: Piccolo, puedes llevarme, por favor…

Ya en presencia de la Sagrada Madre.

Sagrada Madre: Sabes que no debes estar acá.
Izbet: Pero Sagrada Madre, quiero proteger a las terrícolas que trajeron las rebeldes, podemos ayudarles.
Sagrada Madre: Sé que toda ayuda es poca en este momento, pero serías un estorbo.
Izbet: Sagrada Madre ¿Y si logró vencer a alguna de tus guerreras?
Sagrada Madre: Está bien, hija mía, debo demostrarte tu error - Piccolo va a hablar, pero Izbet le aprieta el brazo, como recordándole lo que le dijo, a él le molesta que no le dirijan la palabra, pero supone que así como a Izbet, a él también lo consideran un ser imperfecto, sólo por ser distinto a ellos.

Cuando va a empezar la lucha, Izbet le pide a Piccolo que le describa el lugar lo más detalladamente posible, para hacerse una idea como es.

Piccolo: Sé que puedes ganarle.
Izbet: Llevó poco tiempo que aprendí a sentir el ki, cuando entrenó en la Tierra, tengo tiempo de aprender las ubicaciones de las cosas.
Piccolo: Ellas dependen de sus alas para volar y esos anillos como armas, piensa en que ventaja te da eso.

Piccolo se queda en un costado mirando, se le acerca Sagrada Madre.

Sagrada Madre: Ella tiene mucho espíritu, pero no puede ganar, por favor cuando pierda llévatela, no quiero que le pase nada malo, lo entiendes.
Piccolo: Es usted quien debe entender que a pesar de no ver, ella es igual o mejor que cualquiera de sus guerreras.
Sagrada Madre: ¿Le tienes mucha confianza, no?

Piccolo no dijo nada más, la pelea iba bien para Izbet, la otra guerrera va cansándose y se desespera al ver que no puede derrotar una ciega, se eleva y piensa atacarla por arriba, ya que su contrincante no tiene alas, ese es el momento que Izbet espera, sube y de una patada le quiebra un ala, ganando el combate.

Izbet: Ve Sagrada Madre, podemos ser de utilidad.
Sagrada Madre: Tal vez puedas quedarte, pero él no, lo siento.
Piccolo: ¿Por no ser perfecto? - pregunta con ironía.
Sagrada Madre: Porque no perteneces a nuestra raza… al menos ella es mestiza.
Izbet: Pero las rebeldes combatirán usando mujeres de otras razas.
Sagrada Madre: No porque ellas lo hagan, nosotros debemos imitarlas.

Entonces Izbet se acerca a ellos, y besa a Piccolo, lo toma del brazo como indicándole que no se mueva.

Izbet: se separa de él - Sagrada Madre, es mi esposo, por lo tanto, de alguna manera también pertenece a nuestro pueblo…

Sagrada Madre: Bueno querida, en esto eres igual a tu madre, tienes unos gustos muy… exóticos… es tarde, mañana temprano quiero conversar con ustedes, debo pensar. Guardia, llévelos a una habitación.

Todos inclinan sus cabezas, mientras Piccolo e Izbet siguen a la guardia, éste la mira con cara de asesino, y ella va como si no fuera con ella, total no ve nada, pero siente la mano de Piccolo que la tiene tomada muy fuerte, al dejarlos en la habitación, Izbet encuentra la cama.

Izbet: Piccolo ¿Qué lado prefieres? Yo pared, así no me caeré.
Piccolo: Porque diablos…
Izbet: Habla bajo, no quiero que nos oigan…
Piccolo: ¿Qué es eso que somos esposos? Me besaste.
Izbet: Si no lo hubiera hecho, no podré convencerlas que estamos casados. Eres el único aliado que tengo acá, no dejaré que te vayas del planeta. Vamos a dormir, si te ven fuera de la cama sospecharan, acuérdate de lo que dijo ese kaio no sé cuánto.
Piccolo: Kaiosama… bien.

Piccolo se acuesta al lado de ella, mirando al techo.

Izbet: Bueno cariño, hasta mañana, que duermas bien - le lanza un beso, le da la espalda, y se queda quieta inmediatamente…

Piccolo: Que facilidad para dormir.

La verdad es que no está dormida, sólo está pensando, en la noche Piccolo despierta al sentir unos sollozos.

Piccolo: ¿Qué te pasa, por qué lloras? - al no tener respuesta la toma del hombro y la hace que se gire, ella se acurruca en el pecho de él.

Izbet: No lloró, nunca en mi vida he llorado, ni cuando murió papá, él me dijo que debía ser fuerte, y lo he sido siempre.

Piccolo la abraza, y espera que se calme.

Izbet: Lo siento mucho, nunca me había pasado algo así
Piccolo: ¿Tienes miedo?
Izbet: No a morir, sino a fallarle a Videl, a la niña que quedó en la tierra que espera que su madre vuelva con ella, a Gohan, a Satán… por primera vez en años no tengo el control de nada, si no fuera por lo que me enseñaste, no habría podido ganar la posibilidad de quedarnos.
Piccolo: No debes angustiarte, también estoy aquí.
Izbet: Hace tanto que no confió en nadie. Papá enfermó, y un vecino iba a ir a buscar un médico, era invierno, y vivíamos en el campo, lejos de la ciudad, había pasado una tormenta, no teníamos como comunicarnos, pasaban las horas y nada de ayuda, volvió diciendo que no había podido llegar a la ciudad, entonces yo salí a buscar ayuda, camine y camine, ya exhausta, llegue al hospital, pero cuando volvimos nada pudo hacerse, era muy tarde, si en vez de confiar en alguien más hubiera ido yo, papá todavía estaría vivo.
Piccolo: ¿Qué edad tenías?
Izbet: 6 años.
Piccolo: Eras una niña, no puedes sentirte responsable por su muerte, ya no puedes hacer nada por el pasado, trata de dormir.

De a poco en los brazos de Piccolo Izbet logra dormir tranquila. Por fin él logra entender porque es su forma de ser, ha construido una barrera, para tener todo en su control, recuerda lo que le contó en el desayuno en el viaje, a ella también la han juzgada sin conocerla, me hace acordar a mí, le acaricia el cabello, y dormita un rato. Al otro día, Sagrada Madre los llama a su presencia.

Izbet: Buenos días Sagrada Madre.
Sagrada Madre: Buenos días, he pensado mucho sobre ustedes, se les permitirá a ambos quedarse.
Izbet. Gracias Sagrada Madre.
Piccolo: Sagrada Madre ¿Cómo se puede despertar a los hombres?
Sagrada Madre: Debe destruirse la perla, es la única forma para que el hechizo se rompa, pero las renegadas la tienen muy bien custodiada, nadie puede acercarse.
Piccolo: Izbet y yo iremos al cuartel de las rebeldes a destruir la perla, así no será necesario luchar, y las vidas de quienes están secuestradas no correrán peligro.
Sagrada Madre: Crees que podrán, esposo de Izbet.
Piccolo: Me llamó Piccolo. Si Sagrada Madre, podemos.
Sagrada Madre: No sabemos mucho de la base rebelde, sólo que están en unas cuevas en un acantilado al lado norte del planeta, no puedo decirles nada más, en la noche los llevarán hasta allí ¿Qué armas quieren llevar?
Izbet: Ninguna, Sagrada Madre.
Sagrada Madre: Pero ellos tienen láser - entonces Izbet lanza un rayo de energía que deja una marca en el piso…

En la noche los llevan lo más cerca posible del acantilado.

Guardia: Bien, de aquí en adelante están solos - Piccolo antes de bajar se quita la capa y el turbante, dejando ver sus antenas… la mujer mira, mueve la cabeza y se va, él ayuda a Izbet en los primeros tramos.

Piccolo: Ahora deberás confiar en mí, siente mi ki, y sígueme.

Se internan en busca de la perla, entran sin ningún problema, esto es muy fácil piensa Piccolo.

Izbet: Piccolo ¿Sientes a Videl y N°18?
Piccolo: Si, están cerca.
Izbet: Aprovechemos y liberémoslas, así ellas nos ayudarán.
Piccolo: Humm…
Izbet: Por favor…
Piccolo: Esta bien.

Llegan a un salón inmenso en penumbras, donde hay cápsulas con mujeres dentro, todas quietas, de repente se prende la luz, Videl y N°18 están al lado de la líder de las rebeldes.

Líder: Veo que la información fue correcta.
Piccolo: Debí suponerlo, si hay un enemigo adelante, siempre habrá un traidor.
Líder: Sagrada Madre debe estar muy desesperada, cuando manda a dos seres como ustedes para luchar su pelea.
Izbet: Si eres tan perfecta, ven a pelear conmigo…
Líder: Se me ocurre una idea mejor, tú - apunta a Videl - mátala, y tú - a N°18 - destrúyelo.

Empieza el combate.

Izbet: No podré hacerlo.
Piccolo: Maldición, debes atacarla, no sólo defenderte.
Izbet: No puedo dañarla.
Piccolo: Debes detenerla.

Piccolo ya tiene suficiente tratando de contener a N°18. Videl la ataca, desesperando a Izbet que no quiere golpearla, ya cuando Videl va a pegarle nuevamente en el rostro, Izbet genera un escudo oscuro frente a ella, sus ojos se vuelven totalmente negros, y en su espalda aparecen alas, pero negras como las de un cuervo, lanza una ráfaga oscura de ki, que tira a todos al suelo, empieza a levitar, extiende su mano, las esmeraldas de Videl y N° 18 se despegan de su frente, en el aire explotan desapareciendo. Pero no fue sólo a ellas, sino a todas las secuestradas que ya están libres del control de la rebelde, sigue avanzando lentamente, de pronto la perla de la sirena aparece volando hacia Izbet, envuelta en una onda de oscuridad.

Izbet: No debió nunca despertar esto, ya nadie podrá PARARLO - con ese grito la perla de la sirena se hace mil pedazos.

Piccolo se da cuenta que la piel de Izbet se está abriendo en algunas partes, sangrando, incluso de sus ojos salen lágrimas rojas, su cuerpo empieza a consumirse rápidamente.

Piccolo: Detente, esto te está matando.
Izbet: Por un momento sus ojos se vuelven blancos, y con tristeza le dice - No puedo evitarlo, no sé cómo detenerlo - sus ojos vuelven a ponerse oscuros, todo empieza a temblar, las mujeres corren para salir de las cuevas, y salvarse de las piedras que caen. Videl ha recobrado la conciencia, y se acerca a ella.

Videl: Por favor, Iz, detente - Piccolo y N°18 se acercan.
Izbet: VAYANSE.
Videl: No nos iremos sin ti, detenlo - ella y Piccolo se le acerca y la toman de las manos, durante unos minutos que parecen horas, Izbet va diluyendo poco a poco la oscuridad, sus alas van desapareciendo, ya cuando sus ojos vuelven a ser blancos, cae desmayada. Videl se agacha al lado de ella - está muy débil, ha perdido mucha sangre, casi no siento su pulso. Piccolo le da una semilla del ermitaño, sus heridas curan inmediatamente, cuando ella despierta no recuerda nada de lo ocurrido. Empiezan a ayudar a todas las mujeres a salir, las cavernas están colapsando, en ese momento aparece Goku, quien con su teletransportación, y guiado por el ki de sus amigos los encontró, viene con Gohan, Goten, Vegeta, Trunks… y Mr. Satán, entre ellos sacan a todas sin problemas. De vuelta en el Palacio Celestial.

Sagrada Madre: Gracias a ti y tus amigos, todo resultó bien para nosotras, las mujeres de los otros mundos serán devueltas sanas y salvas, no te preocupes, nos encargaremos, si quieres pueden quedarse con nosotros.
Izbet: Gracias Sagrada Madre, nuestra vida está en la tierra.
Sagrada Madre: Bueno hija mía, lleva nuestra gratitud eterna.

Goku se ofrece para llevarlos a todos a la tierra, pero Izbet se niega.

Izbet: No quiero dejar mi nave acá, nos veremos en la Tierra.

Cuando el resto se acomodan para teletransportarse de vuelta, Videl decide también irse con su maestra, Gohan y Piccolo también irán en la nave.

Videl: Por favor papá, que todo esté listo para cuando volvamos.

En el camino a la Tierra, Piccolo y Videl, les cuentan a Gohan e Izbet lo que pasó, al terminar entre los tres quedan esperando una respuesta de ella.

Izbet: La verdad es que no sé qué pasó.
Gohan: Por casualidad, tu padre no tenía cola de mono.

Ahora es Kaiosama quien habla (todos lo escuchan)

Kaiosama: Tu padre entró a este universo para buscar esclavos, era un demonio, pero tuvo un accidente y quedó mal herido, si no hubiera sido por tu madre, habría muerto, se enamoraron y decidieron casarse. Nadie sabía que heredaste ese tipo de poderes, deberás aprender a controlarlos, sino puede destruirte a ti y a quienes te rodean. Piccolo ¿Podrías llevarla al Templo Sagrado? Hablare con Kamisama para que pueda entrenar allá.

Luego de la boda, Izbet deja todo arreglado en sus empresas, y se va al templo sagrado.

Dende: Hola Izbet, que gusto conocerla, Kaiosama nos contó todo, tenemos una habitación lista para usted.
Izbet: Es un placer y un honor conocerlo Kamisama, le doy infinitas gracias por aceptar que pueda entrenar en su Templo - se inclina.
Dende: No tienes que ser tan formal, dime sólo Dende.
Izbet: Me dicen Iz.

Desde el primer día, Izbet se levanta de noche, y se sienta al borde del Templo a pensar, al principio no le dieron importancia, pero Piccolo nota que ya no tiene esa alegría ni la ironía que le había conocido en el viaje.

Piccolo: Algo le pasa, no está actuando como antes, no logra concentrarse en los entrenamientos.
Dende: Lo he notado, siempre esta pensativa, algo le preocupa ¿Habrá dejado a alguien y eso la tiene así?
Piccolo: No, que yo sepa no tenía amigos, ni familia, fuera de Videl.
Dende: ¿Desde cuándo la nota así?
Piccolo: Desde que volvimos del Planeta Celestial.
Dende: ¿Por qué no le pregunta?
Piccolo: Lo he hecho varias veces, y siempre me dice que nada.
Dende: Intentare conversar con ella mañana temprano.
Piccolo: Casi no ha dormido estos últimos días.

Al otro día, de madrugada.

Dende: Hola.
Izbet: Hola, no quise despertarte tan temprano.
Dende: No te preocupes.

Luego de un momento de silencio.

Dende: ¿Hechas de menos estar en tu vida normal?
Izbet: No, me gusta entrenar, sé que no lo he hecho bien, pero es que… lo hare mejor, lo prometo.
Dende: Disculpa, pero te notó preocupada desde que llegaste, algo o alguien te incomoda acá.
Izbet: No.
Dende: ¿Entonces qué pasa?
Izbet: … siempre pensé que mi padre era un humano normal, ahora descubrí que era un demonio, me contó todo sobre mi madre, pero no sobre él, era el encargado de buscar esclavos en otros universos para su planeta ¿Estará con mamá, o en el infierno? Ahora entiendo porque mis padres me pidieron que quemara sus restos, y sus cenizas mezcladas las esparciera cerca de la cabaña donde vivieron, creo que temían que no pudieran estar juntos en la otra vida.
Dende: Debes estar tranquila, tu padre debe estar en el paraíso con tu madre, se nota que fue una buena persona, por cómo eres tú, y que las quiso mucho a ambas.
Izbet: Gracias, estaré bien, sólo necesito tiempo para asimilar todo.

Piccolo escucha todo, luego de pensar un rato se acerca y le pide a Dende que acompañe a meditar a Izbet, que volverá a la hora de almuerzo, cuando llega le dice a ella que lo siga, después de un rato de volar hacia el sur, llegan a un palacio en medio de un lago.

Piccolo: Hola Uranai Baba.
Uranai Baba: Hola, un gusto tenerlos en mi palacio.
Izbet: Buenas tardes Uranai Baba, soy Izbet Supay - para que me trajo se pregunta.

Un hombre de piel morena, casi tan alto como Piccolo, con una aureola en la cabeza, aparece desde el palacio, mientras se acerca Izbet se pone nerviosa.

Supay: ¿Cómo estas angelito?
Izbet: PAPÁ, pero si estás muerto.
Supay: Se me permitió venir a verte, necesitamos conversar - se van lo más lejos que pueden.

Izbet: Papá, fui al Planeta de mamá, y descubrí que tengo grandes poderes, obviamente heredados de ti… ¿Por qué no me dijiste que eras un demonio?
Supay: Siempre temí que llegará este momento… hice cosas terribles en mi juventud, de las que no me enorgullezco, mi única justificación es que era lo que se esperaba de mí, no conocía otra forma de vivir. Todo cambio cuando llegue al planeta de tu madre, nos enamoramos, pero en ese lugar no nos permitiría estar juntos, así que fuimos a varios planetas, hasta que llegamos a la Tierra, allí ambos podíamos pasar por personas normales, bueno, a no ser por las alas de tu madre, por eso ella no salía casi de la cabaña. La culminación de nuestra felicidad llegó cuando supimos que estabas en camino, pero cuando naciste ella no quiso ir a un hospital, tuvo complicaciones y murió. Siguiendo sus deseos queme su cuerpo, así nadie descubriría que no era humana, como no demostraste tener ninguno de mis poderes, preferí no contarte nada, si tenías una gran fuerza, y habilidades para la lucha, así que por eso de pequeña te entrene, aunque según me contaron - mirando a Piccolo - has desarrollado poderes más grandes de los que yo tuve, no podía suponer que algo así pasaría, pero que más se puede esperar de la hija de un demonio y un ángel. Toma - le pasa algunas hojas - cuando supe que vendrías escribí todo sobre nuestra raza.
Izbet: Gracias, entiendo porque no quisiste decirme nada… no te juzgaré, yo también hice cosas poco santas… ¿Has visto a mamá? ¿Estás en el infierno?
Supay: No angelito, estoy en el paraíso, al cambiar mi vida, y por el amor que les tuve, y que ustedes me tienen, pude ir con tu madre, no te preocupes por nosotros, estamos bien, más ahora que vemos que por fin ya no estás sola - ambos se abrazan.

Se acercan a Uranai Baba y Piccolo.

Supay: dirigiéndose a Piccolo - gracias por todo, por favor, cuídela - el namekuseijin asiente con la cabeza.
Izbet: Papá, soy una mujer adulta, sé cuidarme sola.
Supay: Para mí siempre serás mi angelito.
Uranai Baba: Puede quedarse durante un día.
Supay: mirando a su hija - creo que ya no es necesario, o no angelito
Izbet: Llévale mis saludos a mamá, dile que la quiero mucho.
Supay: Ella lo sabe, adiós.

Piccolo e Izbet se despiden de Uranai Baba, quien hace propaganda a ella de sus servicios, en el camino de vuelta va callados, casi al llegar.

Izbet: Gracias.
Piccolo: Espero que ahora puedas entrenar como corresponde, y no hacerme perder mi tiempo.
Izbet: Como diga “Sensei” Piccolo jajajajajaja.
Piccolo: ¿Cómo? - pero ya había aumentado su velocidad para llegar antes al Templo. Ha vuelto a ser la misma, piensa sonriendo.

Luego de eso pudo Izbet concentrarse, y vuelve a su carácter de siempre, divirtiéndose al sentir las reacciones que provoca cuando entrenando su ropa se rompe “accidentalmente” en ciertas partes, dejando ver su ropa interior, o cuando al meditar les hizo creer que se había dormido. Una vez cuando estaba por perder una pelea con Piccolo, se hizo la desmayada, y cuando se acerca para ayudarla, ella le sonríe…

Izbet: Caes muy fácil en mis eng… - no alcanza a decir nada más, porque él la suelta, y se golpea en el piso - AMARGADO…

Ya al año, Izbet debe dejar el Templo, pero antes quiere dejarles un recuerdo, así que aunque Piccolo no está de acuerdo, logra que todos se saquen una foto, que luego hará pasar a relieve para ella.

Izbet: De verdad la he pasado muy bien con ustedes, los echaré de menos.
Dende: Puedes venir cuando quieras.
Piccolo: Si quieres podríamos entrenar de vez en cuando.
Izbet: Me encantaría seguir viniendo, así también puedo seguir practicando su idioma, Dende, y me puedes seguir contando de tu gente. Nos vemos… el próximo sábado entonces.

En el cumpleaños de Izbet, Bulma y los demás deciden organizarle una fiesta sorpresa, en una isla privada, todo un fin de semana de diversión. Bulma le presenta a Yamcha, con la esperanza que pueda pasar algo entre los dos, cuando le pregunta qué le había parecido, Izbet respondió que era un jovencito simpático, pero que a ella la gustan los hombres más maduros, el Maestro Rochi aparece atrás de ella, y le toma los senos, por fin una mujer que tiene buen gusto dijo, antes que nadie pudiera hacer nada ella puso sus ojos negros, y le golpea la cara al Maestro con sus alas, no vi venir esto, dice al ver las marcas que le quedaron. En ese momento llegan Dende y Mr. Popó así que, muy digna, se va a conversar con ellos. Esa noche, la última del fin de semana, hacen una gran fogata, lejos de la que como siempre está Piccolo, Izbet se acerca a él.

Izbet: Ya es más fácil para mí moverme, ahora que siento los ki, quería pedirte un favor muy especial… considéralo mi regalo de cumpleaños.
Piccolo: ¿Qué quieres?
Izbet: ¿Puedo tocar tu rostro? Quiero saber cómo eres…
Piccolo: Hummm…
Izbet: Por favor…
Piccolo: Esta bien.

Lentamente le toca la cara, vaya eres tal cómo te imaginaba, comenta… sigue a su cabeza, y le quita el turbante - no tienes cabello… y estas son… tus antenas - por la posición en que queda, sus caras están muy cerca una de la otra, y entonces… un grupo de atacantes aterriza, son terroristas, que al saber que está la dueña de la Corporación Capsula, deciden secuestrarla para cobrar rescate… fue una bataola, los secuestradores tienen que huir para que no los entreguen a la policía. Esta fiesta es genial, decían los sayayins mayores, contentos de haber podido “entretenerse” un momento.

Pasados 10 años, Izbet siente su cuerpo cansado, al ir al médico descubre que ha desarrollado una enfermedad incurable a la sangre, cuando está por morir, con ella están los que se han vuelto sus mejores amigos, Mr. Popó, Piccolo, y Dende.

Izbet: Gracias por estar acá, han sido mis mejores amigos en estos años.
Dende: Por favor… descansa.
Izbet: No te preocupes, no tengo miedo a morir, desde que los conocí mi vida ha sido increíble, he pasado muchos momentos alegres, te acuerdas Piccolo, cuando estuvimos casados…
Piccolo: Prometiste no decirlo nunca…
Izbet: Y ahora con que puedes amenazarme ¿Con matarme? Ya no me queda mucho… gracias por todo amigos, espero haber sido una buena amiga para ustedes, Mr. Popó, y Dende; y una buena compañera de entrenamiento para ti, Piccolo.
Piccolo: Eres mi mejor amiga.
Izbet: Piccolo…yo te… - muere en paz y tranquilidad.

Algunos años más tarde, Izbet está a la entrada del infierno, cuando llega Piccolo.

Piccolo: Debí suponer que estarías acá, no sentí tu ki en el paraíso.
Izbet: Ese lugar no era para mí, Enma Kaio Sama me mando para allá, pero me aburrí como ostra, fui a conversar con él, pero como se demoró en atenderme, conté chistes de ogros, sólo por eso me mando acá hasta que me disculpe con él… no tiene sentido del humor… - gracias Uranai Baba, tenías razón, Piccolo terminaría en el infierno, y yo lo esperaría siempre, pensó.
Piccolo: A todo esto ¿Qué me quisiste decir el día que pasaste al otro mundo?
Izbet: YOOOO - que hago… gotita en la frente
Piccolo: Si, tú.
Izbet: A… verdad - que digo - … yo… solo quería decirte que… esperaba que nos encontráramos acá, eso.
Piccolo: Hummm - al final sonríe, y le acaricia la mejilla con su mano - me alegra que estés conmigo - valió la pena este tiempo en el infierno sólo por esto, piensa Izbet - Entremos.

Así ambos seres, hijos de demonios, estarán en el infierno, juntos, hasta el fin de los tiempos.

FIN
Se fuerte, hazte grande pero no pierdas la inocencia de tu corazón...

Imagen
Avatar de Usuario
Arwen
Supersaiyano dai san dankai
Mensajes: 884
Registrado: Jue Ene 10, 2019 9:53 am

Re: Fanfic Angel Ciego by Izbet46

Mensaje por Arwen »

CAPITULO 2
Spoiler:
Ya nació la hija de Gohan y Videl, la pequeña Pan, quien tiene un poco más de año, su padre la lleva de visita al Templo Sagrado, donde están Piccolo (sin turbante ni capa) e Izbet con sus alas negras desplegadas, entrenando. Bulma ha reunido las esferas del Dragón para pedir varios materiales difíciles de hallar en la tierra, y aprovecha para que Pan conozca a Shen Long.

Bulma: Pequeña Pan, repite después de mí... Sal de hay Shen Long.
Pan: Al ay en lon.
Bulma: Y cumple nuestros deseos.
Pan: cumpe netos eseo.

La pequeña está emocionada, y sigue gritando palabras sin sentido, cuando la científica va a pedir el primer deseo, Pan grita muy fuerte: ... año.... Jdañ... haem...Piccolo... wowm...humano.

Shen Long: deseo concedido - se despeja el cielo, y las esferas se esparcen por el planeta convertidas en piedra, como fue un deseo muy poderoso el pedido, las esferas ya no pueden conceder más.

Todos voltean a ver a Piccolo, que está de rodillas en el suelo, ya no es verde, ni con orejas puntiagudas... es un ser humano, y con un ki de humano normal.

Izbet: ¿Qué pasó? ¿Dónde está Piccolo?
Bulma: Pan pidió un deseo a las esferas del Dragón...
Izbet: Algo escuche, pero no entendí bien...
Bulma: Pidió... que Piccolo fuera humano por un año.
Izbet: ¿...?
Gohan: Sr. Piccolo ¿Está bien?
Piccolo: Como quieres que este bien, soy un humano, mi poder ahora es ínfimo. Y tendré que estar un año así... - se levanta para tratar de volar, pero ni eso puede ahora, se deja caer al suelo.
Gohan: No se cómo disculparme, Pan no lo hizo consiente, es muy pequeña todavía.
Piccolo: Tengo tan poco Ki, que hasta Yamcha podría derrotarme...
Gohan: Sr. Piccolo, no sé qué decir.
Izbet: Piccolo, es un año, pasará rápido. No será toda tu vida... me enseñaste que a pesar de lo difícil de la situación, siempre hay algo positivo que rescatar.
Piccolo: Y que tiene de positivo ser humano.
Izbet: Ahora podrás entenderlos mejor.
Piccolo: ...
Izbet: Siempre me dices que no los entiendes, ahora podrás VIVIR como uno.
Piccolo: No quiero que me vean así, soy... era un guerrero con poderes extraordinarios, ahora soy menos que nada.
Gohan: Sr. Piccolo, si quiere podemos mantener esto en secreto...diremos... que está entrenando fuera del planeta, y no volverá en un año, así nadie lo buscara, y podrá estar tranquilo.
Piccolo: No quiero quedarme acá, y no iré a la casa de Goku, ni a la tuya Gohan, ni menos a la de Bulma, allí está Vegeta, no quiero que se burle de mí.
Izbet: Ven conmigo, vivo sola.
Gohan: Acepte.
Izbet: Vamos grandote, no te hagas de rogar, allá tendrás todo lo que necesitarás de ahora en adelante.
Piccolo: ¿Cómo qué? - y empieza a sonarle el estómago.
Gohan: Sr. Piccolo, no sea tan orgulloso, vaya con Izbet, por favor... - se arrodilla frente a él, y lo mira con ojos de perrito.
Piccolo: Esta bien, iré.
Gohan: Gracias, Sr. Piccolo... a propósito... - busco entre sus ropas - tenga – y le entrega un libro pequeño en blanco y una lapicera.
Piccolo: ¿Qué es esto?
Gohan: Úselo como un diario de campo, para que escriba sus impresiones al ser un humano, servirán... por ejemplo... para Dende ¿Intentará hacerlo?
Piccolo: Esta bien, lo intentaré.
Gohan: Gracias, Sr. Piccolo.
Izbet: Asunto arreglado, vámonos.
Piccolo: Por favor, que nadie más sepa esto- todos los presentes asintieron con la cabeza.
Gohan: Iz, por favor cuida muy bien de él.
Izbet: Lo cuidare como si fuera mi hijo - sonríe.

Piccolo se va abrazado al cuello de Izbet, que es mucho más baja de estatura que él, y ella lo sujeta de la cintura, el sonido de su estómago se hace más fuerte, así que lo lleva a una cabaña en medio del bosque. Mientras ella busca algo de comer en la cocina, Piccolo mira las fotografías de las paredes, algunas están en relieve.

Izbet: Tuvimos suerte, todavía hay atún, y algo de avena, no es lo ideal para ser tu primera comida, pero es lo único que no está vencido. Vengo poco por acá.

Mientras espera, se fija en una fotografía en relieve, hay una mujer con alas, su madre, y al lado abrazándola, está su padre. Luego de comer, mientras ella limpia y ordena todo, nota que a Piccolo le pasa algo.

Piccolo: No lo sé, siento una presión extraña en mi estómago, en la parte baja.
Izbet: Entiendo... hay un pasillo al fondo, busca a mano izquierda, la tercera puerta. Hay un tallado de un hombre y una mujer. Cuando llega Piccolo a la puerta dice BAÑO... cuando sale, encuentra a Izbet, escuchando un libro, pasa una maquina pequeña que está en su mano, y va traduciendo las letras en sonidos. Es el sistema que usa para poder leer algo cuando no está en sistema Braille.
Piccolo: ¿Qué lees?
Izbet: Un libro de poemas, mira éste se lo dedicaría a Vegeta... Me gustas cuando callas porque estas como ausente... (*Parte de 20 poemas de amor y una canción desesperada).
Piccolo: Hummm.
Izbet: Trata de relajarte. Es mejor irnos, está poniéndose frío, y no traemos ropa adecuada.
Piccolo: No me hace falta...
Izbet: Antes no, ahora sí, vamos.

Al llegar a la ciudad, Izbet le prepara un cuarto en su casa. Cuando está solo, Piccolo ve el diario que le regaló Gohan, y decide intentar escribir algo.

Diario
Hoy comienzo mi vida como humano, hasta ahora no le encuentro nada bueno, deben cada cierto tiempo comer, los sabores se sienten extraños, y ni hablar de ir al baño, muy traumante. Ojalá el tiempo pase rápido como me han dicho. No sé si logre llegar cuerdo al próximo año. Mañana iremos a comprar ropa, no sé por qué no puedo usar mi traje de entrenamiento como siempre, total si se rompe o se ensucia lo puedo regenerar. Ahora que lo pienso, ya no puedo generar ropa, maldito cuerpo humano. Iremos temprano para que no encontremos muchas personas, siempre que me ven los humanos se asustan. Aunque ahora soy un humano también.

Cuando van en el Mall camino de la tienda, Piccolo siente que todos lo miran al pasar, aunque ahora son sólo las mujeres quienes lo siguen con la mirada, y no con miedo precisamente.

Vendedora: Hola Iz, tanto tiempo que no venía, llegó una ropa interior que sé que le gustará.
Izbet: Gracias, pero hoy vengo por mi amigo... Ma... Ma... Yunia.
Vendedora: Un gusto Sr. Yunia.
Piccolo: Humm...
Izbet: Debes disculparlo, viene por una temporada, y perdieron todo su equipaje, ya sabes cómo son las líneas aéreas - se acerca y le dice muy bajo – odia probarse ropa ¿Podrías ayudarnos?
Vendedora: No hay problema – lo mira – ¿Qué necesita?
Izbet: Bueno, todo.

Empiezan a acumular cosas, calcetines, bóxers, un traje de baño, camisetas, alguna camisa, buzos, polerones, chaquetas, pillamas, lentes oscuros, gorros, zapatos y zapatillas. Ya ha pasado un poco más de una hora, antes de guardar todo en una cápsula, Izbet toma un bóxer, calcetines, zapatillas, pantalón de buzo y una camiseta.

Izbet: Anda al probador, cambia tu traje de entrenamiento por esto... no necesitas ayuda... - se ríe mientras él entra al probador, muy serio.
Vendedora: Iz, aproveche que su amigo se demorará algo, y pruébese este conjunto, le quedara precioso.

Así que Izbet entra en el probador al lado de Piccolo. Estaré probándome algo al lado tuyo - le dice. Cuando él termina de vestirse, sale a esperar a Izbet, se para frente a donde está ella, pero por su estatura, alcanza a ver como Izbet se colocaba un coqueto sostén. Todo sonrojado, se aleja un poco. Izbet se lleva el modelo, coloca todo en una cápsula, pagan y se va.

Izbet: Toma.
Piccolo: ¿Qué es esto?
Izbet: Una billetera, acá hay una tarjeta, cuando quieras comprar algo paga con ella, la clave es 666... no creo que tengas problemas para recordarla, además también hay dinero. Lo antes posible te traeré una tarjeta de identificación, no quisiera que tengas problemas con la ley. Este será tu celular, ya agregue mi número... y el de Gohan por supuesto, en casa te enseñare como usarlo. Ahora qué te parece si vamos a una pizzería que conozco cerca de acá... ya me dio hambre.
Piccolo: Vamos, también tengo hambre... que extraño suena eso.

Diario
Hace una semana fuimos a comprarme ropa, no tuve que probarme nada, todo me quedo bien. Luego fuimos a comer pizza, la gente a mí alrededor no me miraba con miedo. Volvimos a la casa, es grande, de dos pisos, con un antejardín, y un patio, parecida en dimensión a la de Bulma, pero de un estilo más tradicional. Acomode la ropa, pero tuve que llevarle un conjunto de lencería a Izbet, obviamente no era para mí. Los sentimientos al ser humano son más intensos, menos mal que no ve, sino se habría reído de lo rojo que estaba.

Luego me hizo tomar una fotografía, dijo que era para mi tarjeta de identificación, ayer la trajo, cuando le pregunte como la había conseguido, me guiño un ojo, y me dijo: entre los humanos muy poderoso es Don Dinero... ahora soy oficialmente Ma Yunia. Mi rutina diaria durante este tiempo ha sido en la mañana me levanto, desayuno, entrenó, y espero que llegue Izbet a media tarde meditando, o leyendo algo de su biblioteca. Aunque me ha dado dinero, y me dijo dónde puedo ir a almorzar, no quiero salir de la casa, prefiero comer algún emparedado, y cuando ella llega trae comida, o prepara algo para los dos, me cuenta de lo que hace en la empresa, y a descansar.


Ya ha pasado un mes, Gohan ha ido varias veces a visitarlo, y se va tranquilo al verlo bien. Izbet le enseña a Piccolo a usar la internet, y le deja una Tablet para que pueda entretenerse, al principio no le presta mayor atención, pero un día decide usarla para preparar algo para cenar.

Diario
Los días sábados debemos salir por algunas horas, ya que viene un equipo de limpieza, ahora entiendo porque iba al Templo ese día, en ese rato vamos a un parque cercano lleno de humanos, corremos, ejercitamos y comemos algo antes de volver a casa.

Siento que debo hacer algo por ella, se ha portado muy bien conmigo, así que buscaré como preparar algo fácil para cuando llegue de la oficina, me di cuenta que le gusta mucho una comida, y no se ve difícil de hacer.


Esa noche cuando llega Izbet, Piccolo la sorprende con su comida.

Izbet: Que...rico aroma...
Piccolo: Esta vez yo prepare la cena.
Izbet: Puré de papas con carne... (quemada).

Ella prueba un poco del puré, le hecha kétchup y se lo come todo... Piccolo espero hasta que ella termina para probar él. A la primera mascada...

Piccolo: Esto es incomible...
Izbet: ¿De dónde sacaste la receta?
Piccolo: De internet.
Izbet: Supongo que te quedó seco el puré...
Piccolo: Si...
Izbet: Y leíste que hay que echaste leche para que se pusiera más suave.
Piccolo: Si.
Izbet: suspira - Pero debe ser leche líquida sin sabor, no leche condensada... además si yo comí... tú también puedes. Gracias por cocinar para mí, es un lindo gesto - le toma la mano a Piccolo, quien la retiro rápidamente, le hecha también kétchup a todo y se lo come.

Diario
Ya hace tres meses que vivo acá, la rutina no me molesta, a decir verdad es como estar en el Templo Sagrado. Ya logre expulsar mi ki y volar, nunca pensé que me alegraría tanto poder hacer algo tan simple. Espero recuperar una gran parte de mis poderes en breve.

El primer día que le cocine algo a Izbet fue un desastre, ella se lo tomó con humor, lo encontró tierno, y me tomó la mano, me hizo sentir algo en el estómago, era vergüenza por lo mal que cocine. Ahora aprendí a preparar algunas cosas fáciles.
Ayer el sistema de guía del auto de Izbet se echó a perder, en el computador ingresas la dirección y te lleva, me dice que no quiere ir volando, prefiere hacer las cosas como los humanos normales, aunque no todos los humanos tienen un auto que se conduce sólo, deberá esperar una semana para que se lo arreglen. Pensaba tomar un taxi para desplazarse, sé que los odia, así que yo seré su chofer.

Piccolo: No es necesario que contrates un taxi, yo puedo llevarte hasta que arreglen tu auto.
Izbet: ¿Sabes conducir?
Piccolo: Hace años, Milk... con Goku aprendimos a conducir, debo practicar un poco nada más.

Esa tarde salen a practicar, Izbet va de copiloto.

Izbet: Hemos pasado muchos autos, creo que vas muy rápido.
Piccolo: Para nada, los otros son quienes van lento.
Izbet: ¡Qué pasó!
Piccolo: Nada
Izbet: Como que nada, sentí perfectamente como alguien grito.
Piccolo: Tal vez estuve a punto de atropellar a alguien, pero fue su culpa.
Izbet: ¿Seguro que sabes conducir...?
Piccolo: Sé conducir... aunque he olvidado un poco lo que leí en un libro que me entregaron esa vez.
Izbet: ¿Cómo se llamaba el libro?
Piccolo: Reglas de Tránsito.
Izbet: No puede ser... -tomándose la cabeza con las dos manos.

Esa noche repasan las reglas del tránsito, y a la mañana siguiente, guiado por el GPS, Piccolo se convierte en su chofer, afortunadamente ambos sobreviven la semana. Ya se acerca navidad, Gohan nuevamente va a visitar a Piccolo.

Piccolo: Ya han pasado 4 meses, faltan sólo 8 meses más y todo esto será un recuerdo, verdaderamente no lo he pasado tan mal como pensé.
Gohan ve el diario y lo toma.
Gohan: ¿Ya ha escrito algo?
Piccolo: Algunas cosas.
Gohan: ¿Puedo leerlas?
Piccolo: Prefería que por ahora no.
Gohan: le devuelve el diario - ¿Nos acompañará a las fiestas de fin de año? Puedo presentarlo como un amigo mío.
Piccolo: No, prefiero seguir como hasta ahora.

Esa noche Izbet le dice a Piccolo que se irá a las montañas, ya que siempre pasa las fiestas de fin de año en ese lugar.

Piccolo: Entiendo, puedo quedarme solo acá, no te preocupes.
Izbet: ¿Qué? No es eso. Ven conmigo, pasemos las fiestas allá. Acá se pone muy bullicioso todo ¿Sí?
Piccolo: Esta bien.
Izbet: Estaremos desde navidad a año nuevo, prepara tus cosas. Hay una persona que limpia y deja todo listo en mi refugio para estas fechas. Esa es la cabaña que fuimos hace tiempo te acuerdas, la construyó papá para mamá.

Diario
Llegamos a una cabaña para pasar las fiestas de fin de año de los humanos, es la misma que me trajo cuando me convertí en humano, no hay nada de comida, y también faltan otras cosas, así que Izbet quiere que vaya a comprar al pueblo, dice que debo "interactuar" más con los humanos.

En el pueblo, entra a la tienda.

Dueña tienda: Buenas tardes, en que puedo ayudarle.
Piccolo: Tengo esta lista...
Dueña tienda: No se preocupe... señor...
Piccolo: Yunia.
Dueña tienda: ¿Usted vino con la Srta. Supay?
Piccolo: Sí.
Dueña tienda: habla rápido, da la impresión que nunca respira, se mueve de un lado para otro buscando las cosas de la lista - Ella es muy solitaria como su madre, nunca la conocí, gustaba de quedarse en la cabaña, no bajaba nunca al pueblo. Su padre era una buena persona, algo testarudo, nunca quiso venir a vivir al pueblo cuando quedaron solos, crió a la Srta. Supay en esa cabaña, si ella chocaba y se caía él no la levantaba, le enseño a valerse por sí misma desde siempre. Acá se vendían las obras que hacia él, unas imágenes en madera preciosas, era un gran artesano, hace poco encontré una - le muestra una talla de madera, de 20 cms. de un ángel, al fijarse, Piccolo descubre que la modelo fue la madre de Izbet.
Piccolo: Me vendería esta estatua...
Dueña tienda: ¿Quiere regalársela a la Srta. Supay, verdad? No se preocupe, llévela, será un lindo presente de navidad para ella ¿Quiere que se lo envuelva? – Piccolo sólo afirma con la cabeza - Ella siempre se culpó por la muerte de su padre, ese año fue terrible la tormenta, fue un verdadero milagro que ella haya sobrevivido. Estas fiestas siempre las pasa en su cabaña. Acá tiene - Piccolo paga y guarda todo en una cápsula - Gracias por su compra y que tenga una Feliz Navidad.

A la mañana siguiente, Piccolo le da la estatua a Izbet.

Izbet: No tenías que regalarme nada.
Piccolo: Ábrelo.
Izbet: Es una escultura - la explora lentamente - ¿De dónde la sacaste?
Piccolo: Del almacén.
Izbet: La hizo mi padre... - se pone triste - gracias, no tenía ninguna de mi madre - se acerca y le da un beso en la mejilla - No compre nada para ti.
Piccolo: Con todo lo que has hecho, no necesitas regalarme nada.
Izbet: Vamos, hoy no hay que entrenar, es un día para estar contentos, no tristes - salen de la cabaña.
Piccolo: Todavía no me acostumbro a la sensación del frío.
Izbet: Has montado en trineo...
Piccolo: No.
Izbet: Entonces ven.

Ella se monta primero, para enseñarle a manejarlo, Piccolo se acomoda abrazado desde su espalda, a la primera chocan con un árbol, y caen en un montículo de nieve.

Piccolo: Sabes, mejor el que ve guía ¿Te parece?
Izbet: Me distraje, sé manejar bien este trineo. Vamos de nuevo.

Nuevamente lo intentan, por un momento logra hacerlo bien y toman velocidad, pero hay una saliente, y el trineo se eleva para caer de punta. De nuevo ambos a la nieve.

Piccolo: Ya me enseñaste a chocar, ahora mejor voy yo adelante.
Izbet: Pero...
Piccolo: Pero nada, si no me cuido, me matarás...
Izbet: Exagerado...

Se montan en el trineo, esta vez Piccolo va adelante, y ella abrazada a su espalda, llegan a un lago helado donde varias personas patinan.

Izbet: ¿Vamos a patinar?
Piccolo: No sé patinar.
Izbet: No te preocupes, busca donde arrienden patines y trae para los dos, te enseñare un truco.

Diario
Ayer le di una pequeña estatua que había hecho su padre de su madre. No entiendo cómo puede estar triste y contenta a la vez. Me dio un beso en la mejilla, sentí un calor en mi corazón, no es como cuando Gohan me demuestra su estimación, es parecido pero distinto a la vez, que raras son las emociones humanas. Luego fuimos a un lago congelado. Patinamos – o mejor dicho volamos muy bajo – tranquilos, sin prisa. Hacía mucho que no sentía una paz así.


Los siguientes días entrenan en la mañana y meditan en la tarde, un día casi al anochecer, se sientan a meditar a un costado de la cabaña, Izbet siente que la nieve que está acumulada en el techo está por caerse.

Izbet: Piccolo...
Piccolo: Que quieres...
Izbet: lo pensó mejor - Voy al baño.

Cuando ya llega a los primeros árboles, la nieve cae sepultando a Piccolo, Izbet vuela a esconderse en una rama alta y oculta su ki, cuando él puede salir, la busca por todos lados.

Diario
Hace dos días atrás, quede enterrado en la nieve, Izbet me jugo esa broma, se escondió, pero pasó mucho frío por eso. Cuando llegó a la cabaña estaba con una fuerte tos, al otro día amaneció con mucha fiebre, tiritaba y hablaba incoherencias. Cuando ya estaba por llevarla a un hospital, despertó y no hubo forma de convencerla de salir. Al final la hice guardar cama todo el día, en la noche estuve a su lado, cada vez que la tos la despertaba, le daba algo tibio de tomar, y la arropaba. Al otro día despertó mejor, pero por seguridad decidí que no saliéramos a entrenar. Ella tiene películas muy interesantes, vimos una con robots, rebeldes, y una estrella de la muerte.

Por fin es víspera de Año Nuevo.

Izbet: Luego del abrazo de las 12, con papá, cenábamos, y escuchando música esperábamos el amanecer ¿Quieres acompañarme?
Piccolo: Bueno.

Esa noche a las 12 en punto, ella le da el abrazo de Año Nuevo, luego sirve un poco de champaña para el brindis, al principio a Piccolo le parecía amarga, y le molestan las burbujas, como Izbet toma sin problemas la suya lentamente, riéndose de él, se toma la copa de un trago, sintiéndose mareado inmediatamente.

Izbet: Mejor anda a dormir.
Piccolo: Es temprano, quiero esperar el amanecer.

Ya a las 4 de mañana, y luego de tomarse media champaña más, se queda dormido en el sillón.

Izbet: Ya grandote, debes ir a dormir... ayúdame... ni que tuvieras los huesos con adamantium... debo dejar de escuchar tanta televisión...

Ya al llegar a la cama de Piccolo, intenta dejarlo caer suave, pero él la toma del hombro, y la hace cae debajo.

Izbet: Muévete, me aplastas...
Piccolo: En su borrachera levanta un poco la cabeza - ... te ves tan hermosa...

Al terminar de hablar, la besa... el beso es muy dulce, tranquilo, él le acaricia la cara, y peina sus cabellos con sus dedos.
Piccolo: Se siente tan agradable... - en ese momento cae totalmente dormido, ella se suelta de sus brazos, lo acomoda bajo los cobertores y se va.

Diario
Anoche Iz me dio el abrazo de Año Nuevo, tome champaña... y no recuerdo nada más. Hoy en la mañana me levante y tuve que ir rápidamente al baño a darme una ducha fría, por primera vez desde que soy humano, tuve un sueño erótico, soñé que una mujer me besaba y acariciaba, se sentía tan real, que mi cuerpo reaccionó, por más que lo intento no logro recordar su rostro, esta mente y cuerpo humano tiene reacciones que todavía no logro entender ni controlar, que un simple sueño me haya puesto así es ilógico.


Izbet: Pensé que dormirías toda la mañana, te deje algo para la resaca.
Piccolo: Yo no tengo resaca... - pero al hablar fuerte, su cabeza parecía que se partiría - Dame eso.
Izbet: Si no estás acostumbrado no debiste tomar la primera copa tan rápido, ni menos seguir con la mitad de la botella. A la noche debemos irnos, mañana debo dejar todo listo en la oficina, por un tiempo debo ir a la filial de Florida ¿Vendrás conmigo, verdad? Así podrás usar el traje de baño que te compre...

Diario
Iz tiene una vida increíble, tiene un buen nivel de pelea, es una empresaria exitosa, la veo desenvolverse como si no fuera ciega en la casa, me siento cómodo a su lado, incluso cuando estamos en silencio. Al parecer tiene todo un pasado oscuro, hace poco le pregunte como había conseguido la tarjeta de identificación, obviamente es falsa, pero está muy bien hecha. Contactos de mi juventud, sé dónde ir para conseguir lo que necesito. Hasta ahora no he podido decirle que no a nada de lo que me pide, ser humano me ha ablandado.


Ahora vamos a Florida, a una casa frente al mar. Se parece a Kame House. Al llegar nos esperaba un tipo, parece modelo de revista de moda, con una sonrisa de aviso de dentista, saluda a Iz con un beso en la mejilla, me dieron ganas de borrarlo del planeta.

Francou: Iz que bueno tenerte acá, veo que por fin tiene un guardaespaldas, con lo que ha pasado es lo mejor.
Izbet: No es un guardaespaldas, es un amigo. Te presento a mi representante en este lado del país, Francou. Francou, un buen y viejo amigo mío, Ma Yunia.
Piccolo: Mucho gusto - le apretó la mano fuerte.
Francou: El gusto es mío - dijo, pero en sus ojos se veía odio.
Izbet: ¿Para cuándo está la reunión fijada?
Francou. Al medio día.
Izbet: Volteando hacía Piccolo - Nos dará tiempo para disfrutar de la playa. Nos vemos más tarde Francou.
Francou: Hasta luego, Iz.

Diario
Hoy estuvimos en el mar. A Iz no le gusta entrar a la parte profunda, se queda en la orilla, así que le hice creer que tenía una pierna atrapada, llegó justo cuando una ola nos chocó y la envolvió, salió llena de arena, con el pelo revuelto... con ganas de asesinarme. Ahora entiendo porque ella siempre me hace ese tipo de bromas, ya me cobre lo de la nieve. Llegó la hora de la reunión, así que fue a arreglarse, iré con ella a la empresa.

Piccolo: ¿Por qué Franosecuanto dijo que era bueno que tuvieras un guardaespaldas?
Izbet: Nada importante, nos vemos a la tarde.
Piccolo: Espérame, iremos juntos.
Izbet: No necesito un guardaespaldas.
Piccolo: Iré como tu "viejo amigo".

Al llegar a las oficinas se encuentran con Francou, quien se va con Izbet a la reunión, dejan a Piccolo en la recepción, allí se entera que han llegado notas de extorsión, algunos edificios de las empresas han sufrido atentados con bombas, incluso ya hubo dos intentos de secuestrar a la dueña. Vuelven a la casa de la playa al atardecer, ya en la noche se sientan en la arena a mirar el mar, con una linda luna llena de fondo.

Piccolo: Escuche que ha habido atentados en algunas de tus empresas.
Izbet: Siempre pasa eso, es el precio de tener negocios exitosos.
Piccolo: Y siempre pasa que tratan de secuestrar a la dueña.
Izbet: No debí dejar que me acompañaras, no pasó nada, ves que estoy bien.
Piccolo: ¿Qué ocurrió?
Izbet: Todo empezó hace como un año, tuve problemas con mi auto, al tomar un taxi, en el camino el auto se desvió, metieron gas donde estaba, pero no me hizo efecto, logre arrancar la puerta, y volé fuera, eso fue todo.
Piccolo: Escuche que fueron dos veces.
Izbet: Tienes mejor oído ahora que cuando eras namekuseijin, a todo esto, te falta un poco más de medio año para que vuelvas a ser tú, que te ha parecido la experiencia...
Piccolo: No me cambies el tema. YYYYY....
Izbet: Entraron a la empresa una noche cuando estaba sola, me sorprendieron, me inyectaron algo para dormirme, según me dijeron después que era como para dormir un oso, mi organismo es parecido pero no igual al de los humanos, solo me adormecí por un momento, durante el cual me amarraron y amordazaron. Apenas pude, rompí las amarras que eran de cable reforzado, llame a la policía, los tipos huyeron antes que llegarán.
Piccolo: ¿Por qué no me... por qué no nos contaste que te estaba pasando?
Izbet: No lo creí necesario, no es como que nos invadan extraterrestres, ni que quieran acabar con la tierra, eso me incumbe solo a mí, yo debo ver cómo resolverlas, sabes que soy independiente. Es verdad que nunca me había pasado algo así en las empresas, pero no me amedrentarán. Hasta ahora no ha muerto nadie, y yo estoy bien, además ahora estas tú para ayudarme, hombre fuerte...
Piccolo: Ya no tanto...
Izbet: Tu siempre serás el ser más fuerte del mundo para mí, me siento segura a tu lado.

Hay música suave en la radio, ambos están en silencio, lentamente Piccolo acerca su mano a ella, pero antes que se la tome, empieza a sonar el celular de Izbet, insistentemente.

Izbet: Es el tono de Francou, ya vuelvo.

Contesta, y le dice a Piccolo que debe irse enseguida, ha habido un problema grave en una de las empresas.

Diario
Hace un rato atrás estábamos en la playa con Iz, tuve que obligarla a que me contará que la habían tratado de secuestrar dos veces, me molesta que no hubiera tenido confianza en mí, aunque luego me dijo que ella siente que yo soy el más fuerte del mundo, y que se siente segura a mi lado. Sentí ganas de tomar su mano, se veía tan bella en la arena, con su rostro hacia el cielo, pero llamó ese tipo de la sonrisa perfecta, y se fue.


Ya amanece e Izbet no aparece, decide llamarla a su celular, pero no contesta, no logra sentir su ki, ya cuando se decide a ir a sus oficinas a tratar de encontrarla, le llaman del celular de ella.

Piccolo: Te he llamado varias veces y no me has contestado.
XXX: Es porque no puede – contesto una voz conocida de hombre.
Piccolo: ¿Dónde está Iz?
XXX: Busca el camino de la playa, hacia el norte, un gran edificio abandonado, apúrate, si quieres alcanzar a verla con vida.

Antes de salir, llama a Gohan.

Celular: Nuestro cliente tiene su teléfono móvil apagado, o se encuentra fuera del área de cobertura. Grabe su mensaje después de la señal...bip.
Piccolo: ... Gohan, secuestraron a Iz, estamos en la playa que te comente, búscame apenas escuches este mensaje.

Piccolo llega al edificio lo más rápido que puede, entra con cuidado, pegándose a las paredes para ver qué pasa, en una de las habitaciones del primer piso, Izbet tiene atada sus manos con cadenas a lo más alto de un pilar, está desmayada y con todo su peso tirando de sus manos, en su cuerpo se ven marcas sangrantes y moretones de golpes. A su lado está Francou, tiene el labio con sangre, y parte de la mejilla mordida, está terminando de instalar algo en un detonador. En el suelo ve un látigo lleno de sangre, Piccolo hierve de furia, la torturó. Trata de acercarse, pero Francou está pendiente y lo ve.

Francou: Tendrás que esperar un poco para el espectáculo - amenaza con una cuchilla cortarle la garganta a Izbet si Piccolo se acerca.
Piccolo: No te escondas tras una mujer.
Francou: Arruinaste todo, iba a casarme con Iz, en esta visita le iba a proponer matrimonio, vi cómo te trato ayer, nunca nadie la había acompañado, ni menos vivido con ella, por eso la traje aquí, dirás que estoy loco, pero sé que es mucho más fuerte de lo normal, incluso la he visto volar, y como rompió un cable reforzado con que la ataron.
Piccolo: ¿Cómo sabes todo eso? Tú eres quien la quiso secuestrar las otras veces.
Francou: Si, quería tenerla para mí nada más, el ataque a las empresas era una distracción. Tengo cámaras en su casa de la playa, ella sería mi esposa, debía cuidarla. Tuve que darle algo para dormir elefantes, las otras dos veces no funcionó y aun así costo mucho para que perdiera la conciencia totalmente.
Piccolo: Maldito, cómo pudiste hacerle algo así.
Francou: Yo no quería, ella me obligó, solo quería que me besará, y me mordió la cara, cuando le di otra oportunidad, casi me arranca un pedazo de labio. Ahora todos moriremos.
Piccolo: Si la amas, déjala viva.
Francou: No, porque ella no me ama... yo que daría mi vida por ella, yo que idolatro cada paso que da - termina de instalar los cables.

Piccolo se mueve rápido para tratar de quitarle el detonador antes que los hagan estallar, en el forcejeo, éste se activa, tiene segundos antes que la explosión derrumbe el edificio, lo único que se le ocurre es proteger con su cuerpo a Izbet. Justo en el momento que el edificio queda en el suelo, llega Gohan, que empieza a buscar el ki de su maestro, entonces siente una gran energía que sale de los restos del edificio pulverizando todo. Afortunadamente Piccolo sujetó los escombros y cuando piensa que ya no podrá seguir sosteniéndolos, concentra toda su energía, y destruye todo. Su energía por un segundo fue tan poderosa como cuando era namekuseijin.

Gohan: Sr. Piccolo ¿Está bien?
Piccolo: Yo sí, pero Iz está muy mal. Llévala donde Dende, yo iré con ustedes apenas pueda... AHORA YA.

Gohan sale lo más rápido que puede con ella en sus brazos, intentando no tocar las heridas de su cuerpo. Ya en el Templo Sagrado, Gohan la lleva a una habitación, Dende la cura, ambos no pueden creer todo lo que le pasó, tenía el cuerpo lleno de golpes y latigazos. La dejan dormir, mientras esperan a Piccolo, cuando llega también le curan sus heridas. A las horas Izbet sigue durmiendo, así que Kamisama se queda con ella, cuando despierta trata de atacarlo.

Dende: Soy yo, Dende, tranquila, estás a salvo.
Izbet: ... ¿Piccolo cómo está?
Dende: Bien, no tenía heridas graves.
Izbet: Nunca pensé que Francou estuviera loco, puso cámaras de vigilancia en mi casa de la playa, me quiso secuestrarme varias veces. De verdad estaba desquiciado.
Dende: Llegaste media muerta.

Izbet: Ese loco trato de abusar de mí, por eso todas las veces que trato de secuestrarme me daba algo para dormirme, pero no lo deje, preferí enfurecerlo, y que me torturará. Quiso besarme y lo mordí varias veces, se acostó sobre mí, en ese momento me reí en su cara, le dije que lo tenía pequeñito, no como mi amigo Yunia, supongo que por eso lo llamó, me puso un cuchillo en la garganta, le rete que me matará, que prefería eso a ser suya. Eso lo desquicio totalmente, dijo que yo le rogaría que me tomará, me amarró con las cadenas al pilar, empezó a darme latigazos, al ver que no lograba doblegarme comenzó con los golpes, ya en ese momento no pude aguantar más y me desmayé. Mi esperanza era que el sedante que me había dado diluyera su efecto, como me pasó con los otros, y así podría usar mis poderes. Me sentí tan inútil al no poder defenderme.
Dende: Ahora descansa, y trata de no golpear a quien éste al lado tuyo cuando despiertes.
Izbet: Lo siento, todavía estoy mareada.

Diario
Francou estaba loco, obsesionado con Iz, la torturo a latigazos y golpes, porque ella no quiso ser de él. Al final no pude evitar que el edificio se desplomara. Por suerte logre concentrar todo mi ki, y destruir los escombros, por un segundo tuve mi poder completo, luego quede sin fuerzas, le tuve que pedir a Gohan que la llevará al templo para que Dende la curará, durmió por varias horas, cuando despertó yo estaba cerca de una de las ventanas, escuche todo lo que hablaron con Dende, le hizo creer a Francou que éramos amantes, para evitar que abusara de ella. Estoy sintiendo cosas extrañas, que no sé definirlas, me siento muy confundido.


Esa noche la pasan en el templo, al otro día se van a la casa de la playa. Justo en ese momento llega la policía y los investigadores, les dan cuenta que Francou fue encontrado muerto, bajo un edificio abandonado, al parecer estaba probando algún tipo de explosivo, y algo le resultó mal, lo identifican como el autor de los atentados. Por todo esto, Izbet pasa varias jornadas a tiempo completo en la oficina. Luego de unos días vuelven a la casa de la ciudad, y la rutina vuelve a ser la misma, aunque Piccolo empieza a tener pesadillas donde Izbet muere, y él no puede ayudarla. Una noche.

Izbet: Estabas gritando por eso te desperté.
Piccolo: Era otra pesadilla...
Izbet: Hace días que tienes pesadillas ¿Es por lo que pasó en el edificio?
Piccolo: ...
Izbet: No debes sentirte así, no pudiste salvarlo, tuviste que elegir, y te agradezco que pudiste destruir todo para salvarnos.
Piccolo: Si, debe ser eso.
Izbet: No debes sentirte así, te quiero mucho y te debo tanto - le da un beso en la mejilla - Ahora para que no tengas más pesadillas por esta noche... permiso - se mete en la cama, y se acomoda.
Piccolo: ¿Pero qué haces?
Izbet: Estaré al lado tuyo, cuando tengas otra pesadilla, te despertaré enseguida.
Piccolo: No es necesario.
Izbet: No me convencerás, ahora a dormir, mañana será otro largo día.

Diario
La rutina vuelve a ser como antes, por unos días tuve pesadillas donde veía morir a Izbet, anoche tuve otra, ella me despertó, y para que no tuviera pesadillas, durmió conmigo, al final sólo ella durmió, estuve toda la noche despierto, mirándola, por fin sé que me pasa, estoy enamorado, por eso tenía esos sueños, era mi miedo a perderla ¿Qué debo hacer? Aunque su auto está funcionando, la acompaño al trabajo, por ahora he decidido vivir el día a día lo que más pueda a su lado, pero los días pasan demasiado rápido.


Una tarde, Izbet está bañándose en la tina, y Piccolo entrena en el patio, cuando siente un grito, llega volando y la encuentra en un rincón de la tina.

Izbet: Hay un bicho en el agua, por favor, mátalo, llévatelo pero que se vaya YA...
Piccolo: Es sólo una araña pequeña.
Izbet: No soporto cuando un bicho cae al agua y me camina por la piel... - Piccolo sigue allí, sin moverse – Supongo que te está costando llevarte al bicho... ¿Verdad? O te estas poniendo como el maestro Roshi - Piccolo se va inmediatamente.

Esa noche Piccolo se acuesta, y a media noche siente que alguien lo besa, al abrir los ojos es Izbet, la abraza y aspira el aroma de su pelo, se sientan en medio de la cama, ella se quita su blusa y le quita la camiseta a él, cuando quiere sacarse el sostén, Piccolo se le adelanta, la besa en el hombro, y aprovecha de mirar para desengancharlo, siguen abrazados acariciándose, y besándose. Ella lo abraza del cuello y se acuesta, haciendo que él quede encima, ninguna palabra es dicha, sólo gemidos suaves salen de sus bocas. Ella mete su mano y toma su virilidad, Piccolo no puede evitar estremecerse, se siente tan bien cuando sube y baja su mano, aprovechando que ella está en eso, él se quita su ropa interior y el pantalón. Ya siente que va a acabar, pero no quiere hacerlo en las manos de ella, la acomoda sobre él, para poder succionar esos pechos, que sin ser exuberantes, se sentían perfectos, le besa la frente, la cara, el cuello, los hombros, y con sus manos la acaricia por la espalda, baja a su cadera y le quita la falda, y la ropa interior. Ya la excitación en ambos está llegando al máximo, como ella está montada en sus caderas, la acomoda, y muy lentamente empieza a entrar, es tan estrecha, y cálida, comienza a subir y bajar, ella se afirma en los brazos de él para poder tener mejor control. Piccolo quiere que ella acabe primero, pero ya no puede aguantar, la llena de su semen, gruñendo suavemente. En ese momento despierta, y piensa, otra vez a cambiar las sábanas y darme una larga y fría ducha.

Es tanta la angustia que siente, que cuando faltan unas semanas para su cambio, y aprovechando que a Izbet la invitan a una premiación, Piccolo decide acompañarla, y confesarle su amor, si lo acepta, buscará la forma de volver a ser humano, pero esta vez para siempre. Se viste con un traje negro, camisa blanca, y una humita, en ese momento baja Izbet, con su cabello planchado, un vestido negro, sin hombros ni espalda, está sujeto por el cuello solamente; a la altura del muslo, con un adorno de lentejuelas, empieza una apertura lateral, sus medias panty son color natural, opacas. En vez de un abrigo, usa un chal negro, en sus hombros, sus zapatos son de tacón medio.

Izbet: Vamos - Piccolo vuelve a la realidad, la toma del brazo - debí ponerme taco alto, pero me incómoda mucho, es que a tu lado debo verme como una hobbit (mide 1.60).

Ya en la cena, los rodean los periodistas, es la primera vez que va con alguien a un evento, y todos quieren la primicia, por si era su novio.

Izbet: Es un amigo. Gracias por preocuparse por mi vida - hacía Piccolo - entremos rápido.

Ya en la espera de la ceremonia, las cosas son más tranquilas, música clásica, nadie acosándolos, hasta que Bulma se acerca para saludar.

Piccolo: Viene Bulma pero no veo a Vegeta.
Izbet: Ni yo lo siento.
Bulma: Hola Izbet, que gusto verte - se hace la que no lo conoce – y quien es este caballero.
Izbet: Srta. Bulma Brief, le presento a mi amigo, Ma Yunia.
Bulma: Un gusto Sr. Yunia, mi esposo no pudo venir ¿Puedo acompañarlos?

En ese momento invitan a todos a sentarse para la premiación, Izbet, Bulma y Piccolo se acomodan en la misma mesa, al costado contrario de donde está la científica, se sienta Piccolo. Aprovechan de conversar los tres, es una velada muy amena. A Bulma la premian por el invento del año, y a Izbet, por la empresaria emergente. Ya terminada la actividad y la cena, empieza la música, así que Piccolo aprovecha de invitar a bailar a Izbet.

Piccolo: Con su permiso, vamos a bailar.
Bulma: Por supuesto. Nos vemos más tarde.

Ya en la pista de baile.

Izbet: Bailas muy bien.
Piccolo: Es como la fusión, nada complicado - cree que llegó el momento adecuado para declararse, pero...
Izbet: Disculpa, voy al baño.

Mientras ella va, Bulma se acerca a Piccolo.

Bulma: Te notó nervioso ¿Qué pasa?
Piccolo: Es que... me enamore de Iz, y quiero decírselo.
Bulma: Pero pronto volverás a ser...
Piccolo: Lo sé, pero si ella me acepta encontrare la forma de ser de nuevo humano para siempre.
Bulma: Te ha dado muestras que siente algo más que amistad por ti.
Piccolo: Siempre está contenta al lado mío, una noche dormimos juntos.
Bulma: ¿QUÉ?
Piccolo: Sólo dormimos, dor... mi... mos, nada más.
Bulma: No te ha besado en los labios, o coqueteado.
Piccolo: No... no sé.
Bulma: Te parece que vea si puedo averiguar algo.
Piccolo: Bueno.
Bulma busca a Izbet y la encuentra en un balcón.
Bulma: Hola, pensé que habías ido al baño.
Izbet: Si, pero me sentí algo mareada, me excedí demasiado con la champaña.
Bulma: Estas contenta.
Izbet: Al contrario, estoy algo triste, pronto Piccolo volverá a ser namekuseijin.
Bulma: ¿Eso te entristece?
Izbet: Sí, me había acostumbrado tanto a su presencia en la casa, siempre he sido una loba solitaria, son pocas las relaciones que he tenido tan cercana con alguien, y ahora que está por terminar el año, sé que lo echare de menos.
Bulma: ¿No será que sientes algo más por él?
Izbet: ...
Bulma: Cariño... amor...
Izbet: ... si supieras lo irónico de tu comentario.
Bulma: Dime, puedes confiar en mí.
Izbet: Estoy enamorada de él, pero no como humano.
Bulma: Pero si como namekuseijin no te puede amar.
Izbet: Lo sé, por el humano siento mucho cariño, pero es parecido a cuando estaba con mi padre, la madrugada de Año Nuevo me besó, no creo que se acuerde porque estaba borracho. Me gusto, no lo niego, pero no aceleró mi corazón como cuando sé que iré a entrenar al Templo Sagrado, desde el día anterior me pongo nerviosa, y mi corazón se acelere sólo pensando que me saludará...
Bulma: ...
Izbet: Para mí, son dos personas totalmente distintas, su presencia la siento distinta. Sé que soy una tonta, pero no puedo ir contra mis sentimientos, no podría sentir lo mismo por nadie más. Lo amo cuando es un namekuseijin, alguien que no es capaz de sentir nada por mí como yo quisiera, me conformo con los momentos que pasamos juntos en el Templo - empieza a llorar - lo hecho tanto de menos.
Bulma: Lo siento, no quise...
Izbet: Está bien - secando sus lágrimas - ya era hora de desahogarme. Por favor, no digas nada, promételo.
Bulma: Pero...
Izbet: Promételo Bulma.
Bulma: Esta bien, lo prometo.
Izbet: Ahora iré a buscar a Piccolo, será mejor irnos. No me siento bien.

Bulma piensa como cumplir con la promesa a Izbet, y ayudar a Piccolo, cuando de detrás de la cortina, lo ve salir con los ojos vidriosos, él le hace un gesto, para indicarle que escuchó todo, que no se preocupe.

Piccolo: Te estaba buscando.
Izbet: Estaba tomando aire, me siento mareada. Te molesta si vamos a la casa, por favor.

Diario
Esta noche escuche lo que nunca pensé, Iz me ama, pero no como humano, sino como namekuseijin. No le diré nada, ya para ella es suficiente llevar ese sentimiento, que sabe nunca será correspondido, para cargarla más sabiendo que estoy enamorado de ella, en esta forma humana. Pronto terminará esto, y será lo mejor para todos. Ya no escribiré más.


Un día antes del cambio.

Piccolo: Me voy al Templo.
Izbet: Estaré allí mañana, promesa.

Esa noche en el Templo Sagrado Piccolo tiene un sueño, donde está frente a frente, en su forma humana y namekuseijin, conversando.

Piccolo: Por fin volveré a ser un namekuseijin.
Ma Yunia: Ella te ama, no sientes nada.
Piccolo: Nada, recuerda que yo no puedo sentir ese tipo de amor.
Ma Yunia: No quiero que esto desaparezca, tampoco quiero desaparecer.
Piccolo: Como tú, tus sentimientos desaparecerán, y volveré a mi vida normal, todo será un recuerdo, nada más, no te preocupes, no le diré nada de lo que escuchaste, la seguiré tratando como siempre, te lo prometo.
Ma Yunia: Quisiera que al menos mi amor por ella no desapareciera.
Piccolo: Eso es imposible. Supongo que quieres que guarde tu diario.
Ma Yunia: Sí, gracias, no quiero que nadie lea lo que escribí, a pesar de todo no fue tan malo este año, o no.
Piccolo: Sonriendo de lado - tuvo sus momentos interesantes.
Ma Yunia: Lo sabía, fue un gusto conocerte.

Al momento de darse las manos, despierta. Pasan lentamente las horas, llegan Gohan e Izbet, mientras esperan conversan entre ellos, ya falta muy poco, así que Piccolo pide hablar solo con Izbet, van al lado contrario del Templo donde no pueden verlos.

Piccolo: Ha sido un año extraño para mí, te agradezco haberme tenido en tu casa.
Izbet: Soy yo quien te agradece el que fueras a vivir a mi casa, me sacaste de mi soledad, y por un tiempo, volví a sentirme como cuando estaba con mi padre, además de haberme salvado la vida. Pero llega el momento que debemos ser lo que somos y volver a la realidad. Si alguna vez puedo pagarte todo lo que has hecho por mí, solo dímelo.
Piccolo: Nunca cambies.

FAVOR EN LA MEDIDA DE LO POSIBLE ESCUCHAR ESTA CANCIÓN PARA LEER EL FINAL (https://www.youtube.com/watch?v=05d_P4KInEQ )

Izbet: ¿Ni siquiera un poquito?
Piccolo: Trata de confiar más en mí, siempre te cuidaré.
Izbet: Lo haré. Gracias por todo - se acerca para besarlo en la mejilla, pero él voltea la cara, pensando te daré mi último regalo y la besa en los labios, en ese momento se produjo el cambio, cuando se separaron, ya era el guerrero namekuseijin.

Al sentir su ki, Gohan, Dende y Mr. Popó llegan, pero ellos ya están separados y nadie se dio cuenta de nada de lo que pasó.

Gohan: Me alegro de volver a verlo.
Piccolo: Yo también.
Dende: Se le echaba de menos.
Piccolo: Gracias a todos. Echaba de menos sentirme así.

Luego de un rato en que conversan todos, menos Izbet que está pensativa, Gohan se despide.

Gohan: Debo volver a casa, lo vendré a ver lo antes posible.
Piccolo: Nos vemos.
Izbet: Yo... también debo irme.
Piccolo: Te espero el sábado para entrenar.
Izbet: Acá estaré.

Izbet se va pensando en el beso ¿Habrá oído lo que converse con Bulma? Se convence que fue solo un accidente, a pesar de eso, jamás en su vida olvido esa sensación cálida en sus labios. Aparentemente todo vuelve a ser como antes. Lo que nadie nunca sabrá, es que durante las noches de Año Nuevo que Izbet pasa en la cabaña, después que Piccolo volvió a ser el mismo, una sombra está en el bosque. Mientras ella cocina, cena y escucha música esperando el amanecer, esa sombra está presente, aunque ella no logra sentirla. Cuando el sol aparece en el horizonte, Izbet se va a dormir. Hace rato ha estado todo tranquilo, en ese momento la sombra se acerca a la casa, y saca una tarjeta de identificación a nombre de un humano llamado Ma Yunia, y el diario de un guerrero que durante un año fue humano, luego que termina de leerlo, la sombra mira a la casa, guarda las cosas nuevamente entre su ropa y se va. Al mirar hacia atrás, por un instante, por un solo instante, la mirada del namekuseijin refleja nostalgia y melancolía. Luego todo vuelve a la normalidad, al menos por un año más.

FIN
Se fuerte, hazte grande pero no pierdas la inocencia de tu corazón...

Imagen
Avatar de Usuario
Arwen
Supersaiyano dai san dankai
Mensajes: 884
Registrado: Jue Ene 10, 2019 9:53 am

Re: Fanfic Angel Ciego by Izbet46

Mensaje por Arwen »

CAPITULO 3: VACACIONES EN NAMEK
Spoiler:
VACACIONES EN NAMEK

Ha pasado tiempo desde que Piccolo dejó de ser humano, Izbet sigue entrenando en el Templo Sagrado, ya habla fluido namekuseijin, y se le ocurre una de sus locas ideas.

Izbet: ¿Qué les parece ir de vacaciones al Planeta Namek?
Piccolo, Dende y Mr. Popó: ¿?
Izbet: Me han hablado tanto de ese lugar ¿Por qué no ir?
Piccolo: Queda muy lejos para ir en una nave.
Izbet: Una vez me contaste que Goku los llevó ¿Hace cuánto que no van? Iremos todos ¿Verdad?
Mr. Popó: Mr. Popó no idá.
Izbet: ¿Y tú, Dende? ¿Irás? Apóyame.
Dende: No sería mala idea, por unos días.
Piccolo: ¿Qué pasará con la Tierra?
Izbet: Por unos días la Tierra no correrá peligro, además, si pasa algo Goku puede ir a buscarnos.

No muy convencido Piccolo acepta ir al Nuevo Namek, con Izbet y Dende, Goku los lleva con su teletransportación, al llegar son rodeados por los namekuseijin, el nuevo Gran Patriarca los recibe con los brazos abiertos.

Gran Patriarca: Que alegría volver a verlos.
Dende: Gracias Gran Patriarca.
Gran Patriarca: ¿Pasa algo malo? ¿A qué se debe su visita?
Dende: Gran Patriarca, le presento a nuestra amiga, Izbet.
Izbet: Un gusto conocerlo, Gran Patriarca - hablando en el idioma namekuseijin.
Gran Patriarca: El gusto es mío, habla perfectamente nuestro idioma.
Izbet: Gracias, todo es mérito de Dende, él me enseño, quisiera conocer más de su cultura ¿Le importaría que nos quedáramos unos días con ustedes?
Piccolo: Gran Patriarca, entendemos si nos dice que no.
Gran Patriarca: Es un honor tenerlos por el tiempo que quieran, a la Srta. Izbet tendremos que acomodarla en una casa para ella sola.
Izbet: No se preocupe, traje una casa para mí en esta cápsula.
Goku: Ya que se van a quedar me voy ¿Cuándo debo volver a buscarlos?
Izbet: anticipándose a todos – en 10 días. Gracias Goku, adiós – se va.
Piccolo: Se suponía que eran sólo un par de días.
Izbet: Si pasa algo, Goku prometió venir a buscarnos, tranquilo. Disculpe, Gran Patriarca, yo no puedo ver, uso varios equipos especiales, que me permiten moverme sin chocar ¿No hay problema por eso?
Gran Patriarca: Por eso sus ojos son blancos, no creo que sea ningún inconveniente.
Izbet: De nuevo gracias, Gran Patriarca.
Gran Patriarca: Le llevare donde pueda instalar su casa, me imagino que quiere descansar un poco.
Izbet: La verdad no estoy cansada, pero es una buena idea instalar la casa.

Luego de dejar todo listo en la casa, pasea un poco con Dende del brazo por la aldea, es la curiosidad de los más pequeños, que nacieron luego que se fueron de la Tierra, es la primera vez que ven una mujer, aunque se mantienen lejos, sólo los adultos conversan con ella. En las afueras de la aldea, están los namekuseijin pertenecientes a la casta guerrera, entrenando, Piccolo está cerca observando.

El líder del grupo, Tochac, está entrenando con cada uno de los demás por turnos, orgulloso de ser el mejor de todos, a pesar de ser joven, desea lucirse al tener a este gran guerrero cerca. Cuando llega Izbet y Dende, el joven guerrero está echando a un pequeño del lugar de forma muy brusca, el niño va llorando, y sin ver por donde va choca con Izbet.

Izbet: Se supone que quien no ve soy yo.
Jattyta: Lo siento.
Izbet: ¿Cómo te llamas?
Jattyta: Jattyta.
Izbet: ¿Por qué te hecho de esa manera ese tipo?
Jattyta: Es que quiero aprender las técnicas de los guerreros, pero no me dejan porque soy del Clan Dragón.
Izbet: ¿Es así, Dende?
Dende: Si, recuerda que te conté, un guerrero no pueden manejar los poderes del Clan Dragón, y nosotros no luchamos
Izbet: Que ridículo. Jattyta ¿Quieres acompañarme a conocer tu planeta?
Jattyta: Me encantaría... ¿Cuál es su nombre?
Izbet: Dime Iz.

En ese momento Tochac se presenta con Piccolo, y le pide entrenar con él, cortésmente se niega, pero el joven insiste, entonces Izbet interviene.

Izbet: Piccolo, este joven parece ser fuerte, será un buen entrenamiento para ti...
Piccolo: ... - está callado, ve los ojos de Izbet plomos, señal que está muy molesta, aunque por fuera se vea tranquila.
Izbet: Pero primero tendrás una pequeña lucha conmigo... ¿Cómo te llamas?
Tochat: Tochat, no quiero combatir contigo, sino con él, no lucho con seres débiles.

Piccolo va a responderle, pero Izbet se le adelanta.

Izbet: Si soy tan débil como dices, no te costará vencerme, te propongo algo, si ganas, Piccolo entrenará contigo todos los días hasta que nos vayamos, pero si pierdes no insistirás, ganará quien logre sentarse al menos 5 segundos en su oponente ¿Estás de acuerdo? – dirigiéndose a Piccolo.
Piccolo: Sí.
Tochat: No luchó con seres inferiores, pero contigo haré una excepción.

Mientras la lucha es a nivel de piso, al ser más pequeña Izbet se escabulle fácilmente, varias veces le puso el pie y lo bota al suelo, entonces podría haberse sentado los 5 segundos, pero no lo hace, cuando siente que el joven se desespera, y sus amigos murmuran entre ellos, Izbet le tira su bastón a Dende.

Izbet: Ten, cuídamelo, por favor. Ahora sin bastón, a ver si es más fácil para ti.

Entonces se eleva en el aire, Tochat la sigue.

Izbet: Ya estás listo.

Apenas termina la frase, desaparece, el joven la busca con la vista, pero no la ve, hasta que ella carraspea, está debajo de él, apenas baja la vista ella sube y lo golpea en la barbilla con su cabeza, luego se queda frente a él de brazos cruzados, apenas pudo recuperarse algo, el joven le tira varias bolas de energía, pero ella sólo las desvía con sus manos. Rápidamente se traslada Tochat a la espalda de ella, para tirarle más energía, Izbet no se mueve, hace aparecer sus alas, y con ellas bloquea los ataques.

Izbet: Mejor volvamos al piso, siento que estás cansado para seguir en el aire – hace desaparecer sus alas y lo espera en el suelo.

El joven trata de golpearla con patadas y puñetazos, pero ella sigue esquivándolo, con los brazos cruzados, ya casi agotado concentra todas las fuerzas que le quedan para darle un puñetazo en el rostro, ella espera hasta el último momento, dobla la cadera, ladea el tronco, toma su mano y lo empuja para adelante, con el envió del golpe que quería darle, más la fuerza con que ella le tira el brazo, cae al suelo, Izbet se sienta sobre él, cuenta hasta 10 y se levanta.

Izbet: Piccolo, no tendrás que luchar contra éste... como fue que dijiste Tochat... ya me acuerdo, este ser débil, inferior. Dende, por favor pásame mi bastón. Jattyta, voy a comer algo, nos vemos en una hora en mi casa.

Dende se va con Izbet.

Piccolo: dirigiéndose al joven - tuviste suerte, luchó con menos del 5% de su poder, aprende esta lección, nunca subestimes a tu enemigo por las apariencias – y sigue a los demás.
Piccolo: ¿Por qué hiciste eso? Te ganaste el odio del joven.
Izbet: ¿Me ves preocupada? No me gustó como trató al pequeño, podría haberlo echado no tan prepotente, me molesta cuando alguien se cree mejor que los demás, y sólo es... un mocoso cualquiera.
Piccolo: ¿Qué te pasa en realidad?
Izbet: Fue por culpa de un muchacho así, en un monasterio que estuve luego que mi padre murió, que tuve que huir y pase la peor parte de mi vida ¿Es verdad que por ser del Clan Dragón no debe aprender a luchar?
Piccolo: Así es.
Izbet: Pero ¿Y tú?
Piccolo: ¿Yo qué?
Izbet: El Rey Piccolo, tu padre, era un luchador, pero su mitad Kamisama era del Clan Dragón, ya que tú eres la reencarnación de tu padre, un luchador, pero su parte buena era del Clan Dragón y ahora ambos son uno, si se puede ser de ambos clanes...
Piccolo: No empieces con tu retorcida lógica, el pequeño no aprenderá a luchar y punto.
Izbet: Al menos lo intente ¿Me acompañas mientras almuerzo?

Luego de comer, se reúne con Jattyta, quien le enseña los lugares cercanos.

Izbet: De verdad quieres aprender a luchar ¿Cuáles son tus poderes del Clan Dragón?
Jattyta: Mis poderes no se comparan a la de los guerreros, no sirven para una lucha, he visto como entrenan los guerreros, quisiera ser como ellos.
Izbet: ¿Y si te enseño? Son pocos días los que estaré ¿No te importa?
Jattyta: Se lo agradecería Srta. Iz.
Izbet: Sólo Iz.

Aprovecha que nadie se ve ni se siente por esos lados, para entrenarlo, pero Tochat los ve, y se lo cuenta al Gran Patriarca.

Gran Patriarca: Quisiera hablar con usted.
Izbet: Dígame Gran Patriarca.
Gran Patriarca: Sabe que alguien que pertenece al Clan Dragón no debe aprender artes marciales.
Izbet: con su mejor voz de inocente - no sabía, disculpe, estuve enseñando a Jattyta.
Gran Patriarca: No se preocupe, supuse que no sabía.

Se acerca Piccolo que escuchó todo.

Piccolo: Le mentiste al Gran Patriarca.
Izbet: Una mentira blanca, no le hace daño a nadie.
Piccolo: Te dije que no debías hacerlo.
Izbet: Es una tontería, no estoy de acuerdo con que al pequeño lo encasillen sólo por haber nacido en un clan.
Piccolo: Te guste o no es así, será mejor que no lo sigas entrenando, sino nos vamos a la Tierra enseguida.
Izbet: ¿Y cómo llamarás a Goku? - se va a descansar.

Cuando ya está sola en casa, siente ruidos en la ventana.

Izbet: ¿Quién anda hay?
Jattyta: Soy yo.
Izbet: ¿Jattyta? Sé que los adultos sólo duermen algunas horas en el día, pero los niños deben dormir como los humanos ¿No tienes sueño?
Jattyta: No, todavía no estamos cansados, quería agradecerte que me entrenarás, escuche cuando el Gran Patriarca te dijo que no lo hicieras, no quiero que tengas problemas por mí.
Izbet: No te preocupes, eso lo veremos luego ¿Cómo que no estamos cansados?
Jattyta: ... es que algunos amigos y yo queremos ver como es una casa humana ¿Podemos?
Izbet: ¿Y dónde están tus amigos? No los escucho.

De atrás de unos arbustos salen varios niños.

Izbet: Pasen, prometo que no me los voy a comer.

Cuando entran, están con curiosidad de todo lo que ven sobre todo la cocina y el baño, aunque sólo beben agua, Izbet deja descongelando helado, y al rato le da un poco a cada uno para que prueben. Las horas pasan y llegan adultos buscando a los niños, quienes están escuchando historias y cuentos de la Tierra. Todos se van prometiendo volver al otro día, pero Jattyta pide permiso y se quedará con Izbet hasta que ella vuelva a su planeta. Al otro día apenas desayuna, golpees suaves se sienten en la puerta. Eran los niños (más que el día anterior) que quieren explorar la casa, y escuchar los cuentos, cuando no entienden algo Izbet trata de explicárselos, pero se enreda y todos terminan riendo, Piccolo y Dende llegan en ese rato y encuentran la casa convertida en un Jardín Infantil.

Piccolo: ¿Qué pasa?
Izbet: Me vinieron a visitar, les gusta estar acá.
Niños: Si, todo es increíble.
Piccolo: Niños, no deben incomodarla, ella vino a conocer su planeta.
Jattyta: La llevaremos a conocer el lugar y que juegue con nosotros - sale envuelta entre los niños, van contentos, ríen y conversan entre todos.

Al otro día, Izbet se levanta más temprano con Jattyta y salen antes que lleguen sus amigos, quiere enseñarle un poco más de artes marciales, pero esta vez los encuentran Dende y Piccolo.

Piccolo: IZBET... - el niño se abraza a una de las piernas de ella.
Izbet: ¿Qué pasa?
Piccolo: Te dijeron que no lo entrenarás.
Izbet: Que tiene de malo - frente a frente.
Piccolo: No debes hacerlo, él es namekuseijin, y nuestras costumbres son esas, si tanto quieres mandar en la vida de un niño, entonces ten uno propio.
Izbet: Se pone pálida y baja la cabeza - Lo siento Jattyta, no podré seguirte entrenando ¿Igual quieres estar conmigo estos días que quedan?
Jattyta: Por supuesto.
Izbet: Vamos a casa, ya deben estar por llegar tus amigos.
Dende: cuando se fueron - no debió decir eso.
Piccolo: Es la verdad, no es de nuestra raza, no debe entrometerse.
Dende: Iz no puede tener hijos.
Piccolo: ...
Dende: Una vez me contó que no puede concebir.

Durante un par de días, Izbet y Piccolo no se ven para nada, ella está muy dolida con sus palabras, así que pasa las horas con los niños, y alguno de los jóvenes que también quieren conocer sobre la Tierra, luego caminan y le explicaban todo lo que le llama la atención.
Pero la paz del lugar es rota, llegan pobladores de otras villas, los han atacado, y están atrapando a todos los habitantes que pueden. Piccolo va a investigar, y descubre que embarcan a todos los capturados en naves. Algunos de los invasores, con su líder, llegan a la aldea, donde el Gran Patriarca trata de razonar con ellos.

Gran Patriarca: Somos gente de paz
Comandante: Así será más fácil llevarlos a todos.
Gran Patriarca: ¿Qué quieren?
Comandante: Somos de otra dimensión, venimos a buscar esclavos. Este planeta es muy extraño, solo hemos visto hombre y niños - al ver a Izbet - por fin, una mujer.
Izbet: pensando, otra dimensión, buscan esclavos ¿Serán del pueblo de mi padre?
Comandante: He preciosa, ven conmigo - se adelanta hacía Izbet, entonces el pequeño Jattyta se pone frente a ella, para protegerla - tienes un pequeño renacuajo de mascota.
Izbet: ¡¡¡COMO TE ATREVES A DECIRLE ASÍ!!!
Comandante: Tienes temperamento, más me gustas.
Izbet: En el idioma namek – que todos se pongan detrás de mí, rápido - entonces genera un campo de fuerza para cubrirlos a todos con una mano, y lanza bolas de energía con la otra.

En ese momento llega Piccolo, con los guerreros namekuseijin, y empieza la batalla. Izbet llama a Piccolo (solo habla en idioma Namekuseijin, para que no les entiendan).
Izbet: Rápido, dime si quien los manda tiene una especie de guadaña bordada en el hombro izquierdo, y un tridente en vez de espada.

Piccolo: Así es ¿Sabes quiénes son?
Izbet: Son el pueblo de mi padre, tengo una idea para derrotarlos, confía en mí, luego te explicaré todo.
Piccolo: ¿Qué debo hacer?
Izbet: ¿Alguien puede mantener el campo de fuerza? Necesito mis manoslibres – varios toman su lugar, y se lleva a Piccolo donde no pueden verlos. Lepasa su energía, y el cuerpo de él empieza a brilla, con un tono bronce antiguo- ahora dile que eres el Supremo Demonio, y que este universo es tuyo, es unade sus leyendas - le rompe la parte superior de su ropa - el Supremo Demonio usa el torso descubierto, ve tranquilo, cuidare a todos.

Piccolo sale y enfrenta al Comandante.
Piccolo: Soy el Supremo Demonio, este universo me pertenece. VAYANSE.
Comandante: No creo que seas ese dios, veamos que tal peleas.

Piccolo se aleja de la aldea, para evitar que alguien sea dañado en la lucha. El Comandante se adelanta, y le lanza una pequeña esfera de energía, fue más para que se detuviera que para dañarlo. Acá está bien, empecemos, dice.

Piccolo se prepara expulsando su Ki, golpea al Comandante con un Makankosappo, al estar mezclada con la energía negativa de Izbet, era una espiral un lado verde y el otro negro. Al recibir el ataque cae contra una montaña, dejando su silueta en ella. Rápidamente vuelve a colocarse frente a Piccolo, eres hábil, dice, mientras se limpia la sangre que sale de su boca, reconozco que tu energía se parece a la mía, pero sigo sin creer que seas el Supremo Demonio.

Siguen con patadas y puñetazos, por mucho rato, sin darse un golpe mortal, en un movimiento rápido, Piccolo desaparece de la vista del Comandante, quien lo busca por todos lados en el aire. En eso momento desde la espalda aparece, y le lanza un rayo de electricidad desde sus antenas, que lo atonta, luego se clona hasta rodearlo, y le ataca con poderosísimos haces de energías proyectadas desde ambas manos, cuando va cayendo el líder de los demonios, Piccolo desaparece los clones, con una mano agarra la muñeca de su otro brazo y dispara varios poderosos rayos de energía que terminan de estrellarlo contra el piso, se levanta una gran nube de polvo, por fin ha derrotado al Comandante, ya no puede levantarse, en el aire, Piccolo parece la estatua de un dios primitivo vuelto a la vida.

Por mientras en la aldea, Izbet usa el campo de fuerza para proteger a los aldeanos, varios namekuseijin la ayudan, en eso Tochat, es golpeado y cae inconsciente, Jattyta sale del campo de energía para tratar de ayudarlo, cuando lo arrastra a la protección donde están los demás, se dirige hacia ellos una descarga, el niño forma una barrera de energía sin necesidad de mantenerla con sus manos levantadas, así logra llegar con sus amigos. Unos momentos después el Comandante ordena que termine la lucha, que liberen a todos los esclavos, que se irán para siempre, y decreta que este universo le pertenece al Supremo Demonio.

Cuando los invasores embarcan para irse, está el Gran Patriarca, Piccolo (todavía con el tono bronce en su piel), Dende e Izbet, quienes han revisado todas las naves, y se aseguraron que no quedó ningún namekuseijin prisionero, al despediste el comandante se arrodilla.

Comandante: Fue un placer y un honor haber luchado con usted, dios. Nunca volveremos a su universo.

Piccolo al ver como mira de reojo a Izbet, en un gesto inconsciente la abraza de la cintura.

Comandante: al ver esto - Señora, debí suponer por su prestancia y poderes, que era la esposa del dios. Mis disculpas si mis palabras la ofendieron. Nos vamos.

Todos se quedaron quietos hasta que las naves se pierden en el cielo, en ese momento Izbet se afirma en el brazo de Piccolo para no caer, está agotada, cuando él la toma en sus brazos, se desmaya.

Dende: Ocupó demasiada energía, sólo necesita descansar, Piccolo, por favor puede llevarla - sujetando a Jattyta - es mejor que la vayamos a ver más tarde – esperaba que pudieran conversar ella y Piccolo.

Cuando llegan a la casa de ella, él la acuesta y le devuelve parte de poder, hasta que pierde el color bronce en su piel, en ese momento Izbet despierta.

Izbet: Todo salió bien.
Piccolo: Sí, tu plan funcionó, por fin se fueron y nunca volverán.
Izbet: Sé que podías ganarle sólo con tu poder, pero al tener mi energía oscura, sería fácil hacerte pasar por el Supremo Demonio. Gracias por tomarme de la cintura ¿Tanto se notó que estaba débil?
Piccolo: Si... Izbet, lamentó lo que te dije el otro día...
Izbet: tocando con sus dedos los labios de Piccolo, haciéndolo callar – No te preocupes, tenías razón, me guste o no son las tradiciones y costumbres de tu pueblo, no tengo porque entrometerme, es que a veces soy muy obstinada.
Piccolo: ¿A veces?
Izbet: Casi siempre.
Piccolo: Descansa, Jattyta y los demás deseaban estar contigo, pero quiero que duermas un poco antes.
Izbet: ¿Podrías quedarte hasta que me duerma? – Piccolo no dice nada, se sienta en el borde de la cama, le acomoda el cabello, y vela su sueño hasta que ya está recuperada.

Cuando despierta y come algo, van a la aldea donde están sus amigos, contentos de verla recuperada.

Jattyta: ¿Ya te sientes bien?
Izbet: Sólo necesitaba descansar.
Jattyta: Si tu poder es tan grande ¿Por qué no los derrotaste tú?
Izbet: No creo que hubiera podido sola, no soy tan poderosa como crees. Al pasarle parte de mi poder a Piccolo, y hacerse pasar por su dios, usamos sus leyendas contra ellos. Ahora este universo quedó para siempre fuera de su campo de caza de esclavos.
Piccolo: Usaste demasiado poder en el campo de protección.
Izbet: No podía dejar que les pasara algo, han sido tan buenos conmigo.
Gran Patriarca: Por eso queremos demostrarle nuestro agradecimiento. Acá tiene las Esferas del Dragón, puede pedir el deseo que quiera.
Izbet: Gracias, se los agradezco mucho.

Izbet invoca al Dragón, y pide... un galón de helado de lúcuma.

Gran Patriarca: Me siento confundido, pensé que pediría otra cosa.
Izbet: ¿Cómo recuperar mi vista?
Gran Patriarca: Sí.
Izbet: Le agradezco, pero ya me han ofrecido eso, la hija de una amiga, sé que algunos lo consideran un problema, pero por no tener vista logre todo lo que me decían que no podría, fue un aliciente en mi vida, si hubiera sido "normal", tal vez no hubiera logrado nada de lo que soy ahora, lo considero una característica, así como hay personas altas, con pecas, de pelo negro, yo soy ciega, si no me acepto a mí misma como soy quien lo hará.
Gran Patriarca: La verdad no lo había visto así.
Izbet: Bien niños, quien quiere ser el primero en comer helado.

Al otro día, temprano en casa de Izbet, de nuevo están los niños y jóvenes, entre estos últimos está Tochat, quien se disculpa con Izbet, y le pide si podría, antes que ella volviera a la Tierra, entrenar juntos. Los demás días pasan volando, entre los niños y sus entrenamientos con los guerreros, hasta Piccolo participó, lamentablemente llega Goku a buscarlos.

Izbet: Fue un placer haberlos conocidos a todos, espero poder venir otra vez.
Gran Patriarca: Será un honor tenerla con nosotros de nuevo.
Izbet: a Jattyta – Te echaré de menos, y lamento que no puedas ser un luchador.
Jattyta: Luego de ver lo que hiciste, comprendí que no todos en una pelea ayudan luchando, también hay que proteger a la gente que uno quiere.
Izbet: Me alegro que lo entiendas, además, me dijeron que puedes hacer campos de energía sin tener que dirigirlos con las manos, yo todavía no puedo, cuando seas mayor tendrás grandes poderes, estoy segura. Ten, es un recuerdo de estos días.
Jattyta: Gracias, es el libro que me leías para dormir, tiene lindos dibujos – Libro El Gigante Egoísta de Oscar Wilde.

Ahora se despide Tochat.

Tochat: Gracias por todo lo que me enseñaste.
Izbet: De nada, fuerte guerrero, a ti también te auguro un gran futuro.

Cuando ya están listos para irse tomados de Goku, Piccolo se acuerda de lo que dijo el Comandante.

Piccolo: A todo esto, que fue lo que te dijo el Comandante, que luego pidió disculpas.
Izbet: ... sólo que soy la más bella de los universos que ha visitado, que quería llevarme con él, casarse conmigo, y hacerme la mujer más feliz de todas.
Piccolo: A bueno... ¡¡¡¡CÓMO!!!!
Izbet: Jajajajaja.
Y vuelven a la Tierra.

FIN
Se fuerte, hazte grande pero no pierdas la inocencia de tu corazón...

Imagen
Avatar de Usuario
Arwen
Supersaiyano dai san dankai
Mensajes: 884
Registrado: Jue Ene 10, 2019 9:53 am

Re: Fanfic Angel Ciego by Izbet46

Mensaje por Arwen »

CAPITULO 4
Spoiler:
Luego de mucho tiempo, Izbet deja de ir por algunas semanas al Templo, les avisa que está muy ocupada con asuntos de sus empresas, así que no sabe cuándo podrá volver. Piccolo, aburrido de entrenar solo, decide ir donde Goku, para ver si pueden ejercitarse juntos, allá encuentra a Gohan y su familia, todos están conversando de las fotografías en la prensa de Izbet y el dueño de una empresa internacional almorzando en un restaurant exclusivo, justo el día que tendría que haber ido al Templo, en el artículo dicen que hay una relación muy estrecha entre ambos, e indica que los dos empresarios son millonarios, deportistas, solteros sin hijos.

Milk: Ella debería aprovechar, con él podría dejar de trabajar, y dedicarse a formar una familia.

Gohan: No creo que ella quiera una vida así.

Videl: Suegrita, si se casará, el esposo sería quien se quedaría en casa, no dejará a nadie la dirección de sus empresas, según recuerdo son varias las propuestas de matrimonio que ha recibido... empresarios, deportistas y científicos.

Milk: Una mujer es totalmente feliz cuando tiene una familia a quien cuidar.

Videl: En su caso no creo.

Gohan: ¿Qué piensa usted, Sr. Piccolo?

Piccolo: No sé ni me interesa - mirando con el ceño muy fruncido.

Goku: No te pongas así, ni que estuvieras celoso.

Piccolo: No digas estupideces, si no vas a entrenar mejor me voy.

En el camino Piccolo inconscientemente pasa por la casa de Izbet, y ve como sube a un auto que no es de ella, decide seguirla, al llegar al puerto, la ve bajar del brazo del millonario del que estaban comentando en casa de Goku, está lleno de fotógrafos y periodistas, luego de conversar un poco con ellos, ambos se dirigen a un yate.

Piccolo: Por esto no va a verme, la próxima vez que entrenemos no seré tan gentil - al llegar al Templo, trata de meditar, pero apenas cierra los ojos, ve a la pareja cuando subía al barco - ¿Qué me pasa? - piensa Piccolo - ella es una amiga, si quiere dejar de venir para siempre mejor, así no llegará con sus locas ideas como ir de vacaciones a Namek, ni con su torcida lógica para convencerme de algo – luego de un rato logra tranquilizarse, pero en la noche, mientras duerme, una voz interior le habla.

Voz: Se aburrió de amarte, por fin encontró a alguien más.

Piccolo: Nunca me intereso como mujer, que haga lo que quiera con su vida.

Voz: Por eso estabas tan molesto cuando la viste con el millonario.

Piccolo: Me molesta que deje de entrenar, nada más.

Voz: No mientas, si fuera cierto lo que dices no te hubieras puesto tan furioso.

Piccolo: ¿Qué debía hacer? Traerla a la fuerza al Templo.

Voz: Eso es lo que deseabas - despierta.

Durante semanas estuvo de mal genio, más de lo que es común en él, cuando por fin Izbet vuelve a entrenar, debe pedirle ayuda a Dende, porque se lastima el brazo.

Dende: No debió usar tanta fuerza.

Piccolo: Si no se fuera de paseo en yate con cualquiera, en vez de entrenar, no se lastimaría tan fácilmente.

Izbet: Esto paso porque estabas muy agresivo, además ¿Cómo sabes que estuve en un yate?

Piccolo: Tu fotografía salió en los diarios y revistas.

Izbet: No sabía que te interesabas en la sección sociales, debía ir a esa actividad y mi auto se echó a perder, justo me llamó Robert, y se ofreció a llevarme, había más de cien personas en ese evento, incluidos Bulma y Vegeta.

Piccolo: ¿No podían haberte llevado ellos?

Izbet: Tienen que atravesar toda la ciudad para llegar a mi casa, Robert estaba cerca... supongo que terminó el interrogatorio, no sé cuándo vuelva. Dende, adiós - se va con los ojos negros de rabia.

Dende: ¿Por qué la trata así?

Piccolo: Dejo de venir, sólo para estar con ese "Robert".

Dende: mirándolo fijamente - da la impresión que estuviera celoso.

Piccolo lo fulminó con la mirada y se va a una de las habitaciones a tranquilizarse ¿Qué me pasa? Piensa ¿Por qué siento esta rabia? Ni cuando quería matar a Son me sentía así, en ese momento escucha nuevamente la voz interior.

Piccolo: ¿Quién eres?

Voz: Soy la parte oscura que hay en ti, la maldad que no quieres dejar salir.

Piccolo: ¿Pero cómo...?

Voz: Estuve esperando, y ahora que los sentimientos humanos que hay en ti, se han vuelto oscuros, por fin tengo energía suficiente para controlarte.

Piccolo: No tengo sentimientos humanos.

Voz: Si los tienes y estas semanas se han vuelto negativos, tienes rabia, inseguridad, y celos. Ahora ya llega mi turno.

Piccolo: ¿Qué quieres?

Voz: Quiero destruir a los Guerreros Z, para que este mundo sea mío, pero antes debo matar a esa mujer.

Piccolo: No lo harás, sólo eres una voz en mi mente, que pronto acallare.

Voz: Yo seré quien gane, y sólo quedará el mal - Piccolo cae al suelo sujetándose la cabeza y gritando.

Dende y Mr. Popó llegan, después de un momento, se calla, abre los ojos y tranquilamente se pone de pie.

Dende: ¿Qué le pasó?

Piccolo: Nada, estoy bien – pero su manera de mirar y sonreír es distinta, aunque su ki sigue siendo el mismo

Dende: Seguro que está bien.

Piccolo: Si, ya vuelvo.

Piccolo va a la casa de Bulma y roba el radar del dragón, en medio día logra encontrarlas todas, luego va a la casa de Izbet.

Izbet: ¿Piccolo?

Piccolo: Sí.

Izbet: Tú presencia se siente extraña ¿Estás bien?

Piccolo: Sí, sólo vine por ti - la golpea en la nuca dejándola inconsciente, y con ella en brazos, y las esferas del dragón vuelve al Templo Sagrado.

Apenas pone los pies en el suelo, Dende y Mr. Popó se acercan.

Dende: ¿Qué pasa?

Piccolo: Nada, sólo quiero pedir unos deseos, pero antes – los golpea hasta que no pueden moverse.

Dende: ¿Qué ocurre?

Piccolo: Soy la fuerza maligna de Piccolo, por fin tengo la energía oscura suficiente de sus sentimientos humanos para tomar control de su cuerpo, para que sea permanente, sólo debo matar a esta mujer.

Dende: ¿Por qué?

Piccolo: No tengo que darte explicaciones - se acerca a las esferas - Sal de hay Shen Long y cumple mis deseos - el dragón pregunta por el primero - deseo que no puedan encontrarme a mí o a esta mujer, por ki o adivinación.

Shen Long: Deseo concedido ¿Cuál es el segundo deseo?

Piccolo: Deseo que esta mujer no pueda ser revivida con las esferas del dragón de la Tierra, Namek o de cualquier otro lugar.

Shen Long: Deseo concedido ¿Cuál es el tercer deseo?

Piccolo: Llévanos a un planeta donde podamos sobrevivir ella y yo, que no haya humanoides, lo más lejos de la Tierra que se pueda, y solo devuélvenos al Templo Sagrado cuando el corazón de ella deje de latir.

Shen Long: Deseo concedido. Los dos desaparecen, así como el dragón.

Dende logra curar las heridas de Mr. Popó, y éste va por una semilla del ermitaño para Kamisama, apenas están bien, llaman a todos al Templo para contarles lo que pasó.

Dende: Y eso fue todo, al parecer la parte maligna de Piccolo, gracias a los sentimientos que quedaron de cuando fue humano, logro obtener la energía suficiente para tomar el control de su cuerpo y mente.

Vegeta, Goku y Videl: ¿Cómo que fue humano?

Bulma: Yo les explicare luego, pero no creo que pueda matarla, a pesar que esté descontrolado.

Gohan: Estoy de acuerdo, la aprecia mucho.

Bulma: Pensé que al ser namekuseijin de nuevo, los sentimientos humanos desaparecerían.

Dende: Al parecer eran demasiado fuertes, y en vez de desaparecer quedaron ocultos, empezaron a salir cuando ella dejó de venir al templo, y aparecieron unas fotografías con un tal Robert.

Bulma: Robert es el hombre con quien hizo un negocio, debió tener reuniones diarias con él para afinar todos los puntos.

Gohan: Tal vez pensaba que perdería la amistad de ella, y eso fue lo que convirtió sus sentimientos en oscuros.

Goku: Para mí, su actitud es la de un hombre celoso – dice mientras pone una de sus manos detrás de su cabeza.

Gohan: Papá, eso es imposible. Mejor analicemos sus deseos para ver si podemos hacer algo, como tiene la inteligente del Sr. Piccolo, creo que cubrió todas las posibilidades, lo que me preocupa es si la energía negativa se diluye, quedarán atrapados en donde están para siempre.

Goku: Debemos encontrarlos rápido, pero... ¿Cómo?

Gohan: No tengo idea.

En el planeta donde llegaron, Piccolo espera que ella despierte, están en la orilla de un mar de aguas tibias.

Izbet: ¿Dónde estoy?

Piccolo: En un planeta donde nadie podrá encontrarnos.

Izbet: Tú no eres Piccolo.

Piccolo: El cuerpo es el mismo, la voz es la misma ¿Por qué dices que no soy yo?

Izbet: No puedo sentir tu ki, pero la presencia es distinta, muy parecida a Piccolo pero no igual.

Piccolo: Eres muy intuitiva.

Izbet: ¿Quién eres y qué quieres de mí?

Piccolo: Soy la parte maligna de Piccolo, y quiero que mueras.

Izbet: Y para eso me trajiste a otro planeta – trata de analizar la situación, por eso lo hace hablar.

Piccolo: Quiero divertirme jugando con un ratón, y en la Tierra no me habrían dejado.

Izbet: Más de un ratón se ha comido a un gato.

Piccolo: Se nota que tu padre fue un demonio, pero sólo son palabras.

Izbet: No me subestimes.

Piccolo: Bueno ratón, ya viene el gato por ti... me divertiré un tiempo y cuando me aburra morirás.

Izbet: Inténtalo.

Empiezan a luchar, pero le cuesta defenderse, él le saca las muñequeras, aros, el cinturón, los zapatos y un colgante – ahora como harás para huir, ratón, ya perdiste "tus ojos".

Igual sigue peleando sin la ayuda de los mecanismos que usa para desplazarse, pero es difícil, ya agotada, baja a la arena, él la arrincona contra unas rocas para besarla, ella voltea la cara, pone sus manos en el pecho de él, y concentrando lo que le queda de ki, lo ataca, apenas se siente libre, corre al mar, hasta que encuentra una saliente entre unas rocas, y se queda quieta.

Piccolo: Vaya ratón, sólo haces esto más divertido para mí.

Se queda quieta, en vista que no sale de su escondite, él empieza a tirar esferas de energía, a diestra y siniestra, pero sigue sin moverse.

Piccolo: Tenemos tiempo para seguir el juego.

Izbet recuerda cuando la tiraron a mar abierto desde un barco para que muriera cuando era niña, al final logre sobrevivir, ahora será igual se dice para darse ánimos. Espera varias horas, suponiendo que Piccolo todavía anda por allí, luego sigue el contorno de las rocas, cuando ya puede salir del mar, encuentra una rama, ocupándola como bastón se desplaza hacia el interior del lugar, logra encontrar una cueva entre unas rocas, cerca hay árboles con unos frutos parecidos a las manzanas, y escucha un pequeño riachuelo, comida ni agua me faltarán, durante toda mi infancia no use nada de tecnología para moverme, ahora será igual.

En la Tierra los Guerreros Z ya han agotado todo para tratar de encontrarlos, desde Uranai Baba, a tratar de rastrear alguna señal de los implementos que usa Izbet. Se rinden, lo único que pueden hacer es esperar en el Templo, Goku y Vegeta estarán permanentemente, Gohan irá en los momentos que pueda, para cuando vuelva el Piccolo malvado detenerlo, lo que no debería demorar mucho, ya que aunque Izbet es una buena luchadora, en una pelea en serio nunca podría derrotar al namekuseijin. En el espacio, Piccolo está irritado, han pasado dos días y no logra encontrarla. Ella sólo sale de su cueva, para buscar comida y agua. Él se queda cerca de un río, hasta que logra escuchar los sigilosos pasos de Izbet. Ella ha salido por comida, y cuando quiere volver a su refugio, él está enfrente.

Piccolo: Ya te encontré ratón, ven para entretener al gato un rato.

Ella lucha, pero nuevamente es derrotada, cuando la tira al suelo la inmoviliza con su peso; no podré evitar que abuse de mi piensa ella.

Izbet: Mejor mátame y termina con esto.

Piccolo: No ratón, matarte simplemente no tiene gracia, debo poseerte, y cuando eso pase ya no quedará nada bueno del otro Piccolo y por fin desaparecerá - le dice mientras trata de sujetarle ambas muñecas con una de sus manos para que se quede quieta, entonces ella empieza a silbar lo más fuerte que puede, mientras él se retuerce de dolor, Izbet se oculta rápidamente. Cuando se levanta, hierve de rabia, una pequeña mujer, más encima ciega es más astuta que él... que puede ayudarme... que sé de ella... mmm... ama a Piccolo... ya sé cómo atraparla.

Al otro día, lzbet escucha la voz de Piccolo llamándola, dice que su parte oscura ya está bajo control, se escucha tan tranquilo, aunque su presencia no es como antes. Por unas horas estuvo meditando, pensando si salir o no, tal vez por tener controlada la parte maligna, su presencia cambio. Cuando él empieza a recordar lo que vivieron cuando fue humano, Izbet piensa que debe ser el bueno.

Izbet: Acá estoy.

Piccolo: se abrazan – que bueno que estas bien.

Izbet: Dime que pasó.

Piccolo: Estas muy cansada, mejor descansa unos días, luego te contare todo.

Esa noche se acomodan en la cueva y hacen una fogata para estar más cómodos, igual Izbet está en semi vigilia, por si vuelve la parte maligna, pero todo está tranquilo, el día siguiente fue perfecto, ya esa noche se duerme tranquila, por fin todo está bien, piensa. Pero durante la madrugada, despierta al sentir frío, para descubrir con horror, que está desnuda, sus manos atadas en su espalda, en su boca hay una mordaza. En frente está... Piccolo.

Piccolo: Caíste ratón, sólo debía poner el "queso" correcto en tu trampa – rompí su espíritu, no luchará más, ahora si será mía, piensa.

Se le acerca mientras se quita la parte superior de su traje, se acomoda sobre ella, la besa en la cara y luego sigue hacia los senos, Izbet sólo siente asco, da todo por perdido y comienza a llorar silenciosamente, sólo quiere que todo termine y morir. Él se yergue sobre sus rodillas, se suelta el pantalón, le sujeta las piernas, se acomoda y trata de penetrarla, pero cuando la ve a la cara, cambia su expresión de lujuria por una de dolor, se toma la cabeza con ambas manos, y grita, apenas se siente libre ella se arrastra hasta chocar con la pared de la cueva, y se queda acurrucada, cuando deja de gritar él cae desmayado. Durante mucho tiempo, Izbet no quiere moverse, no sabe que pasó y teme que sea otra trampa, ya cuando siente que han pasado varias horas y todo sigue quieto, suelta sus manos y busca a Piccolo, cuando lo encuentra está con sangre en la boca y oídos.

Izbet: Por favor, no te mueras – solloza, mientras lo acomoda en el suelo de la cueva, recién al anochecer comienza a despertar.

Izbet: Por fin eres tú – su presencia vuelve a ser la misma de antes.

Piccolo: ¿Estás bien? – le toma las muñecas moreteadas.

Izbet: Si, no alcanzó a... no me pasó nada grave.

Piccolo: Lo siento, a pesar que no podía hacer nada, vi y escuche todo lo que pasó.

Izbet: ¿Qué te ocurrió?

Piccolo: Luego de ser humano, esas emociones quedaron en mí, en mi subconsciente, me molesto que no fueras a verme por estar con otro tipo - golpea la roca, y deja marcado su puño - la ira, la inseguridad, el enojo y los celos me ganaron, y "él" tomó control de mí.

Izbet: ¿Lo dices por Robert? Es el dueño de la empresa con que hice un gran negocio, nada más.

Piccolo: Que tonto fui.

Izbet: ¿Estabas celoso de mí?

Piccolo: ruborizándose – Sí, te amo

Izbet: Eso no puede ser.

Piccolo: Fui humano, y esos sentimientos, ahora que soy namekuseijin, al salir casi me vuelven loco, lo único que sé con seguridad es que te amo.

Izbet: Yo también te amo.

Piccolo: Todavía me amas, a pesar que anoche casi te...

Izbet: Sé que no fuiste tú, siento tu presencia y es distinta a la de "él". Ahora debemos encontrar la manera de volver a la Tierra ¿Sabes dónde estamos?

Piccolo: No.

Izbet: Dime cómo llegamos acá – le cuenta los deseos que su parte maligna pidió - No se me ocurre como podemos volver, a no ser que yo muera.

Piccolo: Encontraremos una forma.

Volvieron al lugar donde llegaron al planeta, encontraron los implementos que usa Izbet para moverse, rotos, lo único que está intacto es el colgante que le regalo Bulma en su último cumpleaños. Quieren hacer algo con las partes que quedaron, pero ella no ve y él no tiene los conocimientos necesarios, por varios días siguen pensando, pero al tercero Izbet se da por vencida.

Piccolo: No debes rendirte.

Izbet: Nunca saldremos de acá, ni en un millón de años.

Piccolo: Debe haber alguna forma que no hemos pensado, cuando volvamos a la Tierra ¿Quieres ser mi esposa?

Izbet: No, pero...

Piccolo: ¿Por qué no?

Izbet: Me conozco, soy un espíritu libre, no podría tener una vida como humana normal, tarde o temprano echaría de menos mi vida de antes - se acerca y lo besa - pero eso no quiere decir que no quiera estar contigo, que te parece ser novios, nos veremos cuando queramos y podamos ¿Te molesta?

Piccolo: Para nada, sé qué eres el amor de mi vida, te entiendo, entonces... ¿Quieres ser mi novia?

Izbet: Sí, abrázame.

Piccolo sólo pretendía abrazarla, y descansar como lo habían hecho esos días, pero ella lo besa y mordisquea suavemente sus lóbulos, mientras acaricia su pecho y bajo vientre.

Piccolo: Para, por favor.

Izbet: ¿Por qué?

Piccolo: Porque si sigues no respondo de mí.

Izbet: Eso quiero.

Se besan lentamente primero, luego más apasionados, mientras se desvisten, ya desnudos, él la acuesta en el piso, sigue besando su cuello, pechos, estómago, ella le toma la cabeza para que siga en sus senos, luego de un rato Piccolo necesita estar dentro de ella, pero la ve tan pequeña, que teme provocarle dolor en vez de placer, ella se da cuenta de lo que pasa, así que le dice, quiero sentirte dentro de mí, entra lentamente, provocando en ella un gemido de placer, es cálida y estrecha, empieza a entrar y salir lentamente, pero ella quiere más; más rápido, más fuerte le pide entrecortadamente, al oír esto ya no se controla, desea darle el placer que le pide, quiere sentirla vibrar junto con él, aumentael movimiento, ella lo abraza cuando está a punto de acabar, cuando llega al orgasmo emite un gemido e inconscientemente araña la espalda de él, en ese momento sus músculos aprietan el miembro de Piccolo, y provoca que acabe dentro de ella con un gruñido suave, luego descansan abrazados.

Piccolo: ¿A dónde vas? - cuando ella se levanta.

Izbet: Quiero bañarme - entonces la toma en sus brazos - ¿Qué haces?

Piccolo: Llevarte a bañar.

Izbet: Puedo caminar.

Piccolo: Lo sé, pero me gusta tenerte desnuda en mis brazos.

En el río, Piccolo está pensativo, nuevamente los celos lo acosan, quiere preguntarle con quien había sido su primera vez, pero no encuentra la forma.

Izbet: Crees que podremos volver a la Tierra, parece que son siglos que estamos acá.

Piccolo: Volveremos ¿Y si me cuentas tu vida? Siempre me he preguntado como a los 6 años quedaste sola, y antes de los 25 ya eras dueña del Conglomerado Heaven.

Izbet: silencio - te prometo que si alguna vez volvemos a la Tierra...

Piccolo: Cuando volvamos a la Tierra...

Izbet: Cuando volvamos a la Tierra te contare todo, ahora no, porque me deprimiré más de lo que ya estoy.

Piccolo: Tengo un remedio perfecto para animarte.

Izbet: Será el que estoy pensando.

En el agua nuevamente hacen el amor, pero ahora lentamente, sintiendo cada roce, cada goce que provocan en el otro, agotados por las emociones y el cansancio van a la cueva a dormir, hasta que de madrugada Piccolo siente un calor exquisito en su miembro, Izbet está entre sus piernas, él le toma la cabeza para acariciarla y marcar el ritmo, se excita más cuando ve que Izbet está masturbándose, así que luego que termina en la boca de ella, la hace acabar con ayuda de su lengua. Piccolo despierta al amanecer, está solo, pero siente que Izbet habla a lo lejos, se viste y la encuentra en un montículo, de cara al sol que sale. Se pone atrás, para abrazarla por la espalda, pero la nota demasiado rígida.

Piccolo: ¿Qué haces?

Izbet: Preparándome - ve que tiene su mano a la altura del pecho, donde ha concentrado mucha energía.

Piccolo: ¿Qué diablos vas a hacer?

Izbet: Lo único que nos salvará, detendré mi corazón.

Piccolo: No dejare que te suicides.

Izbet: No voy a suicidarme, pero esta es la única solución para salir de este lugar.

Piccolo: Por eso ayer...

Izbet: No, no fue por eso, simplemente quise hacer el amor contigo, fue al despertar que se me ocurrió esto para volver a la Tierra.

Piccolo: ¿Qué quieres hacer?

Izbet: Mi vida quedará en tus manos, el deseo era que volveríamos a la Tierra, cuando mi corazón se paralice, si una energía puede detenerlo, otra puede volver a hacerlo latir, sólo debe hacerse máximo 5 minutos después, sino mi cerebro morirá.

Piccolo: Debe haber otra forma.

Izbet: No la hay, confió en ti.

Se besan, en ese momento ella detiene su corazón, él la toma en sus brazos, y grita con todas sus fuerzas. Desaparecen del lugar. En la Tierra, en el Templo Sagrado, cuando llega en ese estado, Goku, Gohan y Vegeta inmediatamente lo inmovilizan, Dende toma el cuerpo inerte de ella, lo acomoda en el piso, y comprueba que está muerta, Piccolo desesperado trata de soltarse para revivirla, pero nadie cree sus palabras.

Ya han pasado casi 3 minutos, no hay manera que lo escuchen, entonces el colgante que tiene Izbet al cuello se abre, y aparece una imagen holográfica de ella, que dice: Piccolo, ya sólo quedan 2 minutos para revivirme, por favor, apúrate.

Todos quedan quietos, y lo sueltan, por fin logra aplicarle energía al corazón de ella, pero no resulta, desesperado lo intenta varias veces más, pero el resultado es el mismo. El colgante se vuelve a abrir: Te agradezco haberlo intentado, pero ya el tiempo máximo pasó, muero feliz sabiendo que estas bien, Piccolo, nunca dejare de amarte.

Piccolo: Ni yo tampoco - contesta de rodillas al lado de ella.

Dende: Espere un momento, su organismo es parecido al de los humanos, pero no igual, es mucho más resistente.

Piccolo recuerda cuando Francou trato de hacerla dormir, y sólo lo logró con un sedante para elefantes, todavía debe haber tiempo. Entonces concentra diez veces la energía que había usado antes, pone su mano sobre el corazón de la mujer, y la envía, ésta se diluye, haciendo que un brillo viaje desde el pecho hasta la última parte de su cuerpo, cuando se disipa, ella empieza a respirar, y por fin despierta.

Izbet: Lo lograste.

Piccolo: Pensé que te perdía.

Izbet: Nunca amor, aunque igual deje grabado un mensaje, por si esto no resultaba.

Piccolo: Lo sé, lo escuche, te amo.

Izbet: Yo también - se besan.

Dende: Los dejaremos solos un momento, mientras llegan los demás pero luego pueden contarnos que pasó exactamente.

Ya todos reunidos, Piccolo e Izbet cuentan lo que pasó, sin tantos detalles, a lo que todos ponen atención es a la parte donde cuentan que están enamorados.

Bulma: ¿Para cuándo es la boda?

Izbet: Nunca.

Milk: Pero si están enamorados ¿Por qué no casarse?

Izbet: Eso ya lo converse con Piccolo y está de acuerdo, ni siquiera viviremos juntos, seremos novios, o no Piccolo - afirma con la cabeza - por favor, no creas todo lo que dicen, los periódicos y revistas ya me han comprometido más de cien veces, escuchaste celoso - Piccolo sólo se sonroja.

Gohan y Goku se acercan a Piccolo, Vegeta como siempre está alejado.

Gohan: tomándolo del hombro - encontró a la mujer perfecta para usted.

Goku: Estoy de acuerdo - baja la voz para que Milk no lo escuche - no tendrás que preocuparte de mantener una familia, de trabajar, ir de compras, o sacar la basura.

Vegeta sólo mira y piensa: quien diría que el namekuseijin conseguiría novia, es verdad el refrán terrícola, nunca falta un insecto para una insecta jajajaja.

Entre las mujeres igual comentaban.

Milk: ¿No te preocupa no casarte?

Izbet: Para nada, la mejor solución es está.

Videl: Lo bueno es que no se nota la diferencia de edad.

Bulma: ¿Cuánta diferencia?

Videl: Según mis cálculos, Iz es mayor que Piccolo por...

Izbet: Cariño, todavía tengo las fotos de tu séptimo cumpleaños... ¿Cuantos años soy mayor que Piccolo?

Videl: con una gotita en la frente - un año.

Izbet: Te quiero tanto mi niña.

Milk: ¿Qué pasó en ese cumpleaños?

Videl: Nada.

Bulma: Iz ¿Y tú eres celosa?

Izbet: No lo sé, nunca antes me había enamorado.

Bulma: Imagínate que lo encuentras con otra mujer ¿Qué harías?

Izbet: sus ojos se ponen negros - soy capaz de cortarle las... "antenas".

Todas quedan serias y calladas, para luego reír a carcajadas, Gohan lleva a Piccolo a un rincón para conversar tranquilos.

Gohan: Sé que debe estar muy feliz, y no es mi intensión molestarle, pero debe aprender a controlar sus emociones, tuvo suerte que esta vez no murió nadie, pero pudo ser una tragedia.

Piccolo: Lo sé, las otras he podido controlarlas, pero con los celos es difícil, si la imagino o la veo con otro hombre, no logro mantener la calma.

Gohan: Entiendo, pero eso puede destruir su relación. Recuerde, ella estaba dispuesta a dar su vida para que usted volviera a la Tierra, esa es la mayor prueba de su amor - miran que están conversando ella y Goku.

Goku: Me alegro por mi amigo, siempre está muy serio y solitario.

Izbet: Es un enojón, pero uno muy lindo.

Goku: A todo esto ¿Nunca hemos entrenado juntos, verdad?

Izbet: mmm... no creo, yo vengo al Templo Sagrado los sábados, algún día que este acá, podemos probar técnicas.

Goku: ¿Y qué tal ahora? - Piccolo toma a Izbet de la mano.

Piccolo: Debe irse ya, mañana tiene que volver a sus empresas, debe descansar, vamos.

Bulma: Si va contigo, no creo que descanse mucho esta noche.

Todos ríen, mientras ambos se alejan volando. Desde ese momento sus vidas volvieron a una aparente normalidad, él seguía en el Templo Sagrado o en la cascada, Izbet iba los sábados a entrenar, donde sólo se daban besos. Cuando estaban a gusto, en casa de Izbet o donde ella estuviera alojando por sus viajes, vivían su amor. Aunque Piccolo prometió no celarla, al menos una vez rompió su palabra, cuando a la casa de Izbet llegan flores y regalos de un tal Reyes, justo cuando él está.

Piccolo: ¿Quién es Reyes?

Izbet: Un empresario, me interesa comprarle sus acciones de una empresa, para tener el poder de decisión.

Piccolo: ¿Y por qué te manda flores y regalos?

Izbet: Hace un tiempo quiso que me casará con él, lo rechace, pienso que tal vez quiere proponerme matrimonio de nuevo.

Piccolo: Porque no le devuelves todo.

Izbet: Uno, como tenemos negocios juntos, debo ser diplomática e irme con pies de plomo; dos, porque recibirle sus obsequios no me obliga a nada; y tres, ya te dije que YO manejo mi vida. Debo ir a la oficina, adiós.

Piccolo se fue muy molesto, a los dos días decide ir a verla temprano a su trabajo, desde lejos, justo en ese momento el empresario Reyes está con ella viendo los últimos papeles del negocio, pero antes le propone matrimonio, ella lo rechaza, a lo que el tipo se molesta, la insulta y amenazando con vengarse, se va. Piccolo iba a seguirlo para "conversar" con él, cuando escucha que Izbet llama a su asistente.

Izbet: Jenny... si... no firmo nada, y se fue, que bueno que esta oficina es a prueba de sonidos... si hasta de mi madre se acordó... por favor, pon en marcha el plan B, si al terminar el día no te doy la contraorden, mañana temprano sigue con el C.

Él se queda pensativo ¿Qué piensa hacer? Ha pasado casi todo el día, un poco antes de que termine la jornada de trabajo, la llama de nuevo su asistente.

Jenny: Srta. Izbet, el Sr. Reyes quiere verla.

Izbet: Hágalo pasar – cuando el hombre entra - Sr. Reyes, luego de su retiro tan abrupto pensé que no vendría más aquí.

Reyes: Lo siento Srta. Izbet, me disculpó por mis palabras, estaba dolido, no fue mi intensión tratarla así.

Izbet: Acepto sus disculpas ¿Qué decidió sobre la venta de sus acciones?

Reyes: Inmediatamente firmaré los documentos – al salir Reyes, llama a su asistente y cancela el plan C, se despide hasta el otro día.

Piccolo: ¿Qué diablos pasó? - en ese momento Izbet se acerca a la ventana, y por gestos lo llama - demonios, me descubrió - entra a la oficina.

Izbet: Esto no va a funcionar.

Piccolo: ¿Qué quieres decir?

Izbet: No quiero ser novia de alguien que me va a estar vigilando, prefiero que esto termine acá y ahora.

Piccolo: se acerca a ella y la abraza - dime si alguien más te hace sentir así, eres sólo mía.

Izbet: con una sonrisa maliciosa - si es por eso, puedo encontrar muchos candidatos que me ayudarán a que deje de ser sólo tuya - la suelta.

Piccolo: No lo harías.

Izbet: ¿Eso crees? Ya no soy nada de ti, puedo hacer con mi vida lo que quiera. Adiós para siempre.

Piccolo se dirige a la ventana para irse, pero al mirar hacia atrás, ve como Izbet tiene los puños apretados, y lucha para no llorar, se devuelve, la acomoda en su hombro y sale con ella por la ventana.

Izbet: Suéltame grandote ¿Dónde me llevas? - no le responde nada - eres un gran pedazo de...

Cuando llegan al Templo Sagrado, ella sigue insultándolo, al verlos Dende y Mr. Popó se acercan.

Dende: ¿Qué pasa?

Izbet: Este pepino agrio me trajo a la fuerza.

Piccolo: Sólo quiero aclarar algunas cosas, nada más.

Dende: Si nos necesitan estaremos dentro – él y Mr. Popó piensan una pelea de enamorados. Cuando la deja en el piso, ella despliega agresivamente sus alas.

Izbet: ¿Por qué me trajiste aquí?

Piccolo: En este lugar sagrado, quiero que me digas que no quieres seguir siendo mi novia.

Izbet: No quiero ser novia de un tipo que me vigila así, de quien me enamore confiaba en mí o eso creía yo - cuando él se acerca para abrazarla, ella se pone en guardia.

Piccolo: Sí eso quieres – y empiezan a luchar.

Al rato, agotados, se sientan en el piso frente a frente.

Piccolo: Todavía quieres que esto termine.

Izbet: Desde que te conocí ya no me siento sola, sé que encontré a mi otra mitad como dicen los humanos, pero no puedo soportar que me celes de esa manera, está bien, reconozco que no debí aceptarle los regalos a ese tipo, tenía que saber que eso te molestaría, pero tampoco estuvo bien que me espiarás.

Piccolo: Prometo que no volverá a pasar, pero entiende que ahora ya no eres sólo TU, sino que somos NOSOTROS.

Izbet: Disculpa, aunque desde el momento que te conocí, nunca has salido de mi corazón, es difícil para mí cambiar, a veces me gana el orgullo, sólo contigo no me siento perdida en este mundo - se besan.

Piccolo: Si te hubieran escuchado en tu empresa... que boquita tienes.

Izbet: sonriendo - y eso que no puedo insultar a tu madre, que si no...

Ya arreglado el problema, pasan la noche en casa de Izbet, al otro día la acompaña a su oficina.

Piccolo: ¿Cómo descubriste que estaba allí ayer?

Izbet: Eso de "¿Qué diablos pasó?" lo dijiste muy fuerte, acuérdate que tengo muy desarrollado el oído.

Piccolo: Y qué fue lo que hiciste para que ese tipo volviera tan humilde.

Izbet: El plan B es preparar la venta de mis acciones de la compañía de este individuo, lo que provocaría que las que él tenía valieran menos que el papel donde están impresas, se hizo lo más público que se pudo, así él sabía que si no se retractaba perdería todo su dinero, para mí también sería una perdida, pero no tan grande como la de él, además entre empresarios, que no sepas separar tu vida personal de los negocios, te cierra todas las puertas, y me hubiera encargado que todos supieran porque tuve que hacer esa venta y perder dinero.

Piccolo: Ya veo

Izbet: Si no se hubiera retractado, el plan C es vender las acciones inmediatamente, así también mando una señal, que quien se quiere pasar de listo conmigo que se atenga a las consecuencias.

Piccolo: Entiendo, me voy.

Izbet: ... espera un momento - llama a su asistente - Jenny ¿A qué hora está fijada la reunión de la Junta?... por favor, que NADIE, absolutamente nadie me moleste por una... no, por dos horas. Gracias - deja caer su falda y comienza a desabotonarse la blusa - ¿Sabes que una de mis fantasías es hacerlo contigo en la oficina? Tenemos dos horas...

Ambos se desnudan mientras se besan, luego ella lo hace caminar para atrás y lo sienta en su silla, se monta sobre él, usa los apoyabrazos, y con ellos se impulsa para subir y bajar rápidamente, mientras él la abraza, mordisquea sus pechos, y besa su cuello, cuando acaban, se quedan un rato abrazados, descansando. Después Izbet se acomoda en el escritorio dándole la espalda, él la abraza fuerte, la dobla sobre el escritorio y la penetra analmente, para que se relaje la masturba con una mano, con la otra le masajea un pecho, mientras la besa en la espalda y la nuca, cuando vuelven a acabar, descansan acostados en el piso.

Izbet: Pensar que todo comenzó con los preparativos para la boda de tu alumno y mi alumna.

Piccolo: Cuando te conocí me caíste pésimo, pensé que eras altiva, soberbia y orgullosa, ahora sé que no eres altiva ni soberbia.

Izbet: Pero si orgullosa...

Piccolo: Debes admitir que lo eres y mucho. No te dio miedo viajar con un desconocido por tantos días solos en una nave.

Izbet: Cuando te conocí, Videl sólo me había dicho que eras el padrino de bodas, ya que fuiste el maestro de su novio, pensé que eras humano, ya cuando me dijiste que no lo eras, sentí que no debía temer nada de ti. Tendré que volver a bañarme para la junta.

Piccolo: Y si somos ecológicos... hagámoslo juntos para ahorra agua - cuando terminan de bañarse, ya es casi la hora de la reunión, así que no da para nada más que unos cariñitos rápidos.

Izbet: Te amo - le da un beso y él se va por la ventana.

El tiempo pasa rápidamente, luego de varios años, Izbet siente su cuerpo cansado, al ir al médico descubre que ha desarrollado una enfermedad incurable a la sangre, cuando está por morir, con ella está su novio y sus mejores amigos, Mr. Popó y Dende.

Izbet: Gracias por estar conmigo.

Piccolo: Descansa.

Izbet: No te preocupes, no tengo miedo a morir, desde que los conocí mi vida ha sido increíble.

Piccolo: Por favor, no te canses...

Izbet: Es mejor que me vaya yo primero, no podría seguir viviendo sin ti. Mr. Popó, Dende, siempre los voy a querer, amigos. Piccolo, por favor protege a todos, pero por sobre todo, cuídate tú.

Piccolo: Prometo que te buscaré cuando vaya al otro mundo.

Izbet: Piccolo... te amo - muere en paz y tranquila.

Años más tarde, Piccolo decide compartir el destino de la Tierra, y así poder reunirse con su amada, llega al Paraíso y encuentra a Izbet en los pastos.

Piccolo: ¿Cómo estás?

Izbet: Bien, ahora que estas a mi lado.

Piccolo: Sabes lo que quiero hacer ¿Verdad?

Izbet: Se acerca a él - además de esto - le da un beso - sí, sé que quieres hacer.

Piccolo: ¿Me acompañarás?

Izbet: Contigo - sonríe - iría hasta el infierno - empiezan una lucha, donde dejaron el paraíso destrozado, como castigo los mandaron al infierno.

Piccolo: Se cumplió lo que dijiste, hasta el infierno me seguiste.

Izbet: No me importa vivir toda la eternidad en el infierno, sólo quiero estar al lado tuyo siempre.

Así ambos llegan al infierno, donde se convirtieron en los guardianes de la entrada, y pudieron vivir su amor hasta el fin de los tiempos.

FIN

EXTRA IZBET CUENTA SU VIDA ANTES DE CONOCER A PICCOLO

Para el aniversario de su primer año de noviazgo, por consejo de Videl, Piccolo le lleva flores a su amada y la espera en su oficina, por la hora supuso que ya estaría sola, pero ella entra con su asistente, ésta al verlo, se pone frente a Izbet.

Jenny: Iz, quédese atrás mío, hay un tipo que burló la seguridad.

Izbet: tomándola del hombro - Tranquila, es mi novio.

Jenny: ¿Es el Sr. Piccolo? - hablándole - Lamento mi actitud, es un gusto conocerlo.

Piccolo: Igual.

Izbet: El lunes seguimos, saludos a Marcos, y los niños.

Jenny: Gracias, adiós. Eehhh... antes de irme, podríamos ver una sola cosa más.

Salen, Piccolo siente el rumor de sus voces, pero no entiende que hablan, luego risas, e Izbet vuelve a entrar.

Piccolo: ¿Qué fue eso? No creo que fuera por trabajo

Izbet: Ella quería preguntarme si eras pariente de mi amigo que vino un tiempo atrás...

Piccolo: ¿Cuál amigo?

Izbet: Ma Yunia, le dije que eras un primo lejano de él.

Piccolo: ¿Y por qué las risas?

Izbet: Encuentra que ambos tienen la misma cara de enojones.

Piccolo: hum, ya me acorde de tu asistente, es muy comunicativa... ¿Le contaste de mí?

Izbet: Si, se preocupó tanto que empecé a encerrarme "sola" por horas en mi oficina, pensó que estaba enferma, así que le conté de ti, confió en ella, es la primera de los niños rescatados.

Piccolo: ¿Niños rescatados? Qué significa eso.

Izbet: Ahora que recuerdo, hace tiempo te prometí contarte mi vida, aprovecharé para explicarte también lo de los niños rescatados, ya que las historias se enlazan - se acerca a la ventana para sentir el calor del atardecer, mientras Piccolo deja las flores en la mesa y se sienta - ya sabes que mi padre murió cuando yo tenía 6 años, escape varias veces del orfanatorio donde me internaron, me trataban como una inútil, y sabía que ciega y con esa edad, nadie me adoptaría. Encontré un monasterio en unas montañas, logre que me aceptaran cuando vieron que tenía muchas aptitudes, era la única mujer en el lugar, y uno de los estudiantes que se creía el mejor, cuando lo derrote en un entrenamiento, me puso una trampa. Como los compañeros no me hablaban, me dijo que no había pasado una iniciación, me hizo tomar una reliquia, se suponía que cuando la viera, él la devolvería, pero llamó a todos que me había descubierto robándola, preferí huir y que no me mandaran de nuevo a un orfanatorio. Llegue a una ciudad donde caí en manos de una banda de luchas ilegales, todo iba bien si ganaba o perdía según me ordenaban, una sola vez desobedecí, el castigo... luego de eso, siempre seguí sus instrucciones, igual conocí varias personas en ese ambiente de las que me hice amiga, uno de ellos me consiguió la tarjeta de identificación falsa cuando fuiste humano, tenía 9 años, cuando íbamos en un barco varios luchadores y luchadoras, una noche me llevaron al camarote del jefe, él nos haría trabajar en su "otro negocio", el de prostitución, subastarían la virginidad de las que pudieran, pero no la mía... él fue el primero y único antes de ti.

Por un momento Izbet queda en silencio, Piccolo se levanta y la abraza desde la espalda.

Piccolo: Por eso no querías contarme esa vez que te pregunte por tu vida.

Izbet: Por eso y porque... - silencio - logre salir de la cabina, él me seguía riendo mientras trataba de esconderme por todo el barco, al final encontré algo, creo que un fierro o algo así, y se lo tire, lo golpeó en la cara, gritaba como bestia, me tiró a mar abierto para que muriera, estuve mucho tiempo a la deriva, por eso no entro al mar más allá de donde puedo tocar la arena con mis pies. Un barco de pescadores me encontró, creyeron que era parte de un naufragio, cuando llegamos a puerto escape. Ya no confiaba en nadie, pase meses buscando comida en la basura por las noches y en el día escondiéndome de todos, hasta que entre a una casa, no se sentía movimiento de nadie, al otro día llegó un anciano, me escondí, el cansancio acumulado me tenía mal, cuando me descubrió me desmaye, desperté en un cuarto, él me estaba cuidando, tuve miedo que también se aprovechará de mí.

Piccolo: ¿No lo hizo?

Izbet: No, acababa de perder a su hijo, su nuera y su nieta hacía unos días antes, en un accidente de auto, eran toda su familia, justamente venía del funeral cuando me encontró, se dio cuenta que estaba atemorizada, me contó su tragedia, y me ofreció su ayuda, sentí que me hablaba con la verdad, y no me haría daño.

Piccolo: ¿Te quedaste con él?

Izbet: Sí, era profesor en una Universidad, experto en nanotecnología y ondas de sonido, cuando cumplí los 10 años se convirtió en mi tutor legal. Al principio sólo quería estar con él, me daban miedo los extraños, tenía pesadillas todas las noches, él se quedaba a mi lado y me despertaba apenas empezaba a llorar en sueños. Con el tiempo y terapias, lo supere. Al ver cómo me costaba moverme en los lugares que me eran desconocidos, construyó los primeros mecanismos que use, grandes, pero funcionales, pero tuvo que pedir un préstamo para todos esos gastos, y después no tuvo como pagarlo, íbamos a perder la casa. Escuche que habría un torneo de artes marciales, quería ganarlo por el premio, pero no me dejaron inscribirme por ser ciega, era tanta la frustración que rompí de un solo golpe la banca donde estaba. Uno de los organizadores lo vio todo y se acercó a conversar, le mostré lo que podía hacer en artes marciales, y me propuso unirme al torneo, pero exhibiendo mis habilidades, una luchadora ciega, de mi edad, dijo que sería todo un éxito, eran tres meses, el pago era casi la deuda. Convencí al abuelo de autorizarme, como él sabía lo que me había pasado, dejó todo para acompañarme, donde iba yo él estaba, me sentía tan segura a su lado, a él le conté que mi madre no era de la Tierra, y que tenía alas, por eso me puso el nombre que uso en mis espectáculos, Ángel Ciego.

Piccolo: Era un hombre bueno.

Izbet: Si, fue mi ángel de la guarda, viendo que los mecanismos que construyó en algunos casos eran tecnología inexistentes, los patentó. Me pareció buena idea entrar al mundo de los negocios, con la asesoría del abuelo, así no tendría que seguir toda mi vida en giras y exhibiciones. Pero necesitábamos mucho dinero, así que por un tiempo tuvimos que seguir con los espectáculos, y al igual que a ti, al abuelo no le gustaba cuando me enfrentaba al final a 6 personas al mismo tiempo, el premio en ese tiempo para quien me ganará era de 100.000 dólares, la inscripción de cada participante era de 25.000 dólares, así que aunque perdiera igual era negocio para nosotros, y juntaríamos más rápido el dinero, por suerte nunca perdí.

Piccolo: Ese día que fui a tu exhibición, me pareció que deberías bajar el número de contrincantes ¿A pesar de las reglas, nunca ha entrado alguien con algún tipo de armas?

Izbet: Una vez pasó, pero Jenny estaba pendiente y lo desarmó, así que ahora antes de entrar se les revisa con detectores de metales, tranquilo, no volverá a pasar. Cuando reunimos lo suficiente, el abuelo estudio los mecanismos de mi nave espacial, y así empezamos con la empresa Heaven, él le puso así porque como yo soy un ángel, según él, lo normal era que estuviera en el "cielo". La empresa fue creciendo y se convirtió en el Conglomerado Heaven, ya en esa época iba a la Universidad, además de seguir con mis exhibiciones, una tarde escuche como una joven pedía ayuda desde un callejón, la salve, luego de eso fue mi mejor amiga.

Piccolo: ¿La madre de Videl?

Izbet: Sí. Incluso fue por mí que conoció a Satán, ella fue a uno de mis espectáculos, él estaba allí, fue amor a primera vista, yo estaba muy molesta, siempre lo vi cómo un fanfarrón, pero el amor que se tenían era verdadero, fueron muy felices mientras estuvieron juntos, nació Videl... fue muy doloroso cuando murió - él le besa la mejilla, para darle ánimos - cuando me gradué, empecé a trabajar en la empresa con el abuelo, cuando yo tenía 20 años él murió.

Piccolo: ¿Supiste qué pasó con el hombre que abusó de ti?

Izbet: Lo mande al otro mundo, espero que esté ardiendo en el fuego del infierno - silencio - fui invitada a un torneo para mostrar mis habilidades cuando ya estaba sola, en él escuche que habría peleas ilegales de niños en la ciudad, el líder del grupo que organizaba todo tenía una cicatriz que le atravesaba la cara, estaba segura que era quien me violó, esa madrugada llegue al puerto, encontré inmediatamente el barco, una vez allí la risa que nunca había abandonado mis pesadillas me guió, estaba a punto de hacerle lo mismo que a mí a otra niña, entre por una claraboya, apenas me vio me reconoció. Definitivamente cuando uno está furioso no piensa nada, me gritaba, mira que me hiciste, soy un monstruo ahora. Más se enfureció cuando le respondí que sólo había dejado su cara como su alma, y que recordara que yo era ciega. Luchó, pero yo ya no era una pequeñita, le rompí cada hueso de su maldito cuerpo... y lo disfrute. Los guardaespaldas entraron, varios quedaron casi muertos, quería quitarme ese dolor, saber que ya nunca más sería una víctima... luego de eso, ya no he tenido nunca más pesadillas. Supongo que ya no me verás como antes, soy una asesina por voluntad propia, nadie me obligó, estas manos están manchadas de sangre... pero no me arrepiento de nada.

Piccolo: la voltea poniéndola frente a él para abrazarla y acariciarle el cabello lentamente - hiciste lo que debías hacer, no tengo que reprocharte nada, prometamos que nunca más volveremos a acordarnos ni hablar de eso ¿Y la niña que estaba en el cuarto, es Jenny?

Izbet: descansando su cabeza en el pecho de Piccolo - sí, es ella, tuve que pedirle ayuda, algunos de mis mecanismos se habían roto en la lucha, salimos rápido, llame anónimamente a la policía, que en tal barco había un muerto y heridos, espere hasta que llegaron para irme, la iba a dejar allí para que ellos la ayudarán, pero no quiso, me hizo recordar a mí cuando conocí al abuelo, la lleve a casa, como ella no tenía familia, me contacte con la persona que ayudó al abuelo con mis papeles, y me convertí en su tutora, con el tiempo y mis contactos supe de más lugares de luchas ilegales infantiles, le doy los datos al oficial de adopción, ella se encarga, lo que gano en mis exhibiciones desde ese momento lo donó para esa causa. Sobre Jenny, iba a mandarla a uno de los mejores internados, pero no quería separarse de mí, así que le prometí que si terminaba sus estudios trabajaría conmigo en mi empresa, terminó administración de empresas, y varios cursos más relacionados, siempre mantuvimos contacto, cuando estaba lista, se convirtió en mi asistente personal, al igual que a mi le gustan las artes marciales, es cinturón negro, en karate y judo, hace años conoció a un buen hombre, se casó y es madre de mellizos, Izbet y Marcos, ya tienen ocho años.

Piccolo: Se nota que te admira.

Izbet: Es una buena mujer, me alegra haberla salvado de ese animal, me ha demostrado varias veces que puedo dejar mis asuntos en sus manos.

Piccolo: Nunca te traicionaría ¿Verdad?

Izbet: separándose un poco - ¿Por qué la pregunta?

Piccolo: Todavía quiero saber cuánta diferencia de edad tenemos.

Izbet: Será mi regalo de aniversario, pero no te lo haré tan fácil, soy dos años menor que Satán. Gracias por las flores.

Piccolo: Tenemos el fin de semana para celebrar nuestro aniversario ¿Qué quieres hacer?

Izbet: Como que no supieras.... vamos a casa.

FIN
Se fuerte, hazte grande pero no pierdas la inocencia de tu corazón...

Imagen
Avatar de Usuario
Arwen
Supersaiyano dai san dankai
Mensajes: 884
Registrado: Jue Ene 10, 2019 9:53 am

Re: Fanfic Angel Ciego by Izbet46

Mensaje por Arwen »

CAPITULO 5: IZBET Y ELLIOT, LA BODA. UNA AVENTURA INESPERADA
Spoiler:
IZBET Y ELLIOT, LA BODA. UNA AVENTURA INESPERADA


Dende: Que raro que no haya venido Izbet ayer.

Piccolo: Debe estar cansada, me contó que está preparando otro negocio importante.

Dende: Se le echa de menos, es como un torbellino cuando está en el Templo.

Piccolo: Si no viene hoy, mañana temprano iré a verla a su casa.

El día lunes va a primera hora a casa de su novia, pero al llegar el recibimiento no fue el que esperaba.

Izbet: Que bueno que viniste, tengo esto para ti - y le entrega una invitación para su matrimonio con un tal Eliot, con la dedicatoria, Al idiota más grande del mundo.

Piccolo: ¿Qué significa esto?

Izbet: Además de idiota, no sabes leer, voy a casarme con un hombre de verdad, no sé cómo pude estar este tiempo contigo, por fin encontré al indicado, fuiste divertido un tiempo, pero ahora quiero hacer una vida normal, con un hombre normal, no con un monstruo como tú.

Piccolo: No pudiste dejarme de amar de un día para otro.

Izbet: ¿Crees que alguna vez te amé? No pensé que fueras tan ingenuo, me aburrí de ti, adiós. Vamos - se dirige a una mujer que está a su lado, callada.

Piccolo: ¿Quién es ella?

Izbet: Es mi guardaespaldas - se van en el auto.

El namekuseijin suelta la invitación, cae de rodillas y golpea el piso varias veces, en ese momento llega Gohan.

Gohan: Vámonos.

Piccolo: Izbet se va a casar con otro.

Gohan: Lo sé, en el templo hablaremos tranquilos.

Al llegar, Dende y Mr. Popó ya saben la noticia, pero tampoco pueden creerlo.

Gohan: Nadie creía que esto podría pasar, pero los sentimientos a veces cambian.

Piccolo: Ella no puede haberse vuelto a enamorar en un fin de semana, me dijiste que la mayor prueba de su amor fue cuando casi muere para que yo pudiera volver a la Tierra.

Gohan: Yo también estoy sorprendido, ayer tarde Videl recibió la invitación al matrimonio y fue a conversar con ella, apenas pronunció su nombre, la echo de la casa. Por favor, dele su espacio, tal vez está confundida.

Piccolo va esa tarde a la empresa, y desde lejos ve como antes de tiempo Jenny sale con muchas cosas en su automóvil, en la primera luz de semáforo que se detiene, le habla.

Piccolo: ¿Por qué sacas tus cosas?

Jenny: Iz me despidió.

Piccolo: ¡¡¡QUÉ!!!

Jenny: Como lo oye, trajo un administrador que se hará cargo de sus negocios desde ahora.

Piccolo: Puedes decirme que pasó la semana pasada, sé que tenía reuniones con un empresario, pero nada más.

Jenny: Suba - le abre la puerta del copiloto - hablemos mejor en el auto.

El empresario es Eliot, el mismo con que se va a casar, vieron los detalles de una alianza comercial durante la semana, el viernes pasado fue a comer en casa de él, el día de hoy, lunes aparece para despedirla.

Piccolo: Esto no me calza, fui a verla y termino conmigo.

Jenny: Hasta el viernes todo era normal, ella me comentó que el sábado habían quedado de ir a la cascada, se le iluminó el rostro cuando habló de usted, y eso fue dos días antes de avisarme que se casará con otro, algo muy extraño está pasando.

Piccolo: ¿Qué sabes de la mujer que la acompaña?

Jenny: Es parte de los guardaespaldas de Eliot, ahora que será su esposa ella la protege, pero ambos sabemos que Iz no la necesita. Trataré de conseguir más información, tengo contactos en todas las oficinas.

Pasan algunos días, Piccolo vigila de lejos la casa de Izbet, ella sale poco y nunca sola, donde está la otra mujer la acompaña, más que guardaespaldas parece su carcelera, esa noche en el Templo Sagrado.

Piccolo: Despidió a Jenny, anda con una guardaespaldas, se va a casar con otro... - repetía a cada rato en la oscuridad de una habitación.

Al otro día va a conversar con Jenny, a ver si pudo averiguar algo más.

Jenny: Ha ido poco por las oficinas, y siempre acompañada, ni al baño va sola. Lamento informarle que como falta poco para su boda, se fue a vivir con el tipo ese... no sé qué más puedo hacer para ayudarlo.

Piccolo: Necesito hablar con ella sin que esté esa mujer.

Jenny: No la dejan sola jamás.

Piccolo: Sabes dónde vive ahora.

Jenny: Lo llevaré.

Al llegar se acercan a una ventana del segundo piso, y ven una extraña escena, Izbet está en mitad de una sala, quieta, con un tipo a su lado, que Jenny identifica como Eliot, y la guardaespaldas de nombre Ariel.

Eliot: Pronto nos casaremos, amorcito.

Pero cuando se acerca para darle un beso, una diadema que tiene en su cabeza pasa de un color plateado a uno rojo.

Ariel: Cuidado hermano, no quiero que su cerebro se queme antes de tiempo.

Eliot: Eso es imposible, antes caería inconsciente. No puedo creer que prefiera que esa cosa la toque, y no yo, nadie sabía de esa relación, menos mal que nos enteramos a tiempo, y pudimos neutralizar al tipo.

Ariel: Justo en el momento del beso en la iglesia, apretarás el botón y lamentablemente sufrirá un aneurisma cerebral, dejándote viudo.

Eliot: Me hubiera gustado más hacer esto con la Corporación Capsula, pero Bulma ya me conoce - hablando hacia Izbet - así aprenderás a no ser tan amable, mira como estas ahora por probarte un momento "la diadema de mi madre", jajaja.

Piccolo contiene su rabia y va donde Bulma, pero antes deja a Jenny en su casa. Al llegar a la Corporación Cápsula, le cuenta todo a la científica, la que al principio piensa que son paranoias de un despechado, pero al escuchar el nombre del sujeto y su hermana, los recuerda.

Bulma: Es un científico de lo más peligroso, trabajaba para lograr el control de la mente, pero desapareció hace muchos años. Todas las personas que uso en sus experimentos murieron, a los primeros les hizo explotar el cerebro con un control antes de escapar de la policía, los demás pasado 15 días máximo morían irremediablemente, o al tratar de quitar los conectores, son como aguijones muy finos que tenían enterrados en sus cabezas ¿Viste si Iz tenía algo extraño alrededor de su cabeza?

Piccolo: Una diadema.

Bulma: Eso debe ser, en alguna parte debe tener los contactos que entran en su cerebro, debemos llamar a los demás para rescatarla, y ver como volverla a la normalidad.

Piccolo: No, si vamos todos la puede matar, debo ir solo.

Bulma: Pero si pasa eso podemos revivirla con las esferas del dragón... ya anularon los deseos pedidos el año pasado ¿Verdad?

Piccolo: ... necesitaban pedir otros, y con Izbet decidimos esperar para la próxima vez...

Bulma: Más razón para que te acompañen.

Piccolo: Si no sabes nada de mí en la mañana, entonces avísales.

Bulma: No sería mejor...

Piccolo: No, esto es algo que debo hacer solo.

Pero cuando llega a la casa del científico, siente el ki de alguien conocido.

Piccolo: Jenny ¿Qué haces acá? Es peligroso.

Jenny: ¿Tiene un plan para rescatarla?

Le cuenta su conversación con Bulma.

Jenny: Debe haber una forma para quitarle esa cosa del cerebro.

Piccolo: Lo primero es llevarla a la Corporación Cápsula.

Jenny: Iré con usted.

Piccolo: Es mejor que entre solo.

Jenny: Ella es más que una jefa, o una simple amiga, no puedo quedarme sin hacer nada para ayudarla - en su cara ve la misma determinación de Izbet cuando quería salvar a Videl, cuando recién la conoció.

Piccolo: Esta bien, pero harás lo que yo diga.

Jenny: Por supuesto.

Entran al dormitorio donde está ella para llevársela lejos del alcance del aparato remoto, pero por cámaras vigila Ariel, quien avisa a su hermano, y llegan inmediatamente con algunos guardaespaldas.

Eliot: Que tenemos acá... otra versión de la bella y la bestia.

Piccolo: Sabemos que tienes controlada su mente.

Eliot: Que inteligente, quien lo diría... muchachos a él.

Ariel mira a Jenny y entre ambas comienza el combate, pero no dura ni cinco minutos, la hermana del científico no era rival para la campeona. Piccolo rápidamente logra dejar inconsciente a los guardaespaldas, Eliot aprovecha una distracción para lanzar uno de los aguijones controladores contra el namekuseijin, que se le entierra en la pantorrilla, Jenny le ayuda, cuando lo retiran sale mucha sangre, en Izbet, que escucha todo, crece la inquietud por su amado, llora, y la diadema está color rojo esmeralda.

Eliot: Vaya... la bella se preocupa por su bestia, lamentablemente no podrás soltarte de mí control, antes caerás desmayada, ninguna mente humana es lo suficientemente fuerte para liberarse.

Ninguna mente humana piensa Piccolo, entonces baja su ki al mínimo, le pide a la asistente que se aleje, cuando llegan nuevos guardaespaldas, el namekuseijin deja que lo golpeen, Jenny quiere ayudarle pero con la mirada la detiene, con la vista apunta a Izbet, quien ya tiene los ojos plomos, luego de un momento se escucha un nuevo grito de la mujer.

Jenny: Sr. Piccolo, cuidado, un cuchillo.

En ese momento una energía negra envuelve a los hombres, los golpea contra la pared, y caen inconscientes.

Piccolo: luego de limpiarse la sangre de la boca, le dice al científico - ¿Sabías que ella no es humana?

Éste mira a la mujer ciega y ve como la diadema no está en su cabeza, entre su cabello corren algunos hilos de sangre, Izbet tiene sus ojos negros, y extiende sus alas oscuras, dobla la diadema con sus manos, se acerca al científico, y la deja caer frente a él, lo toma del pecho y lo lanza lejos, se acerca a Piccolo, y en vez de abrazarlo, empieza a insultarlo.

Izbet: Idiota, animal, estúpido, imbécil - el namekuseijin y Jenny la miran preguntándose qué pasa ahora - porque no te defendiste, pudieron lastimarte gravemente - llora y lo abraza.

Eliot toma un aguijón, y corre para enterrárselo a su futura esposa que está de espaldas a él, Piccolo se da vuelta para recibir la estocada, pero Jenny está atenta, lo patea, haciendo que caiga al suelo luego de rebotar contra la pared, Izbet se acerca y le levanta el mentón con la punta de una de sus alas.

Eliot: ¿Qué cosa eres?

Izbet: con una sonrisa maligna - un demonio.

Piccolo: MI demonio.

Izbet: Será mejor que no digas nada de la persona verde, los ojos, las alas negras y todo esto, sino haré que te lleven a un manicomio, y allí donde estés nadie podrá evitar que lleguemos - Eliot mira a Piccolo y a ella, asiente y se deja caer derrotado - Jenny, gracias por todo, te arriesgaste mucho.

Jenny: No podría quedarme de brazos cruzados.

Izbet: Por favor, llama a la policía, estos ya no darán más problemas - dirigiéndose a Piccolo - será mejor que te vayas.

Piccolo: Iré a avisarle a Bulma que todo está bien, sino al amanecer tendrás a todos en este lugar.

Izbet: ¿Puedes esperarme en casa? - lo abraza - gracias, tú y Jenny se arriesgaron mucho por mí.

Piccolo: Sabíamos que algo extraño pasaba - le da un beso - te amo, voy a avisarles también a Dende y Mr. Popó, luego iré a la casa.

Eliot y su grupo es entregado a las autoridades, Izbet vuelve a sus empresas, y Jenny a su puesto de asistente personal. Bulma hace una fiesta el siguiente fin de semana para celebrar que todo termino bien (siempre busca motivos para organizar algún festejo). Ese día Izbet pasa a buscar a Piccolo, Dende y Mr. Popó al templo, pero antes de partir a la Corporación Capsula.

Piccolo: Dende, queremos pedirte un favor.

Dende: Díganme.

Piccolo: ¿Podrías bendecir nuestra unión?

Dende: Será un placer - extendiendo sus manos hacia la pareja - quisiera bendecir la unión de estos dos seres, que a pesar de las diferencias, y dificultades que han encontrado en su camino, nada ha podido separarlos, su amor ha pasado por muchas pruebas, que demuestran que es verdadero, y que durará por siempre.

Izbet: Gracias, fue muy lindo - le da un beso en la mejilla a Dende, que se sonroja.

Piccolo: la toma de la mano - vámonos, Dende, Mr. Popó, no debemos llegar tarde.

En la fiesta.

Gohan: Mira quienes llegan... ¿Qué pasa?

Videl: De pequeña siempre vi a Iz segura, alegre, pero siempre sola, cuando le preguntaba porque no tenía esposo, me decía que ningún hombre podría comprenderla. Pensaba que era mitad humana, por eso sentía que nadie la entendería, ahora sabe que no es humana, pero encontró a otros que son como ella, saben su verdad y la aceptan... cuando empezó a ir regularmente al Templo Sagrado, noté que ellos se volvieron la familia que necesitaba.

Gohan: Lo sé, yo me siento igual por el Sr. Piccolo, cuando fue a vivir al Templo Sagrado después de fusionarse con Kamisama, me alegró que tuviera con quienes compartir. Cuando Izbet empezó a entrenar con él, y me di cuenta que se convirtieron en buenos amigos, me dio mucho gusto por ambos, pero desde que empezaron su noviazgo, se le nota completamente feliz, aunque es difícil notarlo para quien no lo conoce bien.


Videl: Pensar que fue por un deseo pedido por Pan que ambos pueden estar ahora como pareja. Me pregunto qué sería de ellos si eso no hubiera pasado.

Gohan: Mejor no pensarlo, las cosas pasan por algo. Vamos a saludarlos mejor.

FIN
Se fuerte, hazte grande pero no pierdas la inocencia de tu corazón...

Imagen
Avatar de Usuario
Arwen
Supersaiyano dai san dankai
Mensajes: 884
Registrado: Jue Ene 10, 2019 9:53 am

Re: Fanfic Angel Ciego by Izbet46

Mensaje por Arwen »

CAPITULO 6: EL HIJO DE IZBET Y PICCOLO
Spoiler:
EL HIJO DE IZBET Y PICCOLO

Jenny: Buenas tardes, Sra. Videl, soy Jenny, la asistente de Izbet.
Videl: Buenas tardes ¿En qué puedo ayudarle?
Jenny: Disculpe ¿Podría hablar con su esposo?
Videl: Espere un momento, por favor - tapando con la mano el auricular para que no se oiga - Gohan, es la asistente de Iz, quiere hablar contigo.
Gohan: Hola, soy Gohan, dígame en que puedo ayudarla.
Jenny: Disculpe, creo que usted sabe cómo contactarse con el Sr. Piccolo, el novio de Iz.
Gohan: Sí, efectivamente.
Jenny: Necesito comunicarme con él urgente, podría decirle que me busque mañana temprano, a las 7 en la oficina por favor, debo decirle algo urgente.
Gohan: Está bien, me contactaré inmediamente con él.
Jenny: Muchas gracias y disculpe la molestia - cuelga el teléfono.
Videl: ¿Qué pasa?
Gohan: Quiere que el Sr. Piccolo vaya mañana a la oficina a conversar con ella, es algo importante, como no sabe ubicarlo, pensó en pedirme ayuda.
Videl: ¿Qué puede ser?

Al otro día a la hora en punto llega Piccolo.

Jenny: Buenos días, Sr. Piccolo
Piccolo: Buenos días ¿Qué ocurre?
Jenny: Sé que no debería hacer esto, pero quiero mucho a Iz... hace como 20 días empezó con náuseas, y algún vomito ocasional, pero la semana pasada se desmayó dos veces, me prometió hacerse ver, pero usted sabe cómo es... y no sabía a quién más recurrir.
Piccolo: No te preocupes, me haré cargo - antes de irse - gracias.

Va a pedirle consejo a Bulma.

Piccolo: Hola.
Bulma: Hola, que sorpresa ¿Qué pasa?
Piccolo: Necesito llevar a Iz con un médico, conversó conmigo Jenny, su asistente, hace un tiempo ha tenido náuseas y vómitos, la semana pasada se desmayó, pero no se ha hecho ver.
Bulma: mmm, tráela, creo saber que pasa, mientras iré a una farmacia.

Así que Piccolo va a buscarla, entra directo a la oficina, la toma en sus brazos y sale con ella por la ventana.

Izbet: ¿Qué pasa para que me saques así? Podría haber estado con más personas.
Piccolo: Te desmayaste un par de veces la semana pasada.
Izbet: ¿Pero cómo...? Jenny... juro que la despediré...
Piccolo: Sabes que no lo harás, hizo lo correcto.
Izbet. Yo pensaba que nunca me traicionaría - con los brazos cruzados, fastidiada.
Piccolo: No lo hizo, sólo está preocupada por ti.

Apenas llegan a la casa de Bulma, ésta la toma de la mano y la lleva al baño, Piccolo alcanza a escuchar algunas palabras sueltas: imposible, médicos, equivocarse, protegieron, la última frase dicha por Bulma si la escucha y muy clara; si logró que Vegeta me acompañe a los eventos sociales, tú harás lo que yo digo y AHORA. Al rato, Bulma lo llama.

Bulma: Piccolo ayúdame, Iz se desmayó.

Él la lleva a una de las habitaciones.

Piccolo: ¿Por qué estás tan contenta? Se volvió a desmayar.
Bulma: Salgamos, debe descansar.

Ya en la sala.

Bulma: Ahora fue por la impresión.
Piccolo: ¿Impresión? Tiene que ver con este palito que tenía en la mano - en una pequeña ventanita se ven dos rayas rosadas.
Bulma: Es un test de embarazo y dio positivo.
Piccolo: ¿Cómo?
Bulma: Positivo, está embarazada.
Piccolo: Pero si a ella le dijeron que no puede tener hijos.
Bulma: No sería la primera vez que los médicos se equivocan, voy a ver si ya despertó - con una gran sonrisa.

Piccolo está muy confundido. En la habitación:

Bulma: ¿Estas bien?
Izbet: Sí, complicada, siempre me dijeron que no podía ser madre.
Bulma: A veces estas cosas pasan, además recuerda que Piccolo no es humano.
Izbet: Todavía esta acá.
Bulma: Si, por supuesto, está esperando en la sala.
Izbet: Pídele que venga, por favor, necesito hablar con él.
Bulma: Te notó preocupada en vez de feliz.
Izbet: Sólo pídele que venga, por favor - va a buscarlo.
Piccolo: ¿Cómo te sientes?
Izbet: Bien creo, necesitamos hablar, supongo que ya te contó Bulma que estoy embarazada
Piccolo: Así es - ella empieza a sollozar - ¿Qué te pasa?
Izbet: Nunca te conté que me habían dicho que no podría tener hijos, por eso no me cuide y como tampoco me tocaste el tema, creo entender que no quieres tener, y ahora por mi descuido... lo siento.
Piccolo: tomándole las manos se sienta en la cama - yo sabía desde que fuimos a Namek que no podías ser madre, por eso no te toque el tema, sé que te duele mucho, pero eso no quiere decir que no esté contento con la noticia, me tomó por sorpresa, recuerda que no soy expresivo con mis emociones, pero tener un hijo contigo es grandioso.
Izbet: De verdad me sacas un peso de encima ¿Crees que seré una buena madre? Sabes que muchas veces soy peor que un crío.
Piccolo: No te preocupes, sé que serás una excelente mamá con la pequeña...
Izbet: Yo creo que será un niño...

Ya ha pasado un mes más, Izbet no va a su empresa, sólo Jenny sabe la verdad, ya que dijo que quería tomarse un tiempo libre, así puede quedarse en casa y cuidarse. Bulma le hace una ecografía, ya que si la hace un médico puede notar ciertas característica especiales (antenas), hasta ahora parece un humano normal, pero los resultados son de uno de más de 3 meses, no dos, está creciendo muy rápido. Al buscarle el nombre, lo primero que deciden es ni Piccolo ni Izbet, todos lo que les sugerían no le gustan a uno, a la otra, o a los dos, al final se deciden por Yun, ya que les servirá si es niño o niña.

Bulma: A este ritmo, creo que a los 5 o 6 meses ya debería nacer.
Izbet: No es muy pronto.
Bulma: Para uno humano sí, pero recuerda que ninguno de ustedes lo es. Te haré un examen de sangre, para ver cómo están tus niveles de glóbulos, quiero ver si debes tomar vitaminas.

Pero al tomarle la muestra, ésta es de un color café.

Bulma: Piccolo, la sangre de Iz era roja ¿Verdad?
Piccolo: Sí ¿Por qué dices era?
Bulma: Mira, se la acabo de sacar... déjame tomar un poco de la tuya.

Pone unas gotas en un tubo, y luego Bulma mezcla unas gotas de su propia sangre, el resultado es el mismo tono extraño.

Bulma: Creo que es la sangre del bebé que se mezcló con la de ella, como es primera vez que pasa esto, todo es conjetura nada más, creo que tendrá la sangre como tú.
Ha pasado un mes más, en la ecografía logran ver que es un niño, su aspecto es totalmente humano, al cumplir los 5 meses deciden hacer el baby shower, los varones van al Templo Sagrado para entrenar, conversar y darle consejos al futuro papá. En la Corporación:

Milk: ¿Cómo te has sentido?
Izbet: Bien, sólo hecho de menos entrenar con Piccolo, y luego terminar... - se sonroja.
Bulma: riéndose - así que fue luego de un entrenamiento que "hicieron" al pequeño - Izbet parece tomate.
Videl: para cambiar de tema – ¿No vino Jenny?
Izbet: No, sus hijos están enfermos.
Milk: ¿Y piensan darle un hermanito a Yun?
Izbet: No, con uno creemos que es suficiente.

En eso Izbet hace un gesto de dolor.

Bulma: ¿Qué pasa?
Izbet: Una pequeña molestia en la espalda, es que crece muy rápido.

Al terminar, Izbet empieza a ordenar las cosas, pero al moverse con varios regalos en la mano, el dolor se hace más grande y seguido, se sienta quejándose.

Videl: ¿Qué te ocurre?
Izbet: Ya viene el bebé.
Videl: No puede ser.
Milk: Vamos al hospital.
Izbet: No creo poder llegar, acabo de romper fuente.

Tienen que llevarla rápidamente a una habitación.

Videl: llamando al celular de Gohan - Nuestro cliente tiene su teléfono móvil apagado o está fuera del área de cobertura - En el Templo no llega la señal - llama a Goten - Goten, por favor, anda al Templo Sagrado y avísale a Piccolo que el bebé ya está por nacer, estamos en la Corporación, no podremos llegar al hospital, ya rompió fuente, rápido por favor.
Trunks: ¿Qué pasa?
Goten: El hijo de Piccolo está por nacer, debemos ir al Templo a avisarle.

En el Templo, llegan ambos lo más rápido que pueden.

Goten: Piccolo apúrate, ya está naciendo el bebé, están en la Corporación, ya rompió... el plato...
Trunks: Tonto, rompió fuente.
Goku: Te llevaré - y con la teletransportación lo traslada.

Cuando llegan todo está en silencio, el namekuseijin busca en la habitación donde siente el ki de las mujeres, al entrar, ve a Iz con un bebé que está mamando.

Izbet: Yun, llegó tu papá - hacía Piccolo - el pequeño nació con hambre.
Piccolo:... - no sabe qué hacer ni que decir, está quieto.
Bulma: Es mejor que ella descanse, todo fue muy rápido.
Izbet: Estaba apurado para conocernos.

Milk toma al pequeño y lo acomoda con la manta en los brazos de su padre, donde se ve minúsculo, al sentir como Goku llega con los demás, sale a presentarles a su primogénito, cuya piel tiene un tono verde claro, a las horas comienza a balbucear algunas palabras, al cuarto día tiene el porte de un niño de 1 año, debido a esto, deciden que lo mejor es que vaya al templo hasta que su crecimiento, pasado los 4 o 5 años fuera más lento, y así poder pasar por un humano, para que pueda vivir con su madre, en ese período Izbet sólo iba algunos días en la semana a verlo, pero desde la tarde del viernes a la del domingo padre e hijo van a quedarse en casa de ella.

Yun: saltando en la cama de sus padres - ya amaneció, levántense.
Izbet: Todavía es muy temprano, estoy cansada, quiero dormir un poco más - esconde su cabeza bajo la almohada.
Yun: ¿De nuevo entrenaron hasta tarde?
Piccolo: Sí, y como tu mamá me ganó, yo haré el desayuno - en el oído de Izbet - descansa, después de lo de anoche te lo mereces.

En el día salen a pasear, ven televisión, juegan, entrenan y salen de compras, ya que de una semana para otras toda la ropa le queda chica. En el templo Dende y Piccolo se preocupan de sus estudios, y con ayuda de Mr. Popó entrena. Aparte del grupo de los Guerreros Z y sus familias, Yun es amigo de los hijos de Jenny, más de la niña, quien a veces hace de niñera para él (ella tiene 13 años), a quien le dicen Bet, ya que su nombre es Izbet, en cambio a su hermano Marcos, no le cae bien el pequeñito. Un día se juntan Izbet y Jenny en el Mall con sus hijos.

Bet: ¿Madrina?
Izbet: ¿Qué pasa?
Bet: ¿Puedo preguntarte algo?
Izbet: Dime
Bet: ¿Por qué Yun crece tan rápido? Hace como un año parecía tener 4 años, ahora ya parece de 7.
Izbet: ... ¿Te acuerdas del papá de Yun?
Bet: Sí.
Izbet: Si creciera tan lento como nosotras no lograría ser tan alto como él.
Bet: Aaaahhh... ¿Y por qué tiene la piel verde?
Izbet: Mmm... ¿Sabes que es un gurú o monje?
Bet: Sí.
Izbet: Su papá pertenece a esos grupos.
Bet: ¿Por eso usa turbante?
Izbet: Sí por eso, ellos no comen carne, ni pan, ni casi nada, solo verduras verdes, por eso su piel es de ese color.
Bet: Pero Yun come más cosas que sólo verduras.
Izbet: Por eso su piel no es tan verde como la de su papá.
Bet: Entiendo, voy a jugar con los muchachos.
Jenny: Que mentirosa eres, jajajaja.
Izbet: Quieres que le diga que su papá no es humano, mejor así, además dime si no pienso rápido.

En ese momento unos ladrones que están en el banco del primer piso, al huir suben y entran al parque donde juegan los pequeños, tratan de tomar rehenes, como había pocos niños, casi todos logran escapar, pero Bet cae y queda inconsciente, al ver eso Yun se devuelve y trata de ayudarla, pero a ambos los capturan y les apuntan con pistolas en la cabeza. Las madres no saben qué pasa, hasta que Marcos llega y les cuenta.

Jenny: Dejaste a tu hermana.
Marcos: Ella no pudo escapar, se golpeó la cabeza, no fue mi culpa, Yun se devolvió para tratar de ayudarla.
Jenny: ¿Qué hacemos?
Izbet: Marcos quédate acá, Jenny acompáñame.

El lugar está rodeado de policías, que al ver a las mujeres que se acercan, las tratan de detener.

Jenny: Es mi hija a quien tienen.
Oficial: Lo siento, no pueden pasar.
Izbet: Oficial, soy Izbet Supay, amiga de Míster Satán. Me haré cargo. Jenny vamos.

Pasan entre todos, ya dentro, Jenny le dice dónde están las cámaras de seguridad, e Izbet las inutiliza.

Bandido: Mire jefe, más rehenes.
Izbet: Dejen ir a los niños, soy Izbet Supay, puedo servirles mejor para lo que quieren.
Jefe bandido: Ahora tenemos a los niños y a ustedes.
Izbet: hablando bajo en idioma namek - Yun cuando dejen de apuntarles a la cabeza, haz un campo de fuerza y lleva a Bet donde está Jenny, protégelas hasta que salgan de aquí.
Yun: Si mamá.
Izbet: susurrando – Jenny, cuando le diga a Yun llevará a Bet contigo, por favor llévatelos y cuídalos.
Jenny: Pero...
Izbet: Has lo que te digo – cuando Jenny se desplaza hacia la izquierda, hace desplegar sus alas negras, y sus ojos se vuelven oscuros, los ladrones, además de asustarse, concentran los disparos en ella, esa es la oportunidad que esperaba - Yun ahora.

Sale corriendo con Bet en sus brazos, Jenny los abraza y salen al exterior, dentro Izbet deja a casi todos inconscientes, sólo queda el que apuntaba en la cabeza a los niños.

Bandido: Detente demonio, te conjuro que desaparezcas, en nombre de la luz – y con sus dedos hace una cruz.
Izbet: Conmigo no sirven esas cosas, prepárate para morir, pusiste en peligro a mis niños -cuando va a matarlo, un grito la detiene.

Jenny: IZ, por favor, no lo hagas.

Se detiene y vuelve a la normalidad.

Izbet: Agradécele, si fuera por mí ya estarías muerto - voltea hacia su amiga – Jenny, llévate a los niños, iré a buscar a Yun más tarde, no quiero que queden expuestos a los periodistas.
Jenny: Esta bien.

Cuando sale entra la policía, como había pensado los periodistas la rodean, así Jenny pudo llevarse a los niños tranquila. Ya en casa de su amiga.

Jenny: Que bueno que todo salió bien.
Izbet: Gracias por detenerme, si no me gritas...
Jenny: Sé que quieres a Bet como si fuera tu hija, y que decir de Yun, es la luz de tu vida, tranquila, te entiendo.

Al llegar a casa está Piccolo, que no sabe nada, al cenar ella no quiere poner la televisión, cosa extraña, así que él insiste.

Locutor: Nuevamente llevamos a ustedes el instante en que la Srta. Supay, ex alumna de Mister Satán sale del Mall, luego de detener a los ladrones, y liberar a los niños, lamentablemente no podemos mostrarles fotografías ni video, las cámaras de seguridad fueron anuladas por los delincuentes. Lo que si podemos indicar, por lo dicho por algunos testigos, es que los rehenes eran una niña de unos 13 años, pelo negro, ojos azules; y un niño de unos 7 años, pelo y ojos negros, de piel verde.

Mientras Piccolo mira la televisión, Iz retrocede lentamente.

Piccolo: IZBET - al darse vuelva no la ve - ¿Dónde está tu mamá?
Yun: No sé, creo que salió.
Piccolo: Izbet, es mejor que vuelvas, quiero que me digas exactamente qué pasó. IZBET.

Cuando se va a buscarla, Yun mete la mano bajo la mesa, y su mamá que está escondida allí, le choca los cinco. Lo que ninguno sabe es que a raíz de este incidente, en el futuro, y por acción de otro, hará distanciarse tanto al hijo de su madre, que ella morirá sin volver a verlo.

Dos años después de este incidente Yun pudo ir a vivir con su madre, tiene la apariencia de un joven de unos 16 años, muy parecido físicamente a cuando Piccolo fue humano, ya mide 1.85 cms., se forma un revuelo entre los conocidos de Izbet, ya que aparte de Jenny, nadie más sabía de este hijo, así que ella diplomáticamente indica que es su hijo biológico, sobre el padre, es algo de su vida privada y que a nadie más le incumbe, por eso sólo lleva su apellido, luego de eso ya nadie más hizo preguntas. Yun asiste a la misma escuela que los hijos de Jenny, hace varios amigos, apenas entra demuestra ser muy inteligente, pero casi no hace deportes ya que a Izbet le preocupa que si sangra vean el color tan distinto que tiene, ya algunos lo tratan extraño por su color de piel, y a sus espaldas le dicen el Príncipe Sapo.

Todavía ella no le ha contado su vida pasada completa, solo que su madre era de otro planeta y tenía alas, quiere hacerlo más adelante. Pero Marcos, escucha una conversación entre su madre e Izbet, se reía, ya tengo con que arruinarle la vida a este hijito de mamá, pero no en este momento, esperaré en uno mejor. Le tiene odio, ya que piensa que todos lo consideraban cobarde por haber dejado a su hermana sola cuando los ladrones atacaron en el Mall, y culpa al otro joven por haberse devuelto y demostrar ser más valiente que él, a pesar de ser más pequeño. Pasan un par de meses, y cuando supo que Yun pensaba pedirle a su hermana que sea su novia, lo encuentra camino a su casa, y le cuenta lo que escuchó, tergiversando varias cosas, y mintiendo descaradamente en otras, así que el joven va a buscar a sus padres, que en ese momento estaban en el Templo.

Izbet: ¿Qué pasa que vienes tan agitado?
Yun: Es verdad que soy tu hijo.
Izbet: ¿Por qué me preguntas eso?
Yun: Supe que me has mentido en muchas cosas, quizás en ésta también, me dijeron que tienes una vida que no me has contado, que no eres ni un poco humana, que tu padre, era un demonio, que murió cuando estaba cazando gente para que fueran esclavos, debí suponerlo, por eso tus alas son negras.
Izbet: ¿Quién te contó eso?
Yun: Es verdad o no que mataste a una persona; que ese día que nos tomaron como rehenes si no fuera por Jenny, hubieras matado de nuevo; que tu fortuna la hiciste trabajando en luchas, a mí me prohíbes que haga deportes, mientras vivías de eso; me dices que no use mis poderes, que no es justo para los demás... lo único que te importa en la vida son tus malditas empresas. Papá me contó sobre él y el abuelo, yo entendí, porque no lo hiciste tú, que otras cosas tan o más graves me has ocultado.
Izbet: es que... tal vez sí, pero...
Yun: No necesitas decirme nada, veo que todo lo que me dijeron es verdad... no hay pero que valga, me mentiste, si todo lo que te importa en la vida son tus negocios, sólo deseo que mueras pronto y poder gastar todo tu maldito dinero.

Piccolo no aguanta más, y le da una cachetada, rompiéndole el labio.

Yun: limpiándose con el dorso de la mano - Papá, porque la proteges, siempre me dijiste que pase de lo que pase, hay que decir la verdad, ella es una...
Piccolo: Cuidado con lo que dirás, respétala, es tu madre, te ocultó cosas, pero tenía sus motivos para hacerlo.
Yun: Nada justifica la mentira, no quiero volver a verlos nunca más.

Se va, Izbet queda destrozada.

Izbet: Debí contarle todo hace mucho tiempo, pero no quería que supiera todo lo que sufrí de niña, sobre todo no quería contarle lo de... me arrepiento tanto de no habérselo dicho. No sé cómo lo supo, pero quien le contó lo hizo a su modo.
Piccolo: Tranquila, cuando se calme volverá.
Izbet: Eso espero, lamentablemente es tan testarudo como yo.

Esa noche la pasa en la casa de Bulma, para después desaparecer, pasaron los meses, casi al año, Izbet enferma, y sin poder ver nuevamente a su hijo muere. Esa misma noche coincide que Yun va a conversar de nuevo con su madre, antes de llegar al Templo Sagrado, el pequeño ki de ella desaparece.

Yun: Papá, necesito hablar con mamá.
Piccolo: Llegas tarde.
Yun: ¿Por qué?
Piccolo: Acaba de morir.
Yun: No puede ser.
Piccolo: Espero que vinieras a conversar con ella, pero esa maldita enfermedad se la llevo muy rápido, cuando quiso que te avisarán ya no estabas con Ricky.
Yun: Hace unas semanas converse con él, y luego me fui a la cabaña a meditar todo.
Piccolo: Él la mantuvo informada de lo que vivías, fue uno de los que la conoció cuando era obligada a luchar.
Yun: Lo sé, hace unas semanas lo escuche hablar con mamá, y lo encare, me contó muchas cosas de ella, pero no eran como me habían dicho ¿Cuál es la verdad, papá?

Piccolo le cuenta toda la historia de Izbet, hasta que él nació.

Piccolo: Te conté de mi padre, y de mí, pero tu mamá no quería que supieras todo lo que vivió, sobre todo lo de la violación, la avergonzaba mucho eso, me prometió que te contaría todo cuando fueras mayor.
Yun: Lo siento papá, debí dejar que se explicará, todo hubiera sido tan distinto, soy demasiado testarudo. Por primera vez en mi vida, luego que me fui de su lado, pase hambre y frío, hasta que conocí a Ricky, me ayudó mucho.
Piccolo: Es uno de los amigos que tuvo tu mamá cuando niña, a pesar de haber crecido en ese ambiente, es una buena persona, cuando te encontró inmediatamente le aviso. Tu madre sabía que te habían engañado, que tarde o temprano volverías para conversar, pero su cuerpo no pudo aguantar más, no te preguntare quién, da lo mismo ahora. Voy a casa de Jenny a avisarle de los funerales, hable con Dende y los haremos acá.
Yun: Te acompañare papá, luego vendré a quedarme con mamá.

Cuando llegan, mientras Piccolo habla con la dueña de casa, Yun va a conversar con Marcos.

Yun: ¿Por qué me engañaste? Ahora mamá murió y yo no estuve a su lado.
Marcos: Me alegro, eres un monstruo como ella.
Yun: Como te atreves.
Marcos: Ella era un demonio, y tú también.
Yun: Porque nos tienes tanto odio.
Marcos: Desde esa vez en el Mall todos me tratan como un cobarde, era un niño de 13 años que tenía miedo, tú y tu madre salvaron a Bet, y todos los creen héroes, que fácil, ella con una mirada podía haberlos matado a todos, y tú... eres tal como tu madre, un asesino.
Yun: Mi madre era una buena mujer, y en honor a todo lo que me enseño no te daré lo que te mereces - llega Bet.
Bet: Yun, que bueno verte, ya supe lo de tu madre, lo siento mucho.
Yun: Gracias Bet ¿Quieres ir a sus funerales?
Bet: Por supuesto, quiero... quería mucho a mi madrina.
Yun: Te pasare a buscar, nos vemos - le da un beso en la mejilla y se va.
Bet: Porque lo envenenaste contra su mamá, ellos siempre nos dieron su amistad y cariño, la madrina siempre nos trató como a sus propios hijos.
Marcos: Mentira, sólo te quería a ti, y a ese monstruo que tiene de hijo.
Jenny: ¿Que está pasando aquí?
Bet: Mamá, es el quien le dijo esas mentiras a Yun.
Jenny: ¿Cómo pudiste?
Marcos: Lo quieres más a él que a mí, por ser el hijo de tu jefecita - Jenny le da una cachetada, lo toma de la camiseta.
Jenny: Es el hijo de la mujer que evitó que me violarán cuando era niña, es el hijo de la mujer que me dio la oportunidad de tener una vida normal, es el hijo de la mujer que me dio su confianza y me protegió desde que me salvó de las luchas ilegales, donde yo era poco menos que una esclava. Tienes mucho odio en tu corazón, ojala encuentres como quitarlo, sino tu vida será miserable... además si su sangre es maldita, tú también lo eres.
Marcos: ¿Por qué dices eso?
Jenny: Recuerdas el accidente que tuviste hace tres años.
Marcos: Si, sé que Izbet pagó todo...
Jenny: No sólo pagó todo, necesitábamos sangre, tenías una hemorragia que no paraba, tu padre no podía darte más, Izbet tenía tú mismo tipo de sangre.
Marcos: No puede ser.
Jenny: Ella te dio de su sangre hasta que estuviste fuera de peligro, sentía que tú no la querías, así que me pidió que guardará el secreto, ahora ya no es necesario - lo suelta y cae de rodillas al piso.
Jenny: Bet, mañana iré a los funerales de Iz ¿Quieres acompañarme?
Bet: Si mamá, ya converse con Yun, él me llevará.

Temprano en la mañana en el templo sagrado está el ataúd con el cuerpo de Izbet en medio de todos quienes fueron sus amigos en vida.

Dende: Estamos reunidos para despedir a quien en vida fuera una gran persona, amiga, compañera, pareja, y madre, dio mucho amor a todos, también cometió equivocaciones como cualquiera de nosotros, pero sobre todo nos enseñó que no hay imposibles si uno se propone algo. Ahora cumpliremos su último deseo.

Piccolo toca la madera del cajón, luego Yun, Videl y finalmente Gohan, a una señal del namekuseijin lanzan su ki, que produce una potente luz, al extinguirse todo está convertido en cenizas que se lleva el viento, la última voluntad de Izbet era que sus restos fueran esparcidos por todo el planeta. Terminado el funeral, Gohan y Videl se lleva a Jenny y su hija para que padre e hijo puedan conversar.

Yun: Ahora que haré papá, me siento perdido, que le falle a mamá.
Piccolo: Tu madre siempre estuvo orgullosa de ti, si quieres que siga sintiéndose así en el más allá, deja todo lo malo atrás, estudia como ella quería, y has algo bueno con tu vida.

Yun vuelve al colegio, ya pasados 5 años y con la ayuda de Jenny dirige las empresas de su madre perfectamente, hacía dos años atrás, se comprometió con Bet. Por fin llega el día de su matrimonio, y Piccolo le tiene un regalo de bodas muy especial. En el otro mundo.

Uranai Baba: Por fin te encuentro Izbet, mañana volverás a la tierra por un día, Piccolo me pidió que te avisara.
Izbet: Qué pasa para que quiera que vuelva.
Uranai Baba: No lo sé, sólo te traje el mensaje. Nos vemos mañana, vendré a buscarte temprano.

En el palacio de Uranai Baba, al otro día temprano, está Piccolo esperando a Izbet.

Izbet: ¿Qué pasó que me viniste a buscar?
Piccolo: Sígueme, cuando lleguemos lo sabrás.
Izbet: Siempre te gusta darle ese aire misterioso a todo ¿Verdad?

Llegan a la casa de ella, en el patio está todo arreglado para el matrimonio, Jenny les sale al encuentro.

Jenny: Iz que bueno verte, como te ha ido en el más allá.
Izbet: Bien ¿Qué pasa? El grandote no ha querido decirme nada.
Jenny: Ven, tienes que arreglarte, en unas horas más debes entregar a tu hijo, hoy se casa.
Izbet: ¿Con quién?
Jenny: Con mi hija.

Mientras se arregla, Jenny le cuenta que fue su hijo quien le dijo esas mentiras a Yun, Izbet a pesar de estar furiosa, por cariño a su amiga promete no tomar venganza. Fue una linda ceremonia, muy íntima, al final Yun y su madre pueden conversar y se perdonan sus errores. Aprovechando que todavía le quedan varias horas en la Tierra, Izbet y Piccolo van a todos los lugares que fueron importantes para ambos cuando ella estaba viva, la playa de Florida; el lugar donde se había derrumbado el edificio con Francou dentro; van a la cabaña, como es verano, no pueden ocupar el trineo, pero siguen volando la ruta hasta el lago, y con una luna llena de fondo, vuelan lo más cerca del agua que pueden, simulando patinar.

Ya está por amanecer, así que se sientan en el borde del lugar, a conversar.

Piccolo: Como te ha ido en el cielo ¿Todo bien?
Izbet: Si, me entretengo mucho.
Piccolo: ¿Has conocido gente interesante?
Izbet: Si, todas las tardes conversó con una persona muy simpática, luego de entrenar con mi padre.
Piccolo: Ya veo - nuevamente los celos lo atacan - y ahora supongo que irás a verla apenas vuelvas
Izbet: Por supuesto, a contarle todo.
Piccolo: Tú crees que le interese lo que pasó hoy a esa persona.
Izbet: Como no le importará saber que su nieto se casó.
Piccolo: ¿Te refieres a tu madre?
Izbet: Por supuesto, celoso - como está descuidado lo tira al lago, para luego dejarse caer ella también al agua - te acuerdas esa vez en ese planeta lejano.
Piccolo: Como olvidarlo.

Pero el tiempo ya termino, Uranai Baba llega a buscarla.

Uranai Baba: Lo siento, debemos irnos.
Izbet: No te preocupes Piccolo, estoy bien, y si he de esperar una eternidad para estar contigo, no me desesperaré. Te amo y nada ni nadie cambiará eso - se besan y se va.
Piccolo: se eleva y ve el amanecer - que no daría por morir en este momento e irme contigo, pero todavía este planeta me necesita. Te amo Izbet, y al igual que tú, nada ni nadie hará que cambie eso, nunca.

FIN
Se fuerte, hazte grande pero no pierdas la inocencia de tu corazón...

Imagen
Avatar de Usuario
Arwen
Supersaiyano dai san dankai
Mensajes: 884
Registrado: Jue Ene 10, 2019 9:53 am

Re: Fanfic Angel Ciego by Izbet46

Mensaje por Arwen »

CAPITULO 7: Rebelión en el Infierno
Spoiler:
REBELIÓN EN EL INFIERNO

(Parte de Izbet y Piccolo 4. Un final alternativo)

"Años más tarde, Piccolo decide compartir el destino de la Tierra, y así poder reunirse con su amada, llega al Paraíso y encuentra a Izbet en los pastos.

Piccolo: ¿Cómo estás?
Izbet: Bien, ahora que estas a mi lado.
Piccolo: Sabes lo que quiero hacer ¿Verdad?
Izbet: Se acerca a él - además de esto - le da un beso - sí, sé que quieres hacer.
Piccolo: ¿Me acompañarás?
Izbet: Contigo - sonríe - iría hasta el infierno - empiezan una lucha, donde dejaron el paraíso destrozado, como castigo los mandaron al infierno.
Piccolo: Se cumplió lo que dijiste, hasta el infierno me seguiste.
Izbet: No me importa vivir toda la eternidad en el infierno, sólo quiero estar al lado tuyo siempre.

Así ambos llegan al infierno, donde se convirtieron en los guardianes de la entrada, y pudieron vivir su amor hasta el fin de los tiempos".

Desde que pasó al más allá los mecanismos para moverse de forma independiente que usa Izbet se han deteriorado, hasta que poco después de llegar al infierno no funcionan, allí usa sólo un bastón para moverse, viven en un lugar cerca de la entrada, han seguido entrenando todos los días, y van a caminar para que ella pueda ubicarse mejor en la zona, así Izbet ha "conocido" de lejos a los enemigos que tuvieron los Guerreros Z en el pasado, pero lo que es más peligroso, y ninguno de los dos se da cuenta, es que éstos descubren la relación que los une, así uno de ellos comienza a averiguar todo sobre ella, lo que le ayudará en sus planes de escape.

Trascurrido un tiempo Izbet ha perdido su ironía y la alegría que siempre la caracterizó, elude las preguntas que le hace su amado, hasta que tiene que enfrentarla directamente.

Piccolo: Te notó extraña hace tiempo, ya basta de decirme que no pasa nada ¿Qué ocurre?
Izbet: Antes podía moverme bien sola, ahora chocó con todo, para dar un paseo debes acompañarme.
Piccolo: Debes adaptarte a este lugar, nada más.
Izbet: No podré apoyarte si pasa algo.
Piccolo: Mientras estemos juntos todo estará bien... creo que te pasa algo más, he notado que despiertas muy asustada...
Izbet: He tenido pesadillas, al principio eran de vez en cuando, ahora es cada vez que duermo, siento fuego, destrucción, gritos, trato de encontrarte y no estás en ninguna parte... nuestros amigos, Yun, todos me piden ayuda pero no puedo hacer nada para salvarlos, escucho su agonía y como mueren... luego todo queda en calma, es como si nada ni nadie en el planeta estuviera vivo... despierto desesperada pensando que fue real... ¿Crees que ahora sería de ayuda si pasa algo? Sería mejor para ti si me hubiera quedado en el paraíso.
Piccolo: ¿Lo dices en serio?
Izbet: No tendrías que cargar conmigo.
Piccolo: No eres una carga, eres mi compañera, me has demostrado tu amor de muchas formas desde que nos conocimos, has arriesgado tu vida por mí, tenemos un hijo. Ten paciencia, pronto podrás desplazarte bien, y sobre esas pesadillas sólo trata de no pensar en ellas, y dejarás de tenerlas.
Izbet: Disculpa, esta angustia me tiene mal - él la abraza desde la espalda, y ve como juega con un anillo que tiene en una cadena, es de plata con las iniciales Z y S, su padre se lo dio como recuerdo antes de dejar el paraíso para seguir a Piccolo, ya que sabían que no había posibilidad que se volvieran a ver.
Piccolo: ¿Echas de menos a tus padres?
Izbet: Sí.
Piccolo: Más tarde vamos donde Enma Daio y le pedimos de nuevo un permiso especial para que puedan visitarte.
Izbet: ¿De verdad? Gracias.
Piccolo: ¿Por qué no usas la argolla en la mano? La cadena se puede romper y lo perderás.
Izbet: Eso quisiera pero es muy ancho, tendría que usarlo en dos dedos a la vez, papá es casi tan grande como tú.
Piccolo: ¿Y si lo guardo por ti?
Izbet: ... es el único recuerdo que tengo de mis padres, no quiero separarme de él en ningún momento ¿Entiendes?
Piccolo: Si. Vamos a casa, quiero que descanses.
Izbet: Voy en un rato más, no es tan lejos, puedo llegar sola, quiero pensar un poco.

A solas llora, en la Tierra no necesitaba apoyo para nada, si pasa algo ahora no sabe si podrá ser de utilidad, ese sueño es tan real ¿Y si no es sólo una pesadilla? Por primera vez en su vida desearía con todo su corazón poder ver, ya que los implementos se deterioran y no hay batería que dure para siempre; desearía ser más poderosa ya que la primera vez que sintió el ki de los enemigos de los Guerreros Z se sorprendió, son muy fuertes y a pesar de lo que le asegura Piccolo, no está segura que podría derrotar a alguno de ellos; desearía... se acuerda de su padre que le decía, cuidado con lo que deseas porque puede convertirse en realidad... al levantarse, la golpean y antes que caiga inconsciente al piso, la toman en brazos y se la llevan.

Piccolo: ¿Por qué demoras tanto? ¿Estás bien? - mira para todos lados - su ki está muy bajo... ¿Por qué se fue tan lejos?

La encuentra junto a un grupo grande, entre ellos están Babidi, algunos saibamen, Raditz, Nappa, parte del Escuadrón Ginyu, el Rey Cold, Pui Pui, el Dr. Gero, y Freezer, ve al ogro Saike, el encargado de retirar los contenedores de energía negativa de la purificadora de almas, atado (está máquina y el ogro aparecen en la película FUSION), Izbet está sujeta por Cell sobre la entrada del artefacto, Piccolo recuerda lo que le dijo una vez a Vegeta, cuando el alma está limpia de maldad, olvida su vida anterior y reencarna inmediatamente.

Piccolo: Desgraciado, quítale las manos de encima - hace ademán de acercarse a ellos, pero el androide acerca más a Izbet a la entrada de la maquinaria.
Freezer: Quédate hay sino Cell meterá a la mujer en la purificadora.
Piccolo: ¿Qué quieres?
Freezer: Sólo queremos ver cómo funciona, si no quieres que la probemos con ella... ¿Qué tal contigo?
Cell: Alguien que me ayude con esta gata salvaje - grita, tiene mordidas, rasguños y la cola en su entrepierna para protegerse de las patadas.
Babidi: Ni loco me acercó, casi me arranca el dedo al ponerle la mordaza.

Piccolo la ve cansada, con moretones en los brazos, trata de apartar su furia, y pensar fríamente como salir de esta situación.

Izbet: logra soltar la venda de su boca, entonces grita - No los escuches, usa todo tu poder contra ellos - Cell la golpea en el estómago para que guarde silencio - oye Freezer, tu novio golpea como niña... - aunque está doblada del dolor.
Freezer: Mujer, deja que los hombres hablen, calladita te ves más bonita jajajajaja.
Izbet: Espera que me suelte y veremos si sigues riendo - continua forcejeando con Cell.
Freezer: Mujer, no puedes compararte conmigo.
Izbet: ¿Por eso tuvo que atraparme éste y quitarme energía? Deja de llamarme mujer, o acaso quieres ser como yo ¿Le preguntamos a tu novio como te prefiere? - el androide le da una cachetada.

Ella sabe que sin Piccolo que los detenga nadie podrá evitar que salgan a la Tierra, harán mucho daño... se acuerda de su sueño, éste puede cumplirse... su hijo Yun, Bet, sus amigos... no quiere arriesgarse, sabe que él es el único capaz de detenerlos, la angustia de los días anteriores por fin desaparece.

Izbet: habla en el idioma namekuseijin - No puedes tomar mi lugar, mi pesadilla se volvería realidad, no dejaré que eso pase, sé que no te gustará lo que haré, pero siento que es la única solución.
Piccolo: No lo hagas, encontraré la manera de resolver esto - le pide en el mismo idioma.
Izbet: No puedo correr el riesgo, debo evitar como sea que mi sueño se vuelva realidad... te amo, mi último pensamiento será para ti y nuestro hijo - todavía en namekuseijin.
Piccolo: ¡¡¡NO!!! - todos se distraen con su grito.
Freezer: es el primero en comprender lo que pasa - Cell cuidado, no la sue... - no alcanza a decir nada más, Izbet junta las últimas energías que le quedan, hace aparecer sus alas y las extiende rápidamente, el androide sorprendido la suelta.

Piccolo ve como cae en la máquina, baja la vista al suelo, cierra los ojos y aprieta los puños, los rebeldes aprovechan para atacarlo, al levantar nuevamente la cabeza hasta los más valientes entre ellos sienten lo que es el terror, el ki del namekuseijin en ese momento hace estremecer el infierno y el paraíso. Nada lo detiene, golpea, lanza rayos, es increíble la rapidez que tiene, en un instante logra tener todo bajo control, pero siente que el precio que pagó por el triunfo fue muy alto.

Enma Daio: Llegamos apenas pudimos, tuvimos que sofocar una revuelta en el otro extremo del infierno, ahora entiendo que fue una distracción para dejarte solo con ellos... me dijeron que prefirió ser ella la que pasara por la purificadora de almas, en vez de ti.
Piccolo: Así es.
Enma Daio: Saike ¿Qué pasó con la máquina? - pregunta al ver que sale humo de ella.
Saike: No lo sé, el mecanismo se quemó, lo que no sé si el alma logro ser enviada para encarnar antes que explotará, sino...
Piccolo: ¿Sino qué?
Saike: Desapareció para siempre.
Piccolo: No puede ser.
Enma Daio: Lo siento, fue una mujer valiente.
Piccolo: Es una mujer valiente, su alma no se disolvió, renació, estoy seguro.

Mientras los ogros se llevan a Freezer y los demás, a Piccolo le llama la atención algo que brilla en la tierra, es la cadena con la argolla del padre de Izbet, los toma, arregla la cadena, y se la pone con el anillo al cuello, mira al cielo, cierra los ojos, y pide con todas sus fuerzas que Izbet haya encarnado, y que esta vez pueda tener una vida feliz.

Pasado tres días, Piccolo por fin logra dormitar algo y sueña con ella, le pide paciencia, que volverá, fue tan real, despertó triste, pero esperanzado que fuera una señal de que está bien.

A la semana de la rebelión, él sigue cerca de la entrada, entrenando solo y recordando a Izbet cada vez que siente la argolla, y preguntándose ¿Tendrá una vida tranquila en esta encarnación? ¿Podrá reconocerla de alguna forma si llega al infierno de nuevo? De lo que está seguro es que tendrá nuevos amigos, familia, y lo que le duele más, otro amor, cuando la juzguen de nuevo será con alguien más con quien tendrá formada una historia de vida. Se niega siquiera a considerar que su alma desapareció. En ese momento llega Enma Daio con un grupo de ogros que rodean a alguien, de quien sólo se ve la aureola de su cabeza.

Enma Daio: No te fíes por su apariencia, al verla pensamos que era un ángel ya que la trajo Kaio Shin, antes de irse nos dijo que salvó un planeta entero, ni siquiera pude revisar su expediente, al comentar que con esos antecedentes debía ir directo al paraíso, se enfureció y destrozó la oficina, así que la traigo como castigo. Creo que tendrás que vigilar muy de cerca a este individuo - cuando se apartan ve a una mujer con un vestido largo blanco con capucha que cubre la parte superior de su rostro, tiene a su lado un bolso.

A Piccolo le llama la atención su sonrisa irónica, se le hace muy conocida esa forma de pararse con los brazos cruzados... le recuerda a... está seguro que DEBE ser ella, quiere comprobarlo, pero al mismo tiempo teme levantar el capuchón y descubrir que sólo fueron sus ganas de encontrarla las que lo confundieron, se acerca lentamente, con mano insegura aparta la capucha.

Izbet: Hola grandote.
Piccolo: Eres tú - se abrazan, la besa primero en la frente y luego en esos labios que temió no poder probar nunca más, cuando se separan - vi como caíste en la purificadora de almas ¿Qué pasó contigo?
Izbet: Adentro no tenía fuerzas ni para moverme, antes de desmayarme sentí que alguien me tomaba la mano, cuando desperté escuche a dos hombres discutiendo, el lugar no me resultaba familiar.

Recuerdo

Kaio Shin: Debe ayudarla, usted mismo me dijo que tiene un gran potencial oculto, por eso me teletransporte a la máquina, y la traje.
Anciano Kaio Shin: Lo que no entiendo es por qué, en el infierno ya tienen a los ogros y a Piccolo ¿Para qué necesitan más ayuda? Es sólo una mujer ciega, no debiste cambiar su destino.
Kaio Shin: Cada vez llegan enemigos más poderosos al inframundo, Piccolo es un gran aporte pero hasta él podría necesitar apoyo en el futuro, ella ha demostrado ser valiente y astuta.
Anciano Kaio Shin: Puede que tengas razón pero también es impulsiva, orgullosa, testadura y no respeta la autoridad, además no es tan fuerte, todavía no ha despertado.
Izbet: ¿Quién dice que no, viejo estúpido? - le junta las manos en la espalda y lo tira al suelo, quedando sobre él para que no se mueva - ¿Así que sólo soy una mujer ciega? - está molesta, odia cuando la subestiman de esa manera.
Kaio Shin: Por favor, suéltelo.
Izbet: Sólo porque me lo pides tú, por lo que escuche te debo haberme rescatado de ese maldito artefacto.

Fin del recuerdo

Piccolo: ¿Por qué no me dijiste dónde estabas? ¿Ocultaste tu ki?
Izbet: Quería darte la sorpresa ahora que me permitieron volver. Cuando desperté en el Planeta Sagrado, no tenía como avisarte, exigí que me mandarán de vuelta contigo, pero Shini...
Piccolo: ¿Shini?
Izbet: Me acostumbre a decirle así a Kaio Shin, él me hizo entender que debía lograr que el anciano sacará todo mi potencial, Shini quería avisarte pero ese viejo lo prohibió, fue su manera de castigarme por haberlo botado al piso, pero en secreto me prometió que te haría saber de alguna forma que estaba bien.
Piccolo: recuerda cuando durmió la primera vez luego que ella desapareció, ahora entiende que fue la manera de avisarle del Kaio Shin - te vi en un sueño, me decías que volverías, entonces fue él.
Izbet: Exacto. Ese viejo me obligo a esperar callada y quieta 5 días para demostrarle mi fuerza interior, y que podía controlar mis emociones, fueron horribles esos momentos, Shini me daba ánimos... pensaba en ti, en como estarías... si ya sabias que estaba bien... al final hizo el ritual, además... - abre sus ojos, ya no son blancos, tiene las pupilas café oscuro.
Piccolo: ¿Puedes ver? - se pregunta nervioso si sentirá lo mismo por él ahora, siempre tuvo la duda ¿Si ella no hubiera sido ciega su relación se habría dado igual?
Izbet: Cielos, sabía que eres muy especial por dentro, eso me enamoro de ti, pero ni en sueños pude imaginarme lo bello que eres... - está fascinada viéndolo.
Enma Daio y los ogros: Yyy...
Izbet: ¿En que estaba...? - sonrojada, se había olvidado de ellos - me distraje... después de aumentar mi poder, Shini me pidió que me quedará un rato con el anciano, dijo que faltaba algo más, fue a pedirle ayuda al Gran Patriarca para devolverme la vista, Jattyta, Tochat y los demás mandaron saludos.

Aproveche que luego tuvo que llevarme a la Tierra por una cosa y le pedí poder ir a ver a Yun, fuimos y te mando varias fotografías ¡Luego te contare una gran sorpresa que me lleve!

Piccolo: ¿Sólo eso traes en tu bolso? Se ve que hay más cosas.
Izbet: Tengo lo necesario para cobrarme algunas deudas pendientes, ya vuelvo - extiende sus alas y se va.

Piccolo aprovecha de pedirle de nuevo a Enma Daio que los padres de ella puedan ir a visitarla, después de todo estuvo dispuesta a sacrificarse para salvar la Tierra de la rebelión, antes que le responda sienten el ki de Izbet y de Freezer, al rato el poder de él baja hasta que queda casi inexistente, lo mismo pasa con Cell, al Jefe Ogro lo llaman a su celular.

Enma Daio: Freezer tiene un vestido puesto y está colgando de la aguja de montaña... ¿Qué le sacó el aguijón a Cell, y se lo metió dónde?... está depilando con cera caliente los pelos de la cabeza de Babidi - cierra y guarda el celular - Tiene un carácter muy complicado.
Piccolo: Sólo con quienes la subestiman.
Enma Daio: Nos vamos, dile que sus padres tienen permiso de venir a verla cuando quieran, yo les avisare - se van.

Al rato vuelve Izbet, hace desaparecer sus alas.

Piccolo: ¿Qué hiciste?
Izbet: Me cobre lo que me debían, luego de esto todos me conocerán en el infierno, ya nadie pensará usarme para presionarte.
Piccolo: Enma Daio autorizó que tus padres puedan venir a verte cuando quieran.
Izbet: Por fin podré volver a estar con ellos, y tú conocerás a tu suegra, te llevarás bien con ella, es un verdadero ángel.
Anciano Kaio Shin: desde el Planeta Sagrado - ¿Trajiste lo que te pedí por extraer tu potencial oculto?
Izbet: Si, aquí está - un sobre que tiene en las manos se desvanece y aparece en las manos del anciano.
Piccolo: ¿Qué fue lo que te pidió?
Izbet: Una fotografía de cuando era joven en traje de baño.
Piccolo: Maldito viejo libidi... - empezó a mascullar con los dientes y puños apretados, pero ella le hace un guiño con el ojo, y un gesto rápido para que guarde silencio.

En el Planeta Sagrado.

Kaio Shin: No debió pedirle algo así.
Anciano Kaio Shin: ¿Cuál es el problema? Al final acepto.
Kaio Shin: No le dejó otra opción.

Recuerdo

Anciano Kaio Shin: Incrementaré tu poder, ya lo hice con Gohan cuando peleó con Majin Buu, pero debes darme algo a cambio.
Izbet: Hombre tenía que ser... - cruza los brazos - ¿Qué quiere?
Anciano Kaio Shin: Una fotografía tuya en traje de baño.
Izbet: ¡¡¡POR NINGÚN MOTIVO ME TOMARE UNA ASÍ PARA USTED!!!
Anciano Kaio Shin: ¿Quieres ser una de los más fuertes en el infierno? Debes dejar tu orgullo de lado, ese es uno de tus mayores defectos.
Izbet: luego de pensar unos minutos - ... ganó... debe ser una actual, o puede ser de cuando era más joven.
Anciano Kaio Shin: Mejor de cuando eras más joven, pero al menos debes tener 20 años, de cuando eras bebé no quiero, no pretendas pasarte de lista conmigo.
Izbet: Rayos... me leyó la mente... ¿Debe ser algún tipo de traje de baño en especial?
Anciano Kaio Shin: No, cualquiera.

Fin del recuerdo

Anciano Kaio Shin: cuando abre el sobre... - ¿Pero qué es esto?
Izbet: Lo que me pidió, una fotografía de cuando era más joven, allí tengo 35 años, y estoy en traje de baño.
Anciano Kaio Shin: Pero tienes más ropa que yo.
Izbet: Era la feria del recuerdo, modelamos los primeros trajes de baño de la época moderna.
Anciano Kaio Shin: Me engañaste.
Izbet: Fui más hábil en su juego, nada más.
Kaio Shin: Se lo merece jajajaja.
Anciano Kaio Shin: Nunca más ayudaré a una mujer.
Kaio Shin: a Izbet - me alegro que le ganó en su terreno.
Izbet: No debían preocuparse Piccolo ni tú, aprendí a tratar con tipos así en mi empresa.
Kaio Shin: Con esto compruebo que tome la decisión correcta.
Izbet: Gracias por salvarme, por las atenciones que tuviste conmigo cuando estuve en el Planeta Sagrado, y por permitirme ir a ver a mi hijo.
Kaio Shin: De nada, fue un verdadero placer conocerla, le queda bien ese vestido, parece un ángel. Adiós - corta la comunicación.
Piccolo: Mmm... se hicieron muy amigos con Kaio Shin - mirando para otro lado.
Izbet: abrazándolo - no te pongas celoso... me puse este vestido sólo para ti, no me interesa nadie más... ahora sí puedo decir que tengo ojos sólo para verte a ti, mírame... - se da la vuelta para que la vea completa - te amo.
Piccolo: Hum... si te ves bien - sonrojado - pero... - la toma del hombro y usa su poder, ahora ella viste una blusa manga larga, pantalón y botas cortas, todo negro, la mira fijamente - te prefiero así, mi demonio, por favor promete que lo que sea que ocurra de ahora en adelante, no volverás a arriesgarte así, deja que yo trate de solucionar las cosas primero antes de tomar medidas extremas, no tienes idea lo que sufrí estos días, llegue a temer que no te vería nunca más - se besan, luego se quita la cadena y se la devuelve con el anillo - lo encontré cuando desapareciste.
Izbet: le toma la mano y le acomoda la argolla en uno de sus dedos - lo tire segundos antes de caer en la purificadora de almas, tenía la esperanza que lo encontrarás... es para ti.
Piccolo: ¿Estás segura?
Izbet: Sí, muy segura - él se le acerca por atrás, le toma las muñecas y se las junta a la espalda - ¿Qué pasa?
Piccolo: Recuerda lo que hiciste en la oficina de Enma Daio - en el oído de ella - debo castigarte por eso - con sonrisa maliciosa.
Izbet: Antes que me des mi merecido, quiero que veas las fotografías que traje de Yun - busca en un bolsillo del bolso.
Piccolo: Verdad que tenías que decirme algo de él - ella le pasa varias - ¿¡Este bebe es hijo de Yun!?
Izbet: Sí.
Piccolo: ¡Somos abuelos! - sonríe orgulloso.
Izbet: Es una criatura adorable... aunque como ves tiene la mirada muy seria para su edad... definitivamente es igual a ti.

FIN
Se fuerte, hazte grande pero no pierdas la inocencia de tu corazón...

Imagen
Avatar de Usuario
Arwen
Supersaiyano dai san dankai
Mensajes: 884
Registrado: Jue Ene 10, 2019 9:53 am

Re: Fanfic Angel Ciego by Izbet46

Mensaje por Arwen »

CAPITULO 8: ¿y si no nos hubiéramos conocido?
Spoiler:
"El hilo rojo invisible conecta a aquellos que están destinados a encontrarse sin importar el tiempo, lugar o circunstancias. El hilo se puede estirar, contraer o enredar pero nunca se rompera"

Ya todo está tranquilo en el infierno, ahora que Izbet puede ver, Kaio Shin va regularmente a llevarle álbumes con fotografías antiguas, y cartas, al principio eran espaciadas las visitas, últimamente es cada semana, pero prácticamente sólo conversa con ella, eso empieza a molestar a Piccolo.

Piccolo: ¿Por qué viene tan seguido a verte Kaio Shin?

Izbet: Corrección, viene a vernos, trae lo que nos manda Yun, no quiero perder el contacto con nuestro hijo.

Piccolo: ¿No puede ser una vez al mes? Las últimas dos veces no trajo nada, sólo se sentó a conversar contigo.

Izbet: Me molesta cuando te pones celoso, o acaso te he dicho alguna vez algo sobre la amazona.

Piccolo: Te dije que no pasó nada con ella.

Izbet: ¿Cómo sabes? No recuerdas nada desde que te capturaron hasta que te rescate del planeta de las guerreras. Si yo tengo confianza en ti, porque tú no la tienes en mí.

Piccolo: Y si yo tratara a una mujer como tú lo tratas a él, como te sentirías.

En eso llega Kaio Shin y el anciano Kaio Shin.

Kaio Shin: Hola amigos.

Izbet va a saludarlos, en cambio Piccolo se sienta en posición de meditación, se nota la tensión en el aire.

Anciano Kaio Shin: Parece que elegimos un mal momento para venir.

Izbet: No es eso – voltea donde está el namekuseijin y grita - sólo que no me gustan los brutos.

Piccolo: Ni a mí las locas - le responde él.

Kaio Shin: No digan eso, ustedes saben que se aman ¿Por qué se molestaron de esa manera?

Izbet: Escuchaste Piccolo, dile porque te molestarte conmigo.

Piccolo: ...

Izbet: Si no lo haces tú, lo hare yo, está celoso porque vienes muy seguido.

Kaio Shin: sonrojado - no era mi intención, lo siento.

Izbet: No tienes que pedir disculpas, es otro el que está equivocado.

Ambos se acercan, quedan frente a frente, se miran con rabia un rato, hasta que dicen al mismo tiempo.

Izbet y Piccolo: Ojalá no nos hubiéramos conocido.

Anciano Kaio Shin: ¿De verdad quieren saber qué hubiera pasado? Entonces...

Saca una bola de cristal, los otros tres se acercan.

Anciano Kaio Shin: Miren - empiezan a formarse imágenes.

Se ve a Izbet antes de viajar a la boda de Videl, sufre un accidente en su auto, y se quiebra la pierna y un brazo.

Izbet: Mi niña, no podré ser tu madrina, tuve un accidente, me quebré la pierna y un brazo.

Videl: Ven igual aunque no seas mi madrina, quiero que estés conmigo ese día.

Izbet: Prefiero no ir en estas condiciones, lo lamento.

Videl: Está bien, no te preocupes.

Anciano Kaio Shin: Ahora veremos qué pasó con sus vidas, primero tú - apunta a Piccolo.

Se ve que sigue entrenando normalmente solo, sigue ayudando a Goku, su familia y a los guerreros Z. Al final termina igual en el infierno por toda la eternidad, pero con menos poder que el que tiene ahora.

Anciano Kaio Shin: a la pregunta de Izbet por qué pasó eso - Es porque no tuvo con quien entrenar regularmente - con sonrisa maliciosa - todos los tipos de ejercicios que han hecho les sirvió.

Piccolo: ¿Qué quiere decir con "todos los tipos de ejercicios que hemos hecho"?

Anciano Kaio Shin: Cuando los Sayayin están con sus mujeres tienen que controlar su fuerza sino pueden lastimarlas, en tu caso no es necesario, Izbet no es humana, su cuerpo es mucho más resistente. Aunque no lo crean es un ejercicio muy completo ese - Piccolo, Izbet y Kaio Shin están completamente sonrojados.

Kaio Shin: ¡¡ANCESTRO!!

Anciano Kaio Shin: Ahora veremos qué pasa contigo - apunta a Izbet.

Se ve que sigue en su empresa, y en su casa, sola, cuando enferma es Jenny quien está con ella en sus últimos momentos.

Jenny: Tranquila, estarás bien.

Izbet: No es necesario que me mientas, escuche al doctor hablar contigo, recuerda que tengo buen oído, no te preocupes, sé que estoy muriendo.

Jenny: Siempre me has tenido a tu lado, incluso te acogimos en nuestra familia, aunque me hubiera gustado verte formar la tuya.

Izbet: No estoy hecha para eso, no hay hombre que me aguante.

Jenny: Descansa.

Izbet: Quiero que sepas que la mitad de mis acciones las deje para Videl, el resto para ti, mi casa y la cabaña son para Bet, cuida a tu hija, será un tesoro para cualquier hombre que la ame y la respete.

Jenny: Gracias, no debiste dejarnos nada.

Izbet: Has sido la única que incondicionalmente ha estado conmigo estos años. Sé que Bet cuidara bien de mis casas, y serán un lindo hogar para ella y su futura familia, por fin esos lugares conocerán la alegría de niños.

Jenny: Hubieras sido una gran madre.

Izbet: Fue mejor así. Quiero descansar.

Jenny: Duerme, vengo más tarde.

En el pasillo, están Marcos y Bet.

Marcos: ¿Ya se murió? ¿Te dijo que pasara con sus acciones y propiedades?

Jenny: Irrespetuoso, como preguntas eso, es la madrina de ustedes dos, los quiere como si fueran sus hijos.

Marcos: Si es así entonces me dejará su empresa.

Jenny: No te dejó nada. La casa y la cabaña para Bet, la mitad de sus acciones para Videl, y el resto para mí, y jura que después de esto no te heredaré nada.

Marcos: YO debí ser su sucesor... me alegro que se muera - su madre le da una cachetada.

Jenny: Vete de acá, me avergüenzo que seas mi hijo.

En ese momento Izbet muere sola en el cuarto, siguiendo sus deseos, su amiga quema sus restos y los esparce en su cabaña. Al llegar al otro mundo, ella es enviada al paraíso donde se queda con sus padres.

Anciano Kaio Shin: Como no encarnaron de nuevo, y no fueron enviados al mismos lugar del más allá, no hubo posibilidades que se encontrarán. Siguieron sus existencias solitarias, sabían que les faltaba algo, pero nunca supieron qué - en la bola de cristal se les ve cada uno en su lugar.

Ambos piensan un rato, se sonríen tímidamente, al final se toman de la mano.

Anciano Kaio Shin: ¿Les muestro lo que hubiera pasado si Kaio Shin no la salva de la purificadora de almas?

Kaio Shin: con una gotita de sudor en la frente - creo que no es necesario...

Piccolo: Tiene razón, disculpa por mis celos, hace poco pensé que te había perdido para siempre, y no quiero pasar por eso de nuevo.

Izbet: También te debo una disculpa, soy así con Kaio Shin porque él me salvó de esa máquina y le debo estar junto a ti de nuevo, nunca tendré como pagarle por eso, pero jamás te sería infiel con él, ni con nadie, mi corazón es sólo tuyo.

Kaio Shin: Ya que todo está arreglado nos vamos. Hasta otro día - se despide con un beso en la mejilla de ella y se van.

Llegando al Planeta Sagrado.

Kaio Shin: ¿Por qué quería mostrarles que hubiera pasado si yo no la hubiera sacado de ese artefacto?

Anciano Kaio Shin: Quería saber qué harían sí lo vieran.

Kaio Shin: Es mejor que no lo sepan nunca, solo haría que terminaran peleados, no soy el final de su hilo rojo, usted lo sabe. Mientras ella sea feliz, yo también lo seré.

En la bola de cristal, se ve a Kaio Shin y la reencarnación que hubiera tenido Izbet si no hubiera sido rescatada, tomados de la mano, conversando animadamente en un atardecer en la Tierra, mientras ella acomoda su cabeza en el hombro de él.

FIN
Se fuerte, hazte grande pero no pierdas la inocencia de tu corazón...

Imagen
Avatar de Usuario
Arwen
Supersaiyano dai san dankai
Mensajes: 884
Registrado: Jue Ene 10, 2019 9:53 am

Re: Fanfic Angel Ciego by Izbet46

Mensaje por Arwen »

CAPITULO 9. 1: El Monasterio
Spoiler:
* Ahora que Izbet puede ver, ella y Piccolo reciben fotografías en el infierno de su pasado, que le manda su hijo Yun. Rememoran algunas de las historias que hay tras ellas*


Izbet: ¿Cuándo tomaron esta foto?

Piccolo: Fue para el primer cumpleaños de Yun.

Izbet: Que grande se ve ¿Y está foto de dónde es?

Piccolo: Es el monasterio donde entrenaste, luego que murió tu padre.

Izbet: Este es...

Piccolo: El maestro Theravada.

Izbet: Y él...

Piccolo: Es Tathagata.



Recuerdo

En el Templo Sagrado

Izbet: No podremos pasar esta noche de navidad en la cabaña.

Yun: Pero mamá, quiero ir ahora.

Izbet: Lo siento, recién la semana que viene sabré cuándo podremos ir.

Piccolo: No te preocupes, nos quedaremos una semana cuando vayamos.

Yun: No quiero - corre a una de las habitaciones enojado.

Izbet: Quisiera llevarlo, pero es peligroso, hay... - le llegan varios mensajes a su Tablet, que tiene un programa que traduce los mensajes en palabras habladas, así no es necesario leerlos, debe bajar urgente a la empresa.

Piccolo: No te preocupes, se tranquilizará, debe aprender a que no todo lo que quiere se le puede dar, así se convertirá en un malcriado.

Izbet: Tienes razón, para mí todavía es mi bebé, no hace ni un año que nació. Vuelvo a la noche.

A Piccolo le cuesta encontrar a Yun, ya que cuando se enoja oculta su ki, está quieto en la cama de una de las habitaciones, decide dejarlo descansar, pero apenas se cierra la puerta, el niño se escabulle y vuela a la cabaña. Cuando llega se da cuenta que no hay nada de comer, como todavía es temprano decide ir al pueblo a pie, en el camino unas sombras lo siguen, sólo se da cuenta cuando un lobo le muerde la pierna, busca un lugar para protegerse la espalda, allí le atacan los demás, al principio logra mantenerlos a raya, cuando cree que se irán, un par de ellos saltan del montículo a su espalda, y le muerden la cabeza y un brazo, por suerte, un hombre aparece gritando y disparando con una escopeta, logra ahuyentarlos, toma al pequeño y se dirige a una cueva en una montaña cercana.

Ya casi al anochecer Izbet vuelve al Templo Sagrado.

Izbet: ¿Cómo está Yun?

Piccolo: No ha salido de la habitación, estaba muy molesto.

Izbet: Ya es tarde, debe comer algo.

Al ir a la pieza se dan cuenta que no está, empiezan a buscarlo por todos lados, Dende y Mr. Popó ayudan, pero no aparece.

Izbet: Se fue a la cabaña... debemos ir a buscarlo rápido, puede encontrarse con los lobos.

Piccolo: ¿Qué lobos?

Izbet: Con todo lo que pasó, no te conté que por eso no podemos ir, apareció una manada, mientras los capturan para trasladarlos es mejor no acercarse. Estoy segura que fue para allá.

Llegan ya de noche, encuentran los rastros de los animales que siguieron al niño, cerca de unos montículos hay signos de pelea y manchas de sangre, ambos lo llaman a viva voz, pero nada, ya cuando Izbet empieza a desesperarse, a los lejos escuchan el silbido de una persona, que para llamar su atención también agita los brazos, vuelan hacía allá, hay una fogata a la entrada, en el fondo está Yun, tapado con una manta, dormido, con la cabeza, una pierna y un brazo vendados.

Izbet: luego de tocarlo y sentir las heridas - mi niño...

Extraño: Tranquilízate, es fuerte, estará bien.

Ella sale volando lo más rápido que puede con su hijo en brazos en dirección al Templo, Piccolo le da las gracias al hombre y la sigue, al llegar Dende cura al pequeño, lo llevan a un dormitorio a descansar, al amanecer recién despierta.

Yun: ¿Mamá?

Izbet: Mi niño ¿Por qué nos diste este susto?

Yun: Lo siento, quería conocer la cabaña de los abuelos, fui al pueblo a comprar comida, y esos animales me atacaron, no recuerdo más.

Piccolo: Un hombre te ayudó.

Izbet: Ni siquiera le di las gracias. Te parece que vamos más tarde a agradecerle.

Piccolo: Luego de eso veremos el castigo que tendrá Yun por desobedecernos.

Un rato después bajan los tres, al llegar a la cueva encuentran al hombre guardando sus pocas cosas para irse.

Izbet: Venimos a darle las gracias por haber salvado a nuestro hijo.

Extraño: De nada, no sabía que era tuyo cuando lo ayude, chata.

Izbet: Sólo una persona me ha dicho así en mi vida - está pálida - el destino no puede jugarme una broma así.

Piccolo: ¿Qué pasa?

Yun: Mamá ¿Te sientes bien?

Izbet: Sí mi niño, puedes ir con tu padre un momento afuera, quisiera conversar algo con el señor. Por favor, Piccolo, llévalo - le dice en voz baja - podrás oírlo todo, pero no quiero que Yun escuche - no muy convencido sale con su hijo - ¿Ahora vives de ermitaño Tathagata? Mejor, así ya no puedes mentir para que las personas sean echadas del monasterio.

Tathagata: se arrodilla y pone su frente en el suelo frente a ella - en ese tiempo era joven, el orgullo me dominaba, cuando te fuiste, el anciano maestro no creyó nada, siguió preguntándome, al final tuve que contar la verdad ante la comunidad. Desde entonces la culpa no me ha dejado, hace unas semanas me llamó, tuvo una visión, si quería que mi alma estuviera en paz, debía venir a este lugar. Anoche cuando oscurecía escuche ruidos de lobos y de un niño, es muy valiente, eran muchos y lo atacaban por todos lados, lamentablemente llegue cuando ya lo habían mordido, lo traje y cure sus heridas, pensé que el salvarlo era la forma de pagar mi deuda con la vida, nunca pensé que eras su madre.

Izbet: ¿El maestro sigue vivo?

Tathagata: Si, cumplió 125 años.

Izbet: Piccolo - lo llama en voz alta, éste entra inmediatamente - quiero ir a visitar a mi maestro.

Piccolo: Iremos todos.

Se dirigen volando al monasterio, Piccolo lleva a Tathagata bajo su brazo, como si fuera un saco, luego de un rato llegan al lugar, al bajar el namekuseijin lo suelta y éste cae pesadamente al suelo. El maestro Theravada los recibe junto con los demás monjes.

El maestro Theravada los recibe junto con los demás monjes


Theravada: Hola Pequeña Guerrera, veo que Tathagata te encontró.

Izbet: Maestro Theravada, permítame presentarle a mi familia - todos se inclinan, como saludo y señal de respeto - no pensaba volver, pero supe que mi maestro está vivo, quisiera se me permita visitarlo, por favor.

Theravada: Ha estado muy enfermo, le alegrará verte. Tendrás que ir a su habitación, ya no puede levantarse. Tathagata, por favor, llévalos.

Izbet: Gracias.

Entran en una pequeña habitación al fondo de un pasillo, en una cama en el piso hay un hombre, se nota que es muy viejo, al sentir que entran abre los ojos.

Anciano Maestro: Pequeña Guerrera, por fin puedo volver a verte.

Izbet: Maestro, quisiera presentarle a mi familia - a Yun - hijo, él fue mi primer maestro.

Yun: se acerca y se inclina - soy Yun Supay, es un honor conocerlo.

Anciano Maestro: Tuve una visión en que estabas corriendo por un bosque.

Yun: Quería pasar navidad en la cabaña, pero como no quisieron llevarme, fui sólo.

Izbet: Eres igual que tu madre ¿Quieres ir a conocer el monasterio? Hay novicios con quienes puedes jugar mientras hablo con tus padres. Tathagata te acompañará.

Yun: ¿Puedo mamá?

Izbet: Si, mi amor - Piccolo mira al hombre como advirtiéndole cuídalo por tu bien.

Izbet: cuando se van - Maestro... - se arrodilla cerca de él - quisiera presentarle a Piccolo, el padre de Yun.

Anciano Maestro: Un gusto.

Piccolo: Igualmente.

Anciano Maestro: ¿Qué pasó contigo, pequeña guerrera? Te busque por semanas.

Izbet: No quería que me mandaran a un orfanato, pensé que eso pasaría, por eso hui y... - cuenta todo lo que vivió - Ahora tengo esta bella familia.

Anciano Maestro: Me alegro por ti. Recuerda mi niña, que las experiencias que vives te definen, lo bueno y lo malo que experimentaste te hizo la persona que eres ahora. Si hubieras seguido con nosotros, tal vez no estarías donde estas ahora. No quiero restarle responsabilidad a Tathagata, pero fuiste tú quien decidió irte. Piénsalo, el perdón no sólo será bueno para él, sino para ti también, no debes cargar con esa rabia, sé que nunca podrás olvidar lo que pasaste, pero al menos quisiera que logres recordar con la cabeza sin que te duela el corazón.

Izbet: Lo pensaré maestro, es hora de retirarnos, no quisiera cansarlo.

Anciano Maestro: No te preocupes, ya estoy por pasar a la otra vida, sólo me inquietaba no saber de ti, fuiste una cálida luz en mi vida, te acuerdas cuando te enseñe a meditar y te hacías la dormida, o intentaba enseñarte matemática o historia.

Izbet: sonriendo - Nunca olvide lo bueno que viví en este lugar con usted.

En camino al Templo.

Piccolo: Que piensas de lo que te dijo tu maestro

Izbet: Meditaré todo, es difícil lo que me pidió.

Piccolo: No es necesario que te recuerde que Goku mató a mi padre, ahora somos amigos.

Izbet: Lo sé, pero no creo que pueda ser amiga de Tathagata.

Piccolo: Pero al menos no lo consideres como un enemigo.

Durante casi un mes pudo ir a visitar a su maestro, hasta que éste muere tranquilamente, Izbet y su familia son invitados a su funeral, queman su cuerpo y dejan que sus cenizas se esparzan por el lugar, aprovecha la oportunidad, y ante la comunidad perdona a Tathagata. Cuando van de vuelva al Templo Sagrado.

Izbet: Piccolo, promete que si muero primero, me quemarán y esparcirán mis cenizas por la Tierra.

Piccolo: No pienses en eso.

Izbet: Los namekuseijin pueden vivir centenares de años, en mi caso sólo sé que los demonios llegada cierta edad envejecen lentamente, eso me pasa a mí, por eso no se nota la diferencia de edad que tenemos... Promételo, por favor, es importante para mí.

Piccolo: Bueno.

Fin del recuerdo

Izbet: Gracias por haber cumplido mi deseo, fue muy lindo mi funeral.

FIN
Se fuerte, hazte grande pero no pierdas la inocencia de tu corazón...

Imagen
Avatar de Usuario
Arwen
Supersaiyano dai san dankai
Mensajes: 884
Registrado: Jue Ene 10, 2019 9:53 am

Re: Fanfic Angel Ciego by Izbet46

Mensaje por Arwen »

CAPITULO 9. 2: Amazonas
Spoiler:
Izbet: Mira las fotos que mandaron.

Piccolo: Este día fue cuando Yun aprendió a nadar.

Izbet: Se ve tan lindo nuestro niño, y en ésta ¿Soy yo?

Piccolo: No, es la diosa de las amazonas.

Recuerdo

Estaban en casa de Bulma, celebrando el cumpleaños de Trunks, cuando en la ciudad llegan mujeres guerreras en una nave espacial, empiezan a destruir todo y atacar a las personas, los hombres van a detenerlas.

Piccolo: ¿A dónde vas?

Izbet: Con ustedes.

Piccolo: No es necesario, con nosotros es suficiente, nos vemos - la besa en la frente y se va.

Bulma: ¿Qué pasó que no fuiste?

Izbet: Piccolo me pidió que me quedará... a veces me trata como si fuera su hija, cuando debería ser al revés.

Bulma: con mirada pensativa - ¿Y si me llevas a ver?

Izbet: ¿Por qué no? Total, sólo te acompañaré.

Llegan cuando ya están por vencerlas, en ese momento se escucha un sonido extraño salir de la nave y los hombres caen desmayados, ambas se acuerdan de lo que pasó con la Perla de la Sirena.

Bulma: le va diciendo lo que pasa a Izbet - ahora está bajando de la nave una mujer, le dicen Comandante, debe ser la líder, trae una máquina en su mano, se acerca a todos, los están analizando, SE LLEVAN A YAMCHA Y PICCOLO.

Al escucha eso Izbet va a tratar de rescatarlos, pero las mujeres de la escolta se interponen, logra dejar a una de ellas semiinconsciente, todas las demás, mientras se defienden en bloque, retroceden hacia la nave.

Comandante: Si no puedes contra una sola mujer, no mereces estar con nosotras.

Guerrera: No me deje... - la nave se va.

Izbet la deja inconsciente, y con ayuda de Bulma le ata las manos y las piernas, los que quedaron en la fiesta llegan, al rato los hombres despiertan.

Goku: ¿Qué pasó?

Bulma: Un sonido los hizo desmayarse, se llevaron a Yamcha y Piccolo.

Gohan: ¿Quiénes eran?

Bulma: No lo sabemos, pero tenemos quien puede darnos las respuestas que necesitamos - despiertan a la mujer.

Guerrera: ... - sólo los mira en silencio.

Goku: ¿Por qué se llevaron a nuestros amigos?

Guerrera: ...

Vegeta: Sino hablas...

Guerrera: ¿Qué? ¿Me matarán? Se los agradecería, sería una muerte honorable.

Bulma: ¿Y qué honor tienen quienes te dejaron abandonada?

Guerrera: Soy débil para estar con ellas.

Izbet: Por favor, necesito saber qué pasará con quienes se llevaron, uno de ellos es mi pareja.

Guerrera: Los hombres son necesarios sólo para reproducirse, luego hay que desecharlos, no hay que mezclar sentimientos con ellos.

Izbet: Que equivocada estas, el amor que le tengo, y mis ganas de ayudarlo me dio las fuerzas para poder luchar con tus compañeras y contigo.

Se nota que en la mujer hay una lucha interna.

Izbet: se arrodilla a su lado, le toma las manos con las suyas - ¿Para que los quieren en tu planeta? ¿Estarán bien?

Guerrera: luego de un momento de ver la preocupación en el rostro de la mujer y los demás - somos amazonas, estamos en busca de hombres fuertes que no tengan descendencia, la Reina China quiere tener una hija, según nuestra ley debe haber un torneo, quien gané será el consorte real... cuando se da a luz en nuestro planeta, la madre... debe matar al padre, es la ley.

Izbet: Diablos, debo ir a ese lugar ahora.

Guerrera: ¿Arriesgarás tu vida por un simple hombre?

Izbet: Es a quien amo... creo que a pesar de lo que dijiste entiendes como me siento ¿O no?

Guerrera: ... hay muchas en mi planeta que piensan como tú... pero las leyes son así, sólo la Reina puede cambiarlas, pero ninguna lo ha hecho... hay una solución para ti, como su mujer tienes el derecho de reclamarlo antes que inicie el torneo, deberás combatir con quien indique su Majestad, si ganas debe entregártelo. Lo que no sé es cómo llegarás al anfiteatro sin que te descubran, no me había dado cuenta que eres ciega, en nuestro pueblo no hay, quien no es perfecta para la lucha, debe morir al nacer.

Izbet: ... Bulma ¿Puedes conseguirme lentes de contacto de color?

Bulma: Claro.

Izbet: ¿Sabes cómo llegar a tu planeta?

Guerrera: Si tienes una nave, puedo llevarte.

Toma su bastón y llama a su nave, mientras sueltan a la guerrera de nombre Myrina.

Gohan: ¿Irás con ella? Te arriesgas mucho, puede traicionarte al llegar a su planeta, te acompañaremos con Videl, si te dejo ir y te pasa algo, cuando vuelva el Sr. Piccolo...

Izbet: Si no voy él nunca volverá.A veces siento cuando alguien miente, es difícil pero si me concentro bien lo logró, tiene que ver con la respiración, y otras cosas así. Sé que ella es sincera, quiere ayudarnos. Además me contó que pueden leer la mente de las mujeres con una máquina, así verifican si es la pareja de quien reclama. En el planeta el sonido es trasmitido ininterrumpidamente, si me acompañas caerás dormido... ahora que lo pienso exigiré a Piccolo, pero como haré para salvar a Yamcha.

Myrina: Sólo puede reclamarlo su mujer, así al escanear su mente, se verán sus recuerdos.

Gohan: Es que él no tiene, bueno tiene varias, pero ninguna para algo así.

Bulma: Yo iré.

Vegeta: ¡¡¡QUÉ DICES!!!

Bulma: Él fue mi novio por muchos años, puedo pasar la prueba.

Vegeta: NO IRAS.

Bulma: Que sí.

Vegeta: No eres luchadora.

Izbet: Cuando ya tenga a Piccolo a salvo, hare algo para distraerlas y rescataré a Yamcha.

Vegeta: Entonces no necesitan que vayas.

Bulma: No la dejare ir sola.

Krillin: 18 ¿Puedes acompañarla?

N°18: Que fastidio.

Krillin: Por favor.

N°18: Está bien.

Vegeta: Entonces te quedas.

Bulma: YA DIJE QUE IRÉ.

Al final gana la científica ya que si algo falla en la nave, o en los implementos de Izbet ella puede arreglarlos, parten, en siete días llegarán al Planeta de las Amazonas, medio día después que la Comitiva de la Tierra, durante el viaje la guerrera les cuenta cosas de su pueblo; sólo son niñas las que nacen entre ellas; su diosa principal las dejó para explorar el espacio hace mil años atrás; sólo se permiten hombres para la reproducción, para los trabajos de fuerza y peligrosos tienen robot, incluso hay otros especializados para el esparcimiento de las mujeres que lo requieren.

Izbet: cuando está sola con la científica - Bulma, si la Perla de la Sirena afectaba sólo a los hombres al igual que ahora este sonido, y esa vez Piccolo no fue afectado ¿Por qué ahora sí?

Bulma: ... creo que luego de haber sido humano, es más hombre que namekuseijin... al menos en su mente...

Izbet: Debe ser eso.

Aprovechando el tiempo, Izbet entrena a la amazona.

N°18: ¿Para qué lo haces? Llegando puede volverse contra nosotras.

Izbet: No lo creo, siento que es una buena persona, y podrá ayudarnos de mejor forma ahora, somos 3 contra un planeta, su apoyo nos vendrá bien.

Al llegar bajan donde no puedan verlas para esconder la nave, la guerrera las deja en su casa, y va a investigar qué ha pasado desde que volvió la Comandante.

Myrina: Su Majestad no hará el torneo, ya eligió a alguien.

Bulma: ¿Es de la Tierra?

Myrina: Es el hombre verde.

Izbet: ¿Todavía puedo retarla a duelo por él?

Myrina: Sí, debemos ir al anfiteatro, allá lo proclamará como su consorte oficialmente, entonces será el momento.

Van al lugar, con sus mecanismos, los lentes de contacto y la ayuda de sus compañeras nadie se da cuenta que es ciega, logran acomodarse en las primeras filas. La Monarca aparece en el palco, informa que ha decidido omitir el torneo, hace entrar a Piccolo, está con los ojos apagados, sólo viste un pantalón tipo deportivo corto negro, ajustado, y un grueso collar del mismo material en su cuello que tiene dispositivos que anulan la voluntad de quien lo usa, cuando se quita la persona no recuerda nada de lo que hizo mientras lo llevaba puesto.

Reina: Reclamo a este hombre como mi consorte ¿Alguien quiere rebatirme la posesión de él?

Izbet: YO - vuela al palco.

Reina: Vaya ¿Quién eres?

Comandante: Majestad, es la mujer de la Tierra que le comente.

Reina: ¿Cómo llegaste?

Izbet: Que importa eso... soy la pareja de este hombre, y te reto por su posesión... soy Izbet Supay.

Reina: Supay... - intercambian miradas con su comandante - Que interesante, veo que papá pasó por la Tierra luego que se fue de acá... mi nombre completo es China Supay... somos hermanas.

Izbet: Mientes... papá no tuvo más hijos, me hubiera dicho...

Reina: Hermanita, los hombres sólo sirven para tener hijos, luego hay que desecharlos, son todos iguales, mentirosos, cobardes, y débiles, nuestro padre no es distinto de cualquier otro. Y sobre él, no te preocupes, ahora que será mío todo quedará en familia...jajajajaja.

Izbet: Quien te has creído para decir esas cosas, papá y Piccolo no son así... y no me digas hermanita.

Reina: Eso crees - forma una esfera de energía - mira la energía.

Izbet: se saca los lentes de contacto - no puedo, soy ciega.

Reina: Que inútil, entonces sientes la fuerza oscura, es como la tuya o no.

Izbet: Lo más seguro es que tu padre fuera de la misma raza que el mío.

Reina: Convéncete, es el padre de las dos, fue capturado y ganó el torneo, no quedó totalmente controlado, mamá no se dio cuenta hasta que escapó, pero antes la embarazó de mí. Si quieres llevártelo - apunta a Piccolo - deberás derrotar a una de las más fuertes de mi pueblo, luego a mi Comandante, y si todavía estás en pie, recién lucharás conmigo.

Myrina: se levanta y grita desde la galería - Eso no es justo, la ley dice...

Comandante: LA REINA ES LA LEY... ahora entiendo cómo llegó ésta, cuando terminen con ella arreglaremos cuenta, traidora. Obviaremos el examen, en la Tierra ya trataste de salvarlo, debes ser su pareja como afirmas.

Muy confundida baja a la arena preguntándose si de verdad son hermanas, su energía es igual a la suya ¿Por qué su padre no le dijo? Tiene que dejar eso para después, ahora tiene que concentrarse, primero lucha con una amazona de 2 metros, a pesar de su tamaño es muy ágil, la derrota, apenas retiraron a la contrincante inconsciente, entra la Comandante, le costó más ganarle, pero lo logra, también la deja con vida, pero la Monarca toma una lanza y atraviesa a la mujer, matándola en el acto.

Reina: No debió perder, elegiré una más fuerte la próxima vez... bien hermanita, ahora es mi turno.

Mientras espera que llegue su nueva contrincante, piensa como tener un respiro, sabe que no le dará esa posibilidad, así que decide hacerla hablar.

Izbet: No mereces gobernar al poderoso Pueblo de las Amazonas - grita para que todas la escuchen - eres una cobarde, mandaste dos antes de ti, si yo no mate a ninguna porque tú sí a la Comandante, se supone que era tu persona de confianza.

Reina: Los débiles no deben vivir... ¿Cuántos años tienes junto a tu hombre? ¿Y todavía no le das un hijo? No sirves como mujer, yo le daré una hija fuerte que perpetuará su estirpe.

Izbet: Y luego lo matarás.

Reina: Debemos ser únicas.

Izbet: No importa si tenemos hijos o no, sé que él me ama así como soy... no dejaré que lo utilices como una cosa y luego te deshagas de él... es una bella persona, con muy lindos sentimientos... debo salvarlo de tus garras.

Combaten, pero la otra está descansada, y tiene una espada, Izbet está agotada, cuando cae al piso la gobernante se le acerca.

Reina: le dice despacio - luego que mueras tu hombre será mío... al menos hasta que nazca nuestra hija - se aleja para enterrarle la espada.

N°18: Quédate donde estas.

Myrina: Debo ayudarla

N°18: Todavía no está derrotada.

Por primera vez en su vida Izbet deja que su parte de demonio tome total control de su conciencia, y ocupe su poder de ángel, nunca lo había hecho porque no está segura que luego pueda volver a tomar el control de su parte diabólica, pero en vista de las circunstancias decide arriesgarse. Una ráfaga de ki bota a la Gobernante.

Izbet: Ven - mientras sube en el aire se saca los mecanismos para moverse - veremos quién de las dos es la más fuerte, sin equipos ni armas.

La pelea es increíble, técnica contra técnica, poco a poco la mujer ciega logra derrotar a su contrincante, que al final cae al piso, al bajar Izbet siente algo con su pie, toma la lanza que mató a la Comandante.

Reina: Vamos, mátame.

Izbet: toma la lanza con las dos manos, y la eleva - DEBES VIVIR PARA SENTIR LA HUMILLACIÓN DE MI VICTORIA... RECLAMARE TU TRONO Y TENDRAS QUE SER MI ESCLAVA PARA SIEMPRE - le dice con una sonrisa demoniaca, en ese momento olvido a Piccolo, a sus amigos, y su vida en la Tierra.

Bulma: ¿Qué le pasa? No parece la misma.

Myrina: Su energía es totalmente maligna, la parte de luz que había en ella ya no está. Si algo no la hace reaccionar, no volverá a ser la de antes.

Reina: Prefiero morir mientras todavía tengo el sabor de tu hombre en mi boca, y su esencia en mi cuerpo.

Izbet: ¡¡¡¿¿¿QUÉ???!!!

Reina: Crees que lo elegí por su gran... personalidad... "probé" los que me interesaban, y el tuyo fue el mejor en la cama... en la cama, contra la pared, en el piso... donde yo se lo ordené - el ki de Izbet se descontrola, aparece un halo plomo alrededor de su cuerpo - mátame, no eres mejor que yo.

Recuerda porque está allí. Siente que sus ojos se llenan de lágrimas de ira ¿Será verdad que esa maldita ya se acostó con Piccolo? De sólo imaginárselo sus emociones se desbordan, lanza un grito y todo el lugar tiembla, aparecen sus alas oscuras y sus ojos parecen despedir fuego negro, tira la lanza pero no contra la mujer caída, sino hacia el trono que está en el palco.

Izbet: ESTAS MINTIENDO... - toma aire para tranquilizarse, por fin la luz vuelve a ella, aunque todavía siente que su sangre hierve - Ahora me llevaré a la persona que amo y que me ama, nunca sabrás lo que es sentir el amor libre de un hombre, sólo puedes conseguirlo obligándolos... tal vez tengamos el mismo padre, pero nunca te consideraré mi hermana, eres mentirosa, cobarde, y una asesina... te dejare viva, eso te dolerá más que la muerte...

En el momento que hizo aparecer sus alas, las guerreras que había en el anfiteatro se arrodillaron, ahora empiezan a gritar DIOSA, DIOSA, ella se distrae con eso, la Reina China aprovecha de tomar la espada que está cerca, cuando va a descargar el golpe grita MUERE MALDITA, pero la lanza que estaba en el trono la atraviesa, la arrojó una de las mujeres de su guardia.

Guardia: Quien trate de dañar a la diosa debe ser ejecutada inmediatamente, eso dice la ley, no importa que sea la Reina. Además según tus propias palabras no debes seguir viviendo por ser débil.

Reina: en el suelo, desangrándose - ... hermanita... - y muere.

La escolta de la Monarca se acerca a Izbet, y arrodillándose le ofrecen su protección, Myrina llega volando, N°18 trae de la misma forma a Bulma.

Izbet: en un susurro - ¿Qué pasa?

Myrina: en voz baja - eres la viva imagen de nuestra diosa viajera, la leyenda dice que cuando más la necesitemos volverá, no sabía que podías hacer aparecer alas, sino no hubiera habido necesidad de luchar - a viva voz para que todas la escuchen - La diosa ha vuelto luego de mil años, se disfrazó para ver si la Reina China merecía seguir siendo nuestra gobernante, le dio la oportunidad de seguir con vida, pero quiso traicionarla. Le daremos la posesión del hombre por el que combatió, es suyo.

Guardia: Diosa ¿De verdad nos dará el honor de quedarse a dirigirnos?

Izbet: Lo he pensado mucho, pero debo volver a... mi viaje... por su fuerza interior, valentía, e inteligencia, Myrina será la nueva soberana de nuestro pueblo, lo que ella diga y ordene, es como que lo haga yo, hará los cambios que sean necesarios.

Myrina: Gracias, ahora le daremos un regalo a las acompañantes de la diosa, para demostrarles nuestra buena voluntad - hace traer a Yamcha y se los da.

Izbet: Te pido por favor, Reina Myrina, que la Tierra y el planeta Namek queden fuera de sus territorios de caza de hombres.

Myrina: Concedido diosa, dame las coordenadas y ninguna de nuestras naves se acercará a esos sectores - le susurra - no hagas desaparecer tus alas hasta que te vayas.

Izbet: Entiendo ¿Podemos quitarle los collares a Piccolo y Yamcha?

Myrina: Lo siento, está prohibido, pero cuando se vayan del planeta pueden sacárselos, les daré la llave electrónica para que puedan desactivarlos.

Mientras esperan que les carguen los víveres para el viaje, las dos terrícolas conversan en una parte del palacio, junto con ellas están los hombres, N°18 ya se fue a la nave a esperar la vuelta a la Tierra.

Bulma: ¿Y qué piensas de lo que dijo tu herm... - al ver como frunce el ceño Izbet, rectifica - la Reina China, sobre haber estado con Piccolo?

Izbet: Mintió para que la matara, o distraerme.

Bulma: Estas segura.

Izbet: Sí, segura.

Bulma: mmm... que lastima que no puedes ver, te pierdes un espectáculo increíble.

Izbet: BULMA.

Bulma: No estoy haciendo nada malo, sólo mirando.

Izbet: Que bueno que les trajimos ropa, hagamos que se cambien antes de quitarles el collar, ya converse con 18 y no dirá nada, Piccolo se enojara si sabe cómo estaba vestido.

Bulma: Mejor dicho desvestido... - pensativa - Las fotografías puedes pasarlas a relieve para sentirás, verdad...

Izbet: Sí... - entendiendo la indirecta - me prometes que será sólo para mí.

Bulma: Por supuesto.

Ya tomada la fotografía, los mandan a cambiarse ropa.

Bulma: Llegando a la Tierra te pasare la imagen.

Izbet: Gracias, la guardaré donde nunca pueda encontrarla.

Bulma: Tengo una de la representación de la diosa, es igual a ti, ojos negros, alas oscuras, incluso sus facciones son como las tuyas, sólo se diferencian en el largo del cabello y en el mechón blanco... ¿No eres ella, verdad?

Izbet: No tengo mil años, nací el 738

Bulma: Espera... si el Rey Piccolo murió el 9 de mayo del...753...

Izbet: No... Bulma... no lo digas...

Bulma: ¡¡¡ERES 15 AÑOS MAYOR QUE PICCOLO!!!

Izbet: Si lo repites yo...

Bulma: Tranquila... no lo diré, promesa, pero debes decirme la marca de tu crema para la cara y cuerpo, es milagrosa...

Fin del Recuerdo

Piccolo: Fue difícil para ti aceptar que tu padre tenía otra hija.

Izbet: Si... cuando estaba en el paraíso converse con él sin que mamá estuviera, me reconoció que había estado en ese planeta, pero no supo que la Reina había quedado embarazada cuando escapó, por eso no me contó nada.

Piccolo: Y sobre lo que dijo de mí...

Izbet: Mintió, estoy segura.

Piccolo: ¿Y esto?

Izbet: No es nada importante, un sobre que le pedí a Yun.

Piccolo: lee una pequeña nota - mamá, acá está lo que me pediste, disculpa la demora, pero más que guardado, estaba oculto.

Izbet: Pásamelo - él lo abre.

Piccolo: ¿Pero qué... cuando me vestí así? - ella se la quita y sale volando.

Izbet: Si me atrapas te la doy - al mirar atrás ve que está quieto con los brazos cruzados - ¿Por qué no me sigues?

Piccolo: Tarde o temprano vas a volver, y aquí estaré esperándote - se sonríe de lado.

Izbet: La esconderé antes... no me culpes si alguien más la encuentra...

Piccolo: DAMELA.

Izbet: Sólo si me alcanzas...

FIN
Se fuerte, hazte grande pero no pierdas la inocencia de tu corazón...

Imagen
Avatar de Usuario
Arwen
Supersaiyano dai san dankai
Mensajes: 884
Registrado: Jue Ene 10, 2019 9:53 am

Re: Fanfic Angel Ciego by Izbet46

Mensaje por Arwen »

CAPITULO 9. 3: En Familia a Namek

Spoiler:
Piccolo: Acá está Yun luego de volver por primera vez de Namek.

Izbet: Ese viaje fue muy bueno para todos.

Recuerdo

El pequeño escucha que hay un planeta llamado Namek donde vive gente de la raza de su padre y Dende.

Yun: Quiero ir, papá.

Piccolo: Déjame hablarlo primero con mamá.

Esa noche cuando Izbet llega al Templo Sagrado.

Yun: Mamá, papá va hablar contigo, dile que sí, por favor.

Izbet: ¿Qué quieres ahora?

Yun: Ir al Planeta Namek.

Izbet: mmm... voy a hablarlo con papá primero.

Yun: Eso mismo dijo papá, que conversaría contigo, por fiiiii, por favoooorrrrrr.

Izbet: Anda a jugar mientras lo vemos - el niño se va contento - ¿Por qué me tiraste la pelota, quieres ir o no?

Piccolo: Sí, pero...

Izbet: ¿Qué te complica?

Piccolo: Soy el único de mi raza que ha... tenido... un hijo con una mujer.

Izbet: ¿Cuál es el problema?

Piccolo: sonrojado al máximo - tendré que explicarle al Gran Patriarca como fue que pasó...

Izbet: Jajaja, que exagerado, no creo que tengas que explicarle "como fue que pasó" exactamente... además que puede hacerte... si quieres le digo que tengo algo importante en la oficina, y lo dejamos para más adelante.

Piccolo: No. Tienes razón, no tiene nada de malo lo nuestro, aunque sea extraño para él, será bueno para Yun, desde que supo que hay todo un planeta con namekuseijin, está muy entusiasmado, tal vez así empiece a entrenar en serio, desde que aprendió a volar, no ha puesto el mismo empeño.

Izbet: Yo también quisiera eso, ya no se esfuerza. Veamos la fecha, debo dejar todo listo en la empresa.

Le confirman al niño que irán a Namek por 10 días, invitado Dende, acepta ir también.

Yun: ¿Por qué estás tan emocionada mamá? Ya conoces el planeta.

Izbet: Por eso mismo estoy así, quiero ver a los amigos, sobre todo a Jattyta, un niño muy alegre de quien me hice amiga cuando fui, es del Clan Dragón, tiene grandes poderes. Quiero llevarle algunas cosas - Yun mira molesto, pero no dice nada.

Cuando llegan con Goku a Namek, los reciben felices.

Gran Patriarca: Que bueno tenerlos de nuevo con nosotros.

Izbet: Gracias Gran Patriarca ¿Podemos quedarnos como la otra vez?

Gran Patriarca. Por supuesto.

Goku: Entonces me voy, nos vemos en 10 días. Adiós - se teletransporta a la Tierra.

Gran Patriarca: ¿Y quién es este jovencito?

Yun: Mucho gusto, soy Yun Supay.

Gran Patriarca: El gusto es mío.

Piccolo: Gran Patriarca él es...

Izbet: Mi hijo... desde que supo de ustedes, quería venir a conocerlos.

Entonces llega Jattyta, abraza muy fuerte a Izbet.

Jattyta: ¿Cómo estás?

Izbet: Bien. Quiero presentarte a mi hijo. Yun, él es Jattyta, de quien te hable.

Yun: no de muy buen gusto - Hola - Jattyta es al menos una cabeza más alto que el otro niño.

Jattyta: Hola - lo saluda, pero sigue hablando con Izbet - quiero mostrarte todo lo que puedo hacer ahora.

Tochat: llegando - yo también quiero poder entrenar contigo, Piccolo, he aumentado mucho mi nivel.

Gran Patriarca: Primero que todo, lleven a Izbet y su hijo a instalarse ¿Trajo una casa?

Izbet: Sí ¿Puede ser en el mismo lugar que antes?

Gran Patriarca: Claro. Nos vemos más tarde.

Se van los cuatro, quedan el Gran Patriarca, Piccolo y Dende.

Piccolo: Gran Patriarca, quisiera hablar algo con usted.

Gran Patriarca: Le escucho.

Piccolo: Es sobre el padre de Yun.

Gran Patriarca: Debe ser una buena persona, qué pena que no vino, me imagino que es un guerrero humano.

Dende: Bueno, es guerrero, pero no humano.

Gran Patriarca: ¿Es de la raza de Goku?

Dende: No.

Piccolo: Yo soy su padre.

Gran Patriarca: ... entonces... ustedes... eeeehhhh...

Piccolo: Le contaré... - le explica resumidamente la historia de su relación con Izbet.

Gran Patriarca: Ya veo. Cuando vinieron note que se llevaban muy bien, como compañeros de casa.

Piccolo: ¿Compañeros de casa?

Gran Patriarca: A veces olvido que no conoce todas nuestras costumbres, como ve vivimos dos adultos y dos niños por casa, los adultos van a vivir con el que tengan más afinidad, con quien se sienten totalmente cómodos, eso mismo vi en ustedes esa vez.

Piccolo: Gran Patriarca, Yun crece como los del Clan Guerrero, hace dos semanas aprendió a volar, pero desde ese momento ya no muestra el mismo interés en entrenar, por eso también lo trajimos, para ver si al conocerlos puede motivarse.

Gran Patriarca: Es un niño muy simpático y fuerte, estoy seguro que tendrá grandes habilidades como ustedes. Mis felicitaciones a ambos.

Piccolo y Dende se reúnen con los demás.

Izbet: ¿Cómo te fue con el Gran Patriarca?

Piccolo: Mejor de lo que pensaba.

Izbet: Si él lo tomó así, no tienes por qué preocuparte por los demás

Jattyta: ¿Iz?

Izbet: ¿Dime?

Jattyta: ¿Podría quedarme contigo como la otra vez?

Izbet: Te acuerdas cuando conversamos sobre cómo se relacionan las personas adultas en la Tierra, cuando están enamoradas.

Jattyta: Sí, al principio no entendí bien.

Izbet: Es que ahora duermo en las noches con el padre de mi hijo.

Jattyta: Pero no vino, no vi ningún humano con ustedes.

Izbet: El papá de Yun es Piccolo.

Jattyta: Eeehhh... su papá...

Izbet: ¿Es raro?

Jattyta: No... sí... no sé... ahora entiendo porque el color de su piel es parecido al de nosotros.

Pasan algunos días, Yun cada día está más molesto, sobre todo cuando ve a su madre con Jattyta, o a Piccolo con Tochat.

Tochat: ¿Qué tal si practicamos?

Izbet: Jattyta ¿Puedes llevar a Yun a conocer el planeta?

Jattyta: Por supuesto.

Izbet: Yun, papá y yo entrenaremos un poco con Tochat, anda a pasear con Jattyta.

Yun: Prefiero quedarme cerca de ustedes.

Izbet: Anda, siempre dices que te aburres mientras nos esperas, así podrás distraerte.

Yun: Bueno.

Van volando, Jattyta trata de hacer conversación pero el otro niño va callado.

Jattyta: ¿Qué te pasa? De que llegaste notó que te enojas cuando estoy presente.

Yun: ...

Jattyta: Te estoy hablando.

Yun: No me gusta que estés cerca de mamá.

Jattyta: ¿Por qué?

Yun: Es MI mama, no la tuya.

Sin darse cuenta llegan a un lugar con flores rojo fuerte, cuando Jattyta se da cuenta, toma al otro niño de la mano y trata de alejarlo.

Jattyta: Vámonos.

Yun: Son sólo flores.

Jattyta: Peligrosas, puedes morir si te toca su polen, la única cura es hacer un antídoto con los pétalos, pensábamos que no quedaba ninguna.

El terrestre se acerca rápidamente, hace como que tocará las flores y luego se aleja, Jattyta trata de detenerlo, lamentablemente Yun pierde el control y va derecho al campo florido, el pequeño namekuseijin se pone en el camino, pero no logra evitar que ambos caigan en medio, quedan llenos de polen, antes de escapar a terreno abierto, el mayor empieza a perder las fuerzas, cae al suelo, Yun sólo está mareado, por el momento.

Yun: ¿Por qué hiciste eso?

Jattyta: No podía dejar que te pasara algo malo, Iz confió en mí para cuidarte.

Yun: Tengo que llevarte con los demás.

Acomoda al namekuseijin en su espalda, no tiene fuerzas para volar, así que opta por caminar, antes de irse, guarda varios pétalos en su chaqueta.

Jattyta: Déjame... solo puedes llegar más rápido.

Yun: No, llegaremos juntos, si hubiera entrenado como debía...

Jattyta: Porque no quieres hacerles caso a tus padres, te he visto y no te esfuerzas.

Yun: No tienes idea la presión que siento por ser el hijo de dos grandes guerreros, Goten y Trunks sólo quieren ver que tanto he aprendido, Gohan siempre me compara con él cuando tenía mi porte; la noche que pude volar escuche a mis padres hablar, mamá espera que genere alas como ella, papá en cambio quiere que aprenda alguna de sus técnicas; por eso no quiero seguir, tengo miedo de fracasar, y que alguno de ellos se ponga triste.

Jattyta: Ellos nunca se desilusionarían de ti, incluso si sólo pudieras volar, te amarían igual... son estrictos y se molestan contigo, porque ven que no pones de tu parte cuando quieren...

El pequeño namekuseijin cae inconsciente, Yun se desespera, concentra su ki, alrededor de su cuerpo aparece un halo plomo, vuela a donde está la energía de sus padres, estos al sentir el incremento van a su encuentro, Tochat los sigue. Cuando se encuentran Yun deja en el suelo a Jattyta, y antes que caiga su padre lo toma en sus brazos.

Piccolo: ¿Qué pasó?

Yun: - no tiene fuerzas para hablar, saca de su chaqueta los pétalos de la flor, se las pasa y cae desmayado.

Tochat: Hay que llevarlos a la aldea, el polen de esta flor es mortal si no se aplica el antídoto a tiempo, menos mal que trajo los pétalos. Apurémonos.

Algunas horas después despierta Yun.

Izbet: Que bueno que ya estas consciente.

Yun: Lo siento, todo fue culpa mía.

Piccolo: ¿Qué pasó?

Yun: Es que yo... - cuenta lo que ocurrió.

Piccolo: ¿Por qué hiciste eso?

Yun: Estaba celoso de Jattyta, pensé que mamá lo quería más que a mí, porque tiene poderes; al igual que tu papá, tal vez quieres que Tochat sea tu hijo y no yo.

Piccolo: ¿Qué te hace pensar eso?

Yun: Los escuche la noche que aprendí a volar, los dos querían que pronto desarrollará alguno de sus poderes, no quiero desilusionarlos.

Izbet: Sólo nos decepciona que no te esfuerces en los entrenamientos... lamentamos que nuestra ansiedad te haya hecho sentir de esa manera ¿Verdad, Piccolo?

Piccolo: Así es.

Yun: Lo siento papá, pero como tú y mamá son guerreros, y yo no tengo casi poderes...

Piccolo: Eso no es verdad, cuando volaste con Jattyta en tu espalda, tu ki estaba muy alto.

Yun: Quería ayudarlo, nada más... ahora ustedes me harán entrenar más... - se muestra angustiado.

Piccolo: No te obligaremos si no quieres. Te amamos incondicionalmente hijo.

Yun: Gracias por entenderme, tenía miedo que se enojarán si les decía esto... ¿Cómo está Jattyta?

Piccolo: Bien, él necesita descansar más, tú eres medio namekuseijin, por eso no te afectó tanto el polen.

Yun: ¿Puedo quedarme con él? Quiero cuidarlo hasta que esté mejor.

Piccolo: Bueno.

Al anochecer del otro día, despierta el pequeño namekuseijin.

Jattyta: ¿Está bien Yun?

Izbet: Sí.

Jattyta: Esto fue mi culpa...

Izbet: No es necesario que mientas para protegerlo, nos contó todo.

Jattyta: No quería que te molestaras con él.

Yun: Tranquilo, todo está bien... amigo - le sonríe - desde mañana entrenare con papá y mamá, cuando puedas levantarte ¿Quieres venir a verme?

Jattyta: Claro... amigo.

A partir de ese momento se vuelven inseparables, incluso se queda en la habitación de Yun los días que faltan para volver a la tierra.

Fin del Recuerdo

Izbet: Desde ese momento siempre dijo que Jattyta era su hermano mayor.

Piccolo: Me alegro que se lleven tan bien.

Izbet: Era sólo la inseguridad de Yun la que lo hacía comportarse así.

Piccolo: Nunca pensé que se sintiera de esa manera.

Izbet: Igual yo, inconscientemente lo presionamos demasiado.

Piccolo: Cuando se relajó, sus poderes se incrementaron rápidamente.

Izbet: Me sorprendió el gran ki que desarrolló.

Piccolo: ¿Y por qué? Es mi hijo, y como yo, es un gran guerrero.

FIN
Se fuerte, hazte grande pero no pierdas la inocencia de tu corazón...

Imagen
Avatar de Usuario
Arwen
Supersaiyano dai san dankai
Mensajes: 884
Registrado: Jue Ene 10, 2019 9:53 am

Re: Fanfic Angel Ciego by Izbet46

Mensaje por Arwen »

CAPITULO 9. 4: La Periodista
Spoiler:
Izbet: Mira que lindas imágenes, definitivamente Ann es una excelente fotógrafa, además de periodista.

Piccolo: Al principio no la soportabas.

Izbet: Es que no me gusta que se metan en mi vida privada.



Recuerdo

Una mañana en la oficina.

Jenny: Volvió a llamar la Srta. Melampau, insiste que quiere conversar contigo.

Izbet: Como no entiende que no me interesa que se sepa nada de mí.

Jenny: Le he dicho de todas las formas posibles que desista, pero como nunca has hablado en público de tu vida, quiere la primicia.

Izbet: Sigue como hasta ahora, por favor. Disculpa... ¿Podrías preguntarle a Bet si puede cuidar a Yun el domingo después de almuerzo?

Jenny: Sabes que dirá que sí.

Izbet: Lo sé, sólo en ustedes confió para que lo cuiden, pero por favor dile que me cobre, no quiero que haga de niñera gratis. Es que quiero estar... en privado con Piccolo, últimamente la empresa me ha absorbido demasiado, y me duermo incluso antes de poner la cabeza en la almohada.

Jenny: Entiendo - sonrisa cómplice - le preguntaré y te aviso.

Al salir hacía su casa se acerca una persona a su auto.

Ann: Srta. Supay ¿Podría conversar con usted? - se pone delante del automóvil, automáticamente éste se detiene.

Izbet: baja un poco el vidrio - ¿Quién es y qué quiere?

Ann: Soy Ann Melampau, deseo tener una entrevista con usted para que pueda aparecer en mi programa, su secretaria supongo que no le ha pasado mis recados.

Izbet: La Srta. Jenny, mi asistente, no mi secretaria, me ha pasado todos sus mensajes, pero no me interesa.

Ann: La gente necesita saber...

Izbet: Sobre la vida de una ciega, no creo. Por favor quítese, debo llegar a una reunión y estoy atrasada.

Ann: Pero...

El automóvil, a un comando especial de voz, empieza a moverse muy lentamente, la periodista debe apartarse para dejar que se vaya.

Ann: No pensé que fuera tan directa, no me quedaré sin conseguir mi especial sobre ti...

Ha pasado la semana, ya están a viernes.

Jenny: Me avisaron que la Srta. Melampau estuvo en la prisión hablando con los ladrones de banco, y en la oficina de registros, buscando tu acta de nacimiento.

Izbet: Que persistente.

Jenny: No debes preocuparte, tu certificado es legítimo.

Izbet: Pero los de mis padres no, espero que no siga indagando más.

Esa tarde todavía molesta recibe a Piccolo y Yun en la casa.

Izbet: Como estas mi amor - un abrazo - anda a dejar tus cosas a la pieza - él se va.

Piccolo: al notarle los ojos algo plomos - ¿Qué pasa?

Izbet: Una tipa quiere que aparezca en su programa de televisión para que hable de mi vida, hace meses que llama, el lunes me abordó cuando salía de la empresa, le dije directamente que no, pero hoy me comentó Jenny que estuvo en la prisión con los asaltantes que atrape hace un tiempo, y en los registros buscando mi partida de nacimiento.

Piccolo: ¿Crees que descubra algo?

Izbet: No lo sé, lo que me preocupa es que en algún momento Yun vendrá a vivir conmigo, por eso quiero alejar las miradas curiosas lo más que pueda de mí - viene el niño - mejor dejemos todo eso ¿Qué quieres cenar?

El domingo después de almuerzo Piccolo lleva a Yun a casa de Jenny, al rato llama insistentemente un número desconocido al celular de Izbet.

Izbet: Buenas tardes...

Ann: Buenas tardes, soy Ann Melampau, necesito hablar con usted, estuve con los ladrones de banco que atrapó, declararon que tenía alas y ojos oscuros cuando los detuvo.

Izbet: Va a creerle a unos tipos que quieren pasar por locos y así eludir su castigo.

Ann: También revise la partida de nacimiento de usted y sus padres, hay algunas situaciones extrañas en ellos...

Izbet: Por favor, entienda que no quiero hablar de mi vida, no vuelva a contactarse sino haré que mi abogado la demande por hostigamiento - le cuelga.

Decide ir a tomar una ducha para relajarse, cerca de su casa, en una camioneta, está la periodista.

Ann: Algo debe ocultar, normalmente este tipo de gente adora que hablen de ellos en televisión... ¿Cuál es tu secreto, Izbet Supay?

Desde donde está, a través de binoculares, distingue la cabeza de la mujer ciega por la ventana del baño que da a la calle, Piccolo llega volando y entra por la parte de atrás de la casa por eso ella no lo ve, éste al escuchar el agua se dirige hacia el baño.

Ann: Hay movimiento en el primer piso... no vi entrar a nadie por la puerta principal... debe ser un ladrón... que mala suerte, entrar justo en la casa de una luchadora de artes marciales... ya debe haber escuchado que está bañándose, pero va para allá en vez de irse... ¿Por qué tiene pintada la piel de verde...? Dios, no es un ladrón, debe ser un violad..., por eso no quiere que lo identifiquen... que primicia, mejor uso la cámara - la toma, pero se da cuenta que sólo registra estática, al apuntar para otro lado todo es normal - que raro, es como si algo evita que se pueda grabar hacia esa casa... - deja la grabadora apuntada hacia el lugar, esperando que logre captar algo, y sigue mirando con los binoculares.

Izbet sumida en sus pensamientos, no siente a Piccolo, y cuando éste le toca el hombro, ella se da vuelta rápidamente, pone su brazo contra la garganta de él, y le toma una muñeca con una de sus manos a la altura de la cabeza, sus ojos se vuelven plomos.

Ann: Pobre tipo, no pensó que se encontraría con una mujer que sabe defenderse... ¿Sus ojos se volvieron oscuros?

En la casa.

Piccolo: Tranquila, soy yo.

Izbet: Lo siento, es que llamó de nuevo esa mujer, descubrió algo en los papeles de mis padres y el mío. Mañana temprano llamaré a mi abogado y veré que puede hacer para que me deje en paz.

Piccolo: Estas muy tensa... no quieres un masaje para relajarte...

Izbet: mmm... tú sabes que es lo que me relaja...

Le quita el turbante, la capa, y la ropa, ambos entran a la ducha, desde su escondite la periodista ve como baja besando el cuerpo de Piccolo, y desaparece de la visión que tiene.

Ann: Así que esto es lo que quiere ocultar... ¿Es casado?... sino porque se disfrazó de esa manera... esperaré a que tenga la cara limpia, para saber quién es... pero el maquillaje no sale con el agua... estoy muy lejos pero... eso son... cuernos... o Dios mío, es verdad lo que dijeron los ladrones, entonces no fue mi imaginación... sus ojos estuvieron oscuros recién... ella es un demonio... - y sin poder evitarlo dice en voz alta - Y SU AMANTE ES EL DIABLO.

Piccolo al escuchar esto abre los ojos y ve a la mujer con los binoculares y la cámara apuntándoles, con su mirada rompe todos los equipos que tiene dentro de la camioneta, luego las ventanas abiertas de la casa se cierran al mismo tiempo.

Izbet: poniéndose de pie - ¿Qué pasó?

Piccolo: Alguien estaba grabándonos, creo que es tu "amiga".

Izbet: Que bueno que Bulma me regalo un dispositivo que evita que graben hacía esta casa.

Piccolo: También estaba con binoculares mirando.

Izbet: Esa mujer... haré que mi abogado haga algo, no puede grabarme sin mi consentimiento..

Afuera.

Ann: Ahora entiendo, ella es un demonio, por eso los papeles de sus supuestos padres son falsos, no tiene... lo que dijeron los ladrones... su ascenso tan rápido en los negocios... tiene la edad de Míster Satán, pero se ve sólo un poco mayor que la hija de él, Videl... no envejece... tranquila, no debo perder la razón... como destruyó mis cosas... y cerró las ventanas sin tocarlas. Dios, por eso no quería hacer pública su vida. ¿Qué... hago ahora...? Es mi deber que el mundo lo sepa para estar preparado - se va conduciendo erráticamente.

Luego de varias horas, Jenny llama a Izbet a su celular.

Izbet: ¿Le pasó algo a Yun?

Jenny: No, está bien.

Izbet: En un rato más iremos por él, todavía estamos ocupados.

Jenny: Iz, me avisaron que la Srta. Melampau llamó a una rueda de prensa para mañana en la tarde, según mi contacto, está como loca, le comento que tú eres... un demonio, dice que está fuera de sí.

Izbet: Voy para allá ahora - cuelga.

Piccolo: estaba atrás de ella y escuchó todo - ¿Qué vas a hacer? ¿Necesitas ayuda?

Izbet: mmm... vistámonos primero para ir a buscar al niño, en el camino te diré que planeo hacer.

Al otro día llega cuando está terminando la conferencia de prensa, Ann mostró los papeles falsificados, el testimonio de los delincuentes del banco, que Izbet tenía alas negras y ojos oscuros al momento de detenerlos, además cuenta lo que vivió el día anterior, aprovechando que está allí todos le hacen preguntas a la empresaria, quien con ayuda de Jenny sube a la tarima.

Izbet: Señores, lamento todo esto, son sólo fantasías de una mujer que no aceptó que no quiero entrevistas.

Ann: Ayer te espíe mientras estabas en tu casa, eres un demonio, la cámara no podía grabar porque tus poderes oscuros lo evitaban, además vi que estabas con el diablo, ÉL ES TU AMANTE.

Izbet: Señores, la Srta. Melampau sin presión de mi parte acaba de reconocer frente a todos ustedes que ha estado vigilando mi casa sin mi autorización. No pueden tomar imágenes de mi casa, ya que tengo un dispositivo, regalo de la dueña de la Corporación Cápsula, que me ayuda para que las personas no me sorprendan en mi intimidad, comprenderán que al no ver, esas cosas pueden pasar y yo no me daría cuenta. Aclarado ese punto, y ya que todos quieren saber de mí, les diré porque mis padres no tienen papeles de nacimiento, ellos escaparon del odio de sus etnias que estaban en conflicto, está es una fotografía de ellos. Jenny, por favor - entrega varias copias, donde se ve a una pareja, un hombre muy alto, y fornido, moreno, pelo y ojos oscuros, y una mujer de baja estatura, piel casi transparente, pelo rubio claro, y ojos violetas - huyeron del odio que había entre sus razas, si los descubrían los hubieran matado sólo por amarse, por eso se ocultaron en el pueblo donde nací, usaron certificados falsos por miedo a que los encontraran... - traga saliva - por eso mi madre no quiso ir a un hospital, tenía miedo a que los encontrarán, murió a causa de una complicación durante mi parto. Esta es la declaración del alcalde de mi ciudad natal, y de al menos 50 de las personas más antiguas del lugar, que corroboran lo que digo, y que me conocen desde que nací. Mi padre murió cuando yo tenía 6 años, huí de los orfanatos, viví mucho tiempo en las calles, alimentándome de basura, y durmiendo en donde el cansancio me encontraba... - solloza un poco - tuve la suerte que una buena persona me encontró y me ayudó... - recuperando su serenidad - no quiero ni necesito la lástima de nadie, mi pasado me duele mucho, por eso es que no quería hablar sobre él. Lamentablemente por culpa de la señorita aquí presente ahora todos saben lo que pase en mi infancia. Buenas tardes - se va con su amiga.

Todos quedan impactados, inmediatamente empiezan a comunicarse con las personas del pueblo donde nació, que confirman todo lo que dijo, pero Ann sigue asegurando que es verdad lo que dijo, que es una demonio, al final se la llevan a un psiquiátrico. Pasan 6 meses, Izbet averigua que todavía está internada, y sin posibilidad de salir, a pesar de lo que pasó con ella, no quiere que viva recluida.

Piccolo: ¿Por qué estás así, problemas en el trabajo?

Izbet: Supe que Ann, la periodista, todavía está internada.

Piccolo: Pensé que ya no te importaba lo que le pasará.

Izbet: Odio que se haya metido en mi vida, nada más, siempre pensé que después de un tiempo cambiaría su versión para salir libre.

Piccolo: ¿Qué quieres hacer?

Izbet: Conversar con ella.

Piccolo: ¿Te dejarán?

Izbet: Puedo intentarlo... ¿Si lo logro podrías acompañarme?

Piccolo: Ya veo - sonríe - tu plan es matarla del susto.

Izbet: Tonto... - lo golpea en el brazo - quiero ver si logro convencerla para que cambie su versión.

Le costó unas semanas, pero consigue que la dejen visitarla, va con Jenny.

Ann: ¿Por qué viniste?

Izbet: Por nada malo, pero no me interesa que nos graben - Jenny le dice dónde está la cámara, y la inutiliza, su amiga sale, se queda afuera, vigilando.

Ann: ¿Vas a matarme?

Izbet: Claro que no, sólo quiero conversar, si quieres puedes quedarte al lado de la puerta, y yo me iré al fondo, así puedes huir si te sientes amenazada, Jenny salió sólo para dejarnos hablar tranquilas ¿Te parece? - se va al otro lado de la habitación.

Ann: de pie al lado de la puerta - ¿Qué quieres decirme?

Izbet: Primero mira - le muestra la misma foto que pasó de sus padres en la rueda de prensa, pero en ésta su madre tiene alas.

Ann: ¿Qué significa esto?

Izbet: Yo nací en la tierra, pero mis padres eran extraterrestres, la raza de mi madre es el Pueblo Celestial, como ves parecen ángeles, mi padre era de otro universo... un demonio.

Ann: Sabía que tenía razón.

Izbet: Soy sólo medio demonio... no mentí cuando dije que ellos escapaban, la raza de mi padre los hubieran matado si sabían que escapó para vivir en paz. En el planeta de mi madre no permiten extraños, para estar juntos tuvieron que venir a la Tierra, mamá no quiso ir a un hospital cuando nací, te imaginas el revuelo al ver una mujer con alas. Todo lo que dije sobre la muerte de papá es verdad - le cuenta toda su historia - Ahora quiero, por favor, que no grites ni te alteres.

Ann: ¿Qué harás?

Izbet: La pregunta correcta es quien vendrá.

Mientras conversaban Piccolo entra al psiquiátrico sin ser visto, y justamente en ese momento Jenny abre la puerta para él.

Ann: pálida al verlo a su lado, corre al fondo de la habitación - es el diablo - alcanza a decir en un susurro.

Izbet: caminando para ponerse al lado de él - no, no es un diablo ni un demonio, nació en este planeta, pero su padre también era un extraterrestre.

Ann: ¿Un marciano?

Piccolo: No... mi raza se llama namekuseijin, no queremos hacer daño a nadie - toma a Izbet del hombro - sólo deseamos vivir en paz, mire - le pasa una foto de Yun.

Ann: ¿Este es el niño que tomaron los ladrones de rehén?

Piccolo: Sí, es nuestro hijo, tiene 2 años y medio.

Ann: Pero parece de 8 o 10.

Izbet: Por eso no puedo tenerlo todavía conmigo - dice con tristeza - por ahora crece demasiado rápido, llegará un momento que pueda pasar por un humano normal, y hacer su vida como cualquier otro joven, por eso no puedo permitir que se sepa lo que te conté. Es un inocente, como mi madre, ella tenía miedo a la reacción de las personas con alguien distinta, vivía en una cabaña, nunca salía de allí por miedo que la vieran, así podía estar tranquila con mi padre, no quiero que mi hijo tenga que pasar por eso también.

Ann: ¿Qué es exactamente lo que quieres de mí?

Izbet: Cambia tu versión, di que estabas confundida, que fue stress, no quiero que vivas como mi madre, encerrada, quiero que salgas y rehagas tu vida.

Ann: Luego de esto, quien me va a querer contratar.

Izbet: Cuando te dejen salir anda a ver a mi asistente, puedes ser encargada de relaciones públicas en mi empresa, Jenny se encarga de todo, sería un alivio para ella y para mí. De corazón no te odio, pero entiende que tengo que proteger a mi familia. Piensa lo que te dije - hacía Piccolo - Adiós, nos vemos en casa - se despide con un beso, éste aprovecha que sólo está Jenny en el pasillo, y se va.

Luego de unos meses Ann es dada de alta, y tal como le prometió entra a trabajar en sus empresas, un tiempo después conoce a su futuro esposo, Izbet es la Madrina de esa boda también.

Fin del Recuerdo



Piccolo: Al final todo termino bien para ella.

Izbet: Me ayudó mucho cuando Yun fue a vivir conmigo, en el primer comunicado de prensa por esa situación, dio a entender sin decirlo que él había estado viviendo con el padre, pero que ya debía empezar a prepararse para dirigir mis negocios.

Piccolo: Al final se convirtió en una buena amiga...mmm... ahora que lo pienso es muy parecida a ti.

Izbet: ¿En qué?

Piccolo: Ambas son igual de testarudas.

FIN
Se fuerte, hazte grande pero no pierdas la inocencia de tu corazón...

Imagen
Avatar de Usuario
Arwen
Supersaiyano dai san dankai
Mensajes: 884
Registrado: Jue Ene 10, 2019 9:53 am

Re: Fanfic Angel Ciego by Izbet46

Mensaje por Arwen »

CAPITULO 9. Memorias 4. Venganza
Spoiler:
Piccolo: Esta foto la sacaron luego...

Izbet: ¿De qué?

Piccolo: Cuando te recuperaste del veneno.


Recuerdo

Hace unos días atrás Jenny empieza a recibir llamadas a su celular, al principio nadie habla, luego sólo se escucha una risa de mujer, siempre son números distintos, así que opta por mantenerlo apagado mientras hacen la averiguación, no quiere contarle a su amiga para no preocuparla.

Izbet: Te he preguntado tres veces cuando será la firma del Convenio de Cooperación con la Corporación Cápsula ¿Tienes problemas en tu casa?

Jenny: Estoy algo cansada nada más, he dormido poco.

Izbet: ¿Quieres unos días libres?

Jenny: riendo - ¿Cómo está Yun y el Sr. Piccolo?

Izbet: Muy bien, pasado mañana, nos reuniremos en la cascada, mañana viernes debo tener todo el día para ver los últimos detalles de la alianza con Bulma.

Jenny: Me alegra verte tan feliz.

Izbet: ¿Y quieres el descanso o no?

Jenny: Déjame pensarlo, gracias, JEFA.

Al otro día mientras está con la científica, le llama su amiga.

Izbet: Dime Jenny.

Jenny: He pensado lo del permiso, estamos saliendo por un par de días con Marcos y los niños, iremos a las montañas.

Izbet: Qué bien, no te preocupes por la empresa, me haré cargo de todo, tómate los días que quieras.

Jenny: Tendré que cambiar mi ida con los niños a la playa Tranquila del Sr. Sam O'Connor Smith, a pesar del nombre igual me preocupan mis hijos, recuerda que no saben nadar bien - Izbet se pone pálida, se despide, cuelga, se excusa con Bulma que se había olvidado de que debía encontrarse con Piccolo y se va. Rápidamente busca el ki de su amiga, apenas lo logra sentir, el nombre que le dio es la señal que pactaron cuando una de las dos esté en peligro. Llega a un acantilado a orillas del mar, hay una entrada en un costado, sólo siente la presencia de un humano, será fácil se dice, va a soltarle la mordaza a su amiga, cuando alguien aparece atrás de ella, que le inyecta un líquido en el cuello, ella siente un gran dolor y debilidad que se extiende por todo el cuerpo, inmediatamente su ki queda casi inexistente. La energía del humano que había sentido era de una mujer que se acerca de un galpón que hay al fondo.

Mitzi: Vaya, llegó la perra, sabía que si le hacíamos creer que era un simple secuestro para obtener información de la empresa, ésta lograría que viniera.

Izbet: desde el suelo - ¿Entonces qué quieres?

Mitzi: Venganza, soy Mitzi, hermana de Carlos Rapist.

Izbet: Pensé que no quedaba nadie de su ralea.

Mitzi: El veneno que tienes ahora en tu sangre, te matará en dos horas, y los dolores que sentirás serán insoportables jajajaja.

Ella no quiere darle la alegría de gritar, atrás de Mitzi aparece el sujeto que la inyectó, había ocultado su ki, es muy alto y grande, con orejas puntiagudas, piel rosada, pequeños cuernos, y ojos amarillos, se llama Braca, el hijo de Dabura.

Braca: ¿Y en que nos entretenemos mientras esperamos? - sonríe lascivamente.

Mitzi: le suelta el pantalón, se arrodilla y comienza a meter y sacar el miembro de él de su boca, mientras le acaricia el trasero, ya cuando esta por acabar lo ayuda metiendo un dedo en él, logrando que acabe inmediatamente, se levanta - Vamos cariño, el saber que está muriendo me excita demasiado.

Braca: Ojalá sea así, cariño.

Jenny sólo mueve los ojos, le pusieron algo para tenerla quieta, casi a las 2 horas van a verlas de nuevo, el cuerpo de Izbet está luchando contra el tóxico.

Braca: Todavía no está agonizando, tendremos que ponerle más, se supone que la cantidad que le dimos es mortal para los humanos ¿Segura que es terrestre?

Mitzi: Es una simple pordiosera, una rata callejera a la que mi hermano le dio trabajo, comida, un techo para cobijarse, y mira como le pagó.

Izbet: Trabajo le dices a obligarme a pelear... para luego encerrarme en una habitación inmunda... con otras 20 niñas... abusó de mi...agradece que no lo pude matar antes.

Mitzi: Espera Braca, todavía no la mates, quiero escuchar que grite, tú sabes cómo lograrlo, amor.

Braca: al rato - es más fuerte de lo que creí, la he cortado, quemado con fierros, le quite uñas, le puse ácido en la mano, y nada.

Mitzi: Y si lo hacemos al revés, dale un poco de "amor"... aunque lo hicimos varias veces recién, sé que nunca quedas satisfecho.

Braca: mmm... porque no...

Izbet respira lentamente y se mentaliza que no debe desesperarse, quieren que grite y suplique, y no lo lograrán, lo que sea que le haga el maldito debe quedarse quieta, no podrá usar la misma táctica que con Francois. Él se coloca sobre ella y le da un beso, al ver que no reacciona, molesto la muerde en el labio, a pesar del sangrado no se queja, intenta varias cosas más pero es en vano, al final se levanta.

Braca: con esos ojos blancos es como estar con una muerta, no importa que intente no reacciona. Ven - toma a Mitzi de la cintura, le quita la camiseta, pasa su lengua lentamente por sus pezones haciendo que ésta gima muy fuerte, luego de chupárselos un rato - no me voy a quedar con las ganas, ven cariño - y se van al fondo a hacer el amor nuevamente, cuando terminan.

Mitzi: Se me ocurrió como hacerla sufrir.

Van con Jenny.

Mitzi: Veremos si tú eres tan fuerte como tu mal nacida amiguita, ya debe haber pasado el efecto de lo que te pusimos.

Braca empieza a golpearla, ella aguanta, pero cuando le saca una uña de la mano, no puede evitar aullar del dolor.

Izbet: desde el suelo - No sigas... no lo soportará... tu odio es hacia mí.

Mitzi: Estaba cuando mataste a mi hermano, y no lo evitó, también debe morir, ya los guardaespaldas y sus familias pagaron por su ineficiencia. Creo que encontré la forma de que esta perra me ruegue. Vamos - dirigiéndose a Izbet - pide por ella, y tal vez la deje tranquila.

Izbet: trata de arrodillarse - TE LO SUPLICO... POR FAVOR, NO LE HAGAS DAÑO - inclina la cabeza.

Mitzi: Por fin la orgullosa luchadora implora. Braca sigue.

Izbet: Prometiste que la dejarías en paz si te rogaba.

Mitzi: No me acuerdo... además, tu amante y su familia también deben sufrir.

Izbet: ¿Mi amante?

Mitzi: Todos saben que ustedes dos son pareja, aunque la hiciste casar y tener hijos para ocultar lo suyo.

Izbet: Tienes la mente podrida, ella para mí es como una hermana.

Mitzi: Investigue tu vida, sé que nunca has tenido un hombre, conmigo no tienes que fingir. Braca.

Le desgarra la blusa a Jenny, la toma del cabello para besarla, mientras le pellizca los pezones, luego baja con su lengua por su cuello y juega en los senos de la mujer con su boca, ella le pega un cabezazo para defenderse, éste furioso la muerde en el hombro, y con un cuchillo empieza a hacerle heridas en los senos y la espalda.

Jenny: Maldito... AYYYY.

Como se desentendieron de ella, Izbet se arrastra hasta que queda cerca de Braca, entonces junta toda la fuerza que le queda, y lo empuja para que distraiga su atención de su amiga.

Izbet: Déjala en paz, cobarde.

Braca: le da una cachetada que la tira al piso de nuevo - contigo me las veré más tarde - le da una patada en las costillas - tú - a Jenny - mira lo que les espera - toma una lagartija que anda por el suelo, la escupe y ésta se transforma en piedra, la lleva a un contenedor, al ver que hay adentro, y comprender lo que ve, los ojos de la mujer se abren de horror, hay partes de "estatuas" de hombres, mujeres, ancianos, manos, pies, caras con expresión de terror - sólo volverían a la normalidad si yo muriera, pero en este estado de que les sirve.

Jenny: ¿Quiénes son?

Mitzi: Los guardaespaldas y sus familias, te dije que ya habían pagado por la muerte de mi hermano, y ahora lo cuidarán para la eternidad ¿Verdad hermanito? - se acerca a un lugar del container, donde se ve parte de un ataúd.

Jenny: No veo niños...

Mitzi: No hay, ellos pasaron a mis negocios jajajajaja, así como pronto irán los tuyos jajajajaja.

Jenny: Están locos... son unos enfermos.

Braca: Lamentarás habernos insultado.

Al finalizar la tarde las dejan solas, con las ropas destrozadas, mordeduras, heridas sangrantes, costillas rotas y golpes.

Izbet: ya no puede moverse, piensa - no debí venir sola... Jenny... Marcos... sus niños... ahora todos están en peligro... no lo pensé bien... como sentí sólo un ki humano me confié... ésta vez no podré salir con vida... Piccolo... hasta mañana en la tarde recién te preocuparás al no verme llegar... sólo me queda el consuelo que no saben de ti ni de Yun... - cae inconsciente.

En ese momento Piccolo está en el Templo Sagrado, su hijo llega corriendo, le trae una pluma negra con manchas de sangre.

Yun: Mira lo que me cayó, se parece a las de mamá - aunque quedaron de juntarse con ella al otro día, lo que pasa le da un mal presentimiento, decide ir a verla.

Piccolo: Quédate con Dende, ya vuelvo.

En la Corporación Cápsula.

Piccolo: Hola ¿Está Izbet?

Bulma: Se fue en la mañana, dijo que iba a juntarse contigo...

Piccolo: Quedamos de encontrarnos mañana.

Bulma: Que extraño, la llamaré a su celular... está apagado.

Piccolo: ¿Pasó algo extraño cuando estuvo contigo?

Bulma: Justo antes de irse la llamó su asistente.

Piccolo: ¿Nada más?

Bulma: Eso creo, estaba viendo algo y no le puse mucha atención, puso el altavoz en su celular... espera, veamos la cinta de seguridad.

Escuchan y ven todo lo que sucedió.

Bulma: Son cosas sin importancia, su asistente irá de vacaciones unos días, nada más.

Piccolo: Se puso nerviosa antes de cortar... ¿Puedes llamar a Videl y pedirle que pregunte por Jenny en su casa? A esta hora debe haber alguien.

Bulma: Pero si en la grabación dice que salieron de viaje.

Piccolo: Sólo hazlo por favor - no está en su casa, le avisó a su esposo que había salido a un viaje urgente por la empresa, y que no volvería en un par de días - Sam O'Connor Smith... ahora recuerdo, ese nombre es una clave que usan si están en peligro (SOS), nombró playa Tranquila... entonces debe estar en la costa... pero no siento ninguno de los ki.

Decide ir a pedirle ayuda a Goku, allá encuentra también a Gohan y su familia, les cuenta todo, deciden que Videl irá a la casa de Jenny, le explicará la situación a Marcos, y con ayuda de Goten y Trunks lo llevarán a él y los niños al Templo Sagrado para protegerlos, ella puso hincapié en que le preocupaban sus hijos, analizan que si hubieran sido humanos normales Izbet hubiera podido rescatar a su amiga sin problemas, Dende irá a la Corporación Cápsula, lo más seguro que las mujeres estén heridas, así él podrá curarlas, y los pequeños no se darán cuenta de nada. Goku, Gohan y Piccolo van a la costa a tratar de encontrar el lugar donde están las mujeres pero no encuentran ningún rastro ni pistas, se reúnen en casa de Bulma para ver si la científica tiene alguna idea. Hace una máquina para captar las ondas de sonido de los implementos para ver que usa Izbet. Inmediatamente aparece una señal, efectivamente están en la costa, por Google Map ven que es un acantilado, llegan casi a media noche, siguiendo la señal del aparato manual que llevan, descubren la entrada a las cuevas, Piccolo prefiere entrar a investigar solo, ve a Izbet en el suelo, y Jenny atada a una silla, ambas semi desnudas, en el fondo una pareja termina de hacer el amor escandalosamente, ella se baja de él, se visten y van donde las mujeres.

Mitzi: Estas escorias todavía están vivas.

Braca: ¿Acabó con ellas?

Mitzi: No, mejor mañana, quiero que sufran al pensar que los hijos de ésta pronto formarán parte de mi negocio jajajajaja.

El namekuseijin vuelve con Goku y Gohan, deben planear bien todo lo que harán si quieren rescatarlas con vida, el sujeto que está con la mujer se parece a Dabura, si tiene sus mismos poderes deberán tener mucho cuidado. Una vez decidido todo esperan el amanecer, Piccolo, ya sin turbante ni capa, vuelve a entrar sigilosamente.

Mitzi: Ya perras, despierten, este es su último amanecer en esta tierra.

Sólo Jenny reacciona, Izbet está inconsciente. Su amiga ya recuperada, trata de soltarse, Piccolo se mueve con cuidado, pero antes que pueda hacer algo Braca lo siente, se da vuelta y le tira un escupitajo que le da en la parte superior de su Gi, por suerte alcanza a sacar el pedazo de tela antes que su piel se convierta en piedra.

Braca: Buenos reflejos.

Piccolo: Eres muy parecido a Dabura.

Braca: Era mi padre ¿Qué quieres?

Piccolo: Llevarme a estas mujeres.

Braca: Inténtalo.

Se acerca a Jenny sin quitarle la vista a Braca, con sus uñas corta las ligaduras, inmediatamente ésta se acerca a su amiga.

Jenny: Su pulso está muy débil.

Piccolo las mira por un segundo, el que aprovecha Braca para lanzarle otro poco de saliva que logra esquivar, pero no puede evitar que le llegue a Izbet.

Piccolo: toma en sus brazos la estatua que es ahora - DESGRACIADO.

El demonio lanza un ataque cortante, el namekuseijin alcanza a reaccionar para que no destruya a Izbet, pero una de sus manos es seccionada, la estatua se le suelta, antes que caiga al suelo Jenny se tira y logra amortiguar el golpe con su cuerpo, por fortuna la figura sigue intacta, Piccolo regenera su mano, se pone frente a ellas, hace que su ki se eleve y baje por tres veces, aparece Goku a su lado.

Guku: Ésta convertida...

Piccolo: Sigue con el plan.

Toma a las mujeres y se teletransporta a la Corporación Cápsula.

Mitzi: NO... DEBEN MORIR...

Braca: No te preocupes, éste nos llevara donde están, te prometí que vengarías a tu hermano y así será.

Piccolo: ¿Quién es tu hermano?

Mitzi: Era un empresario muy exitoso, le dio trabajo a esas malditas, y luego de ayudarlas la ciega lo mató, la otra estaba presente y no lo evitó. Cuando lo prepararon para el velatorio tuvieron que ponerle fierros en todo el cuerpo para que no se moviera como gelatina, jure que me vengaría de todos los culpables, me costó tiempo tomar el control de la organización, y luego averiguar quien fue su asesino. Todo fue más fácil luego de aliarme con Braca - se besa con él.

Piccolo: Esa bestia, a quien le dices hermano, obligaba a luchar a niños y niñas, o a prostituirse ¿Qué clase de empresa es esa?

Mitzi: Les enseñaba a ganarse la vida ¿Crees que cuando van a los orfanatos están mejor? Para los países son un gran problema, los tiran donde sea para que no se vean, en algunos lugares los matan en los centros donde los internan, y nadie se preocupa ni pregunta nada, mi solución es mejor ¿Por qué crees que nunca tengo problema dónde voy? Ellos me proveen de mano de obra, y por cada uno les pagó una buena suma... con mi negocio todos ganamos - Braca ríe.

Piccolo: Ustedes son unos engendros escapados del infierno.

Mitzi: Prefiero el nombre empresarios, tomamos lo que hay y les sacamos beneficio. La culpa la tiene ese tipo de gente que no debería tener hijos, no saben cuidarlos, apenas pueden los tiran a la calle a ganar dinero para ellos. Nosotros hacemos lo mismo, sólo que más organizado. Mi hermano era un genio.

Piccolo: Fue un monstruo que violó a Izbet.

Mitzi: Esa tipa debe habérsele ofrecido y al final se negó para hacerse la interesante.

Piccolo: Era una niña, tenía 9 años.

Mitzi: Hay más chicas que lo hacen por un pedazo de pan. Sé cómo era Carlos, un caballero en la intimidad, muy cariñoso y apasionado, sabía cómo conquistar a quien le interesaba, por eso siempre tuvo a las mujeres que quiso - sonríe - no se hubiera fijado en una mugrienta ciega.

Piccolo: Como puedes saber tanto de la intimidad de tu hermano... a no ser que él y tú... - ella sonríe dando a entender que tiene razón en lo que piensa - eres una enferma.

Mitzi: Me da lo mismo lo que pienses. Dime cuanto te pagan por rescatarlas, te doy el triple, pero quiero de vuelta a esa ciega, la otra ya no importa... o dime que quieres y te lo daré - se suelta un botón de la blusa para que se le vean mejor los senos, en un intento de seducirlo.

Piccolo: No me interesa nada de ti. Esa ciega mugrosa como le dices, es mi mujer.

Mitzi: mmm... entiendo... que lastima para ti que sea una mujerzuela que adora meterse con cualquiera, o no Braca.

Braca: relamiéndose los labios - Es puro fuego.

Piccolo: ¿Fuego? - con ira contenida.

Braca: Nos divertimos bastante... - sonríe lascivamente.

No alcanza a decir nada más, el namekuseijin se abalanza sobre él, lo golpea varias veces, cuidándose de los escupitajos que le lanza, rápidamente lo tiene en el suelo.

Piccolo: le pone el pie en el pecho y se inclina sobre él - ¿QUÉ LE HICISTE MALDITO?

Braca: Jajajaja sólo cosas que disfrutó, gemía como una perra en celo mientras teníamos sexo, incluso me dijo que nunca se la habían cogido tan bien como yo - quiere tirarle saliva, pero Piccolo se adelanta y le lanza un rayo de sus ojos a la boca - me quemaste.

Como demora, Gohan no espera la señal convenida y entra.

Gohan: Señor Piccolo.

Piccolo: No te llame.

Gohan: Como se demoraba preferí entra, déjeme ayudarle.

Piccolo: NO.

Braca aprovecha la distracción, y sale a terreno abierto.

Braca: Vaya, dos contra uno.

Piccolo: Él se quedará dónde está, yo seré el que tenga el placer de mandarte al otro mundo.

El namekuseijin lanza varias esferas de ki, que Braca esquiva fácilmente, pero no se da cuenta que lo rodean, en un momento dado todas se dirigen hacia él. Apenas se dispersa algo el humo, Piccolo vuelve a golpearlo en la cara tirándolo contra el acantilado, pero antes de chocar contraataca con una onda de energía maligna, que lo tira al mar.

Gohan: grita desde la entrada de la cueva - SR. PICCOLO.

Braca: Tu amigo tendrá una tumba líquida.

El demonio materializa una lanza que arrojar hacia el lugar donde ve aparecer a su contrincante, le atraviesa el cuerpo, pero sólo era un clon, el verdadero sale cerca de él, ha reunido mucha energía, y la dispara en la cara de Braca, éste cae sobre el acantilado, contraataca con una gran flama que sale de su boca y le da a Piccolo en el hombro. El namekuseijin baja a las rocas, en posición semi fetal, con la cabeza baja, su adversario piensa que su último ataque lo debilitó, así que nuevamente hace aparecer una lanza y se la tira, pero Piccolo está juntando energía, le dispara un Makankosappo, que desaparece la lanza, atraviesa a Braca y a media montaña, matándolo inmediatamente.

Mientras ellos luchan sobre el acantilado todo empieza a caer en la caverna, Mitzi ve a Gohan volar cerca de la entrada y le pide ayuda, la lleva hasta el borde, llegan cuando Braca muere, para desquitarse trata de inyectarlo con el mismo tóxico que a Izbet, pero él se da cuenta, y la suelta un poco antes que pusieran los pies en las rocas, lo que desestabiliza a la mujer, que cae al suelo inyectándose accidentalmente el veneno, empieza a aullar de dolor, toma una pistola que tenía escondida, grita: HERMANO, NO PUDE VENGARTE, PERDÓNAME, y se dispara en la frente, no estaba dispuesta a sufrir ese dolor por horas, si al final iba a morir igual.

Ya terminado todo, Piccolo hace aumentar y disminuir tres veces su ki, Goku aparece y los lleva a la casa de Bulma, Jenny está bien, pero no Izbet.

Dende: Pude sanar las heridas, pero con lo del veneno no puedo hacer nada.

Piccolo: Hay que llevarla al hospital rápido.

Bulma: Ya está conectada a oxígeno y suero, use la sala que tengo para cuando Vegeta necesita atención médica, la están examinando los especialistas, apenas me digan algo te avisare. Tranquilo.

Piccolo: Gracias ¿Estas bien Jenny?

Jenny: Sí.

Bulma: Anda a una habitación, haré que te lleven ropa para que puedas reunirte con tu familia, ya deben ir camino a tu casa - todavía está cubierta sólo con una sábana que le pasaron cuando llegó.

Jenny: Aunque quiero ir a verlos, prefiero quedarme hasta saber cómo está Izbet.

Más tarde se reúnen todos, Bulma les da el diagnóstico.

Bulma: Sus signos vitales están bajos, pero estables por ahora. Debemos tener esperanza, debería haber muerto a las 2 horas que le aplicaron el veneno, y ya lleva más de un día.

Piccolo: Me quedare con ella hasta la noche, luego iré a hablar con Yun.

Dende: Iré con él ahora para explicarle...

Piccolo: Que su madre está enferma, es contagioso, por eso no puede venir a verla, no le digas nada más.

Jenny: Si le parece, pueden llevarlo a mi casa, allá estará más cerca, y con mis hijos se distraerá.

Piccolo: Es buena idea, gracias.

Han pasado tres días e Izbet sigue cada vez peor, Jenny luego de dejar todo arreglado en la oficina, va y viene de su casa, ha logrado que se mantenga la noticia en reserva para que Yun no se entere que tan grave está su madre.

Jenny: habla con su esposo - quiero quedarme esta noche cuidando a Izbet.

Marcos: No te preocupes, sé lo que sientes por ella. Quédate el tiempo que consideres necesario, los niños están bien, Bet está muy contenta de que Yun se quede estos días con nosotros.

Jenny: Gracias por entenderme. Nos vemos.

Piccolo: Quisiera hablar contigo ¿Viste todo lo que le pasó a Izbet cuando estuvieron en ese lugar?

Jenny: Sí.

Piccolo: Es que ese... dijo... que había... con Izbet... tenido relaciones... sé que ella no lo habría consentido jamás por su voluntad, pero estaba tan débil que él pudo...

Jenny: No lo consiguió aunque lo intentó, ella se quedó quieta... la mordió, trato de excitarla de muchas formas, quiso penetrarla... - al ver la cara de Piccolo, se da cuenta que no debió entrar en detalles - como no lo logró al final se aburrió y optó por irse con la maldita.

Piccolo: Entiendo, gracias.

Jenny: Lo importante ahora es Izbet. No debe preocuparse por lo que pasó con ese tipo... incluso a mí... también él intentó... - se le quiebra un poco la voz.

Piccolo: Tranquila - le pone la mano en el hombro - ese animal ya está muerto, disculpa por haberte hecho recordar lo que vivieron. Tienes razón, ahora debemos esperar que Izbet se recupere pronto.

Al cuarto día y luego de la revisión diaria de los médicos, Bulma llama a Piccolo, Videl y Jenny para darles la peor de las noticias.

Bulma: Lo siento mucho, me acaban de decir que no pasa de esta noche.

Piccolo: ¿No hay nada más que podamos hacer?

Bulma: Lamentablemente nada... debes mandar a buscar a Yun... para que pueda despedirse de su madre.

Piccolo: Esta bien.

Jenny: ¿Podría estar con ella mientras lo traen?

Piccolo: Bueno - luego dice en voz alta para sí - debo encontrar una forma de salvarla - cierra los ojos, cruza los brazos y se queda quieto.

Bulma: Estaremos acá por cualquier cosa.

Videl se ofrece para ir a buscar al niño, mientras Jenny entra a la habitación.

Jenny: Por favor, no te rindas... ¿Te acuerdas cuando nos conocimos? Evitaste que abusarán de mí, desde entonces me has estado cuidando, siempre, por mí le suplicaste a Mitzi... juntaste tus últimas fuerzas para tratar de protegerme de Braca... recuerdo que dijiste que soy como una hermana para ti, pero debo confesarte que yo no siento lo mismo... te quiero como si fueras mi verdadera madre... regresa, sigue luchando... eres más fuerte que esto...

En ese momento el corazón de la enferma empieza a latir más fuerte por un momento, Bulma y Piccolo entran.

Bulma: ¿Cómo lo hiciste?

Jenny: ¿Le pasa algo malo?

Bulma: No, al contrario, por un segundo estuvo mucho mejor...

Piccolo: mmm... déjenme solo con ella.

Bulma: Pero...

Piccolo: AHORA... por favor - se van las mujeres, le toma la mano a Izbet y se sienta a su lado - Sé que los médicos están equivocados, sobrevivirás, y apenas estés mejor, nada te salvará de mi regaño ¿Por qué no me dijiste que estaba pasando? Da lo mismo si puedes o no sola, somos uno ahora y siempre... sigue luchando... Jenny te quiere como si fueras su madre... le dijiste a Bet que la acompañarías cuando se case, y nunca faltas a tus promesas... Yun te necesita... mucha gente está preocupada por ti... todos ellos te quieren mucho... piensa en mí... hemos pasado tanto juntos... no quiero perderte... no ahora... no así... te amo - acerca su cara a ella, cierra los ojos, quedan frente con frente.

Por un momento todo sigue igual, luego su corazón baja más su ritmo, para rápidamente empezar a latir con mucha fuerza, comienza a moverse, y trata de quitarse el suero y el oxígeno.

Piccolo: Jenny, Bulma, venga rápido - está última le pone un calmante.

Izbet: Jenny...

Jenny: Todo está bien, tranquila, nos trajeron hace días a la Corporación Cápsula.

Piccolo: Descansa.

Izbet: Nos... salvaste.

Piccolo: Las rescatamos con Gohan y Goku.

Izbet: Gracias... a todos.

Piccolo: Duerme, todo está bien ahora.

Pasan algunos días más, y por fin puede irse repuesta totalmente.

Izbet: No es necesario que me lleves, ya puedo volar.

Piccolo: Bulma dijo que no debes esforzarte por un tiempo, iremos al Templo Sagrado a que descanses por 15 días al menos.

Izbet: Quiero ir a la empresa, ha estado botada por mucho tiempo.

Piccolo: Jenny se hará cargo, ya converse con ella.

Izbet: Traidores, se aliaron a mis espaldas... jajaja... se reconocer cuando perdí... aprovecharé de estar con Yun, se sentía muy afectado cuando pudo entrar a verme, quiero que vea que ya estoy bien - afirma su cabeza en el pecho de él - Gracias por ser mi faro.

Piccolo: ¿Faro?

Izbet: Mientras estuve inconsciente, sentía como si estaba en un bosque muy espeso, todo lo que tocaba me hacía doler el cuerpo... sentía murmullos pero no distinguía de dónde venían, ni quienes eran, hasta que sentí a Jenny, trate de seguir el sonido, pero duró muy poco, cuando todo quedó nuevamente en silencio, sentí a mi padre que me decía que volviera, que Yun no debía crecer como yo sin madre... que fuera fuerte como él me pidió antes de morir... sentí también la voz de una mujer... ella me recordó lo que he vivido contigo... que debía volver a estar con quienes me aman... que todavía no era mi momento... entonces empezaste a hablar, también era sólo un rumor apagado, no sabía de donde venía, pero está vez me moví para varias partes en esa especie de bosque... hasta que tu voz se sintió más fuerte... seguí abriéndome paso, aunque dolía quería llegar a tu lado... luego desperté, por eso te digo que eres mi faro.

Fin del Recuerdo


Izbet: Nunca te pregunte por qué fuiste a buscarme un día antes donde Bulma.

Piccolo: Yun me trajo una pluma negra con sangre que le había caído.

Izbet: Qué casualidad más extraña.

Piccolo: Agradezcamos que por eso pudimos rescatarlas a tiempo.

En el paraíso, los padres de ella rememoran cuando le dieron a Uranai Baba sus anillos de boda para que dejara caer una pluma que le entregaron en el Templo Sagrado, hace mucho tiempo atrás.

FIN
Se fuerte, hazte grande pero no pierdas la inocencia de tu corazón...

Imagen
Avatar de Usuario
Arwen
Supersaiyano dai san dankai
Mensajes: 884
Registrado: Jue Ene 10, 2019 9:53 am

Re: Fanfic Angel Ciego by Izbet46

Mensaje por Arwen »

CAPITULO 9. Memorias 5. Un día en la cascada
Spoiler:
Izbet: Era genial cuando íbamos a la cascada con Dende.

Piccolo: Aunque hubo un tiempo que no quería acompañarnos, y tenías que convencerlo.

Izbet: Fue cuando empezamos a ser pareja, no quería hacer mal tercio jajaja.


Recuerdo

Piccolo y su familia van a la cascada a entrenar, Dende va con ellos ya que cuando están allí todos hablan en namekuseijin, y mientras tiene los ojos cerrados descansando, su mente vuelve a sus recuerdos del antiguo Planeta Namek, antes de la llegada de Frezzer, cuando los habitantes de la aldea terminaban de plantar los árboles de Ajisa, y se sentaban a la sombra a descansar. Durante la mañana Yun y su madre hacen equipo para luchar contra Piccolo, luego de unas horas.

Dende: ¿No sigues?

Yun: sentado en la hierba - No, ahora le toca luchar a mamá y papá solamente - grita - VAMOS, TÚ PUEDES.

Dende: ¿A quién alientas?

Yun: A cualquiera de los dos - sonríe, siempre le ha llamado la atención que sus padres sean tan diferentes, no sólo en su físico sino en su forma de ser, ha escuchado que los polos opuestos se atraen, en este caso está seguro que es así.

Dende: ¿Y cómo sigues en la escuela?

Yun: Todavía algunos compañeros me molestan o me miran raro, pero no les hago caso - mirando a sus padres - esos nunca se cansan. Voy a ir a nadar un rato ¿Quieres acompañarme?

Dende: No, gracias.

A las horas terminan el entrenamiento, Izbet se va a sentar al borde del río, Piccolo se acomoda a meditar cerca de la cascada.

Yun: Mamá sabes nadar, ven, no está tan hondo - a pesar que ella dice que le encanta el agua, su hijo nunca ha podido lograr que entre en la parte honda, cuando le salpica un poco en el rostro se devuelve y sale a la orilla.

Izbet: Voy a preparar algo para que comamos, ya es tarde.

Yun: No escapes.

Izbet: No escapo, y no sigas con eso o te castigo, recuerda que YO TENGO EL PODER...jajajaja.

Yun: No es justo mamá... ¿Te ayudó?

Izbet: No es necesario, tengo todo bajo control.

Yun: Como siempre - se tira en la hierba, nunca olvidará el momento en que entendió que significaba que ella fuera ciega, ese día dejó un juguete fuera del área de juegos que tenía en la casa, su madre pasó y se cayó, él no comprendía porque no lo esquivó, cuando entendió tuvo mucha tristeza por ella, y trató de ayudarla en cualquier cosa que hacía, hasta que conversaron, y le hizo entender que aunque tiene limitaciones, debe dejarla que haga las cosas sola, si no puede entonces le pedirá ayuda.

Izbet: EN 5 MINUTOS TODO ESTARÁ LISTO, DENDE, PICCOLO, ACOMPÁÑENNOS, LES TRAJE LA AGUA PURIFICADA QUE TANTO LES GUSTA.

Piccolo: hummm... no tienes por qué gritar - a pesar que a veces me hace enojar, me encanta cuando está cerca, aunque no hablemos, siempre me sentí en calma a su lado, desde que nos conocimos algo en mí me decía que debía cuidarla, no fue casualidad que cuando se cayó esa tarde yo estaba cerca para tratar de ayudarla. Ya cuando termino su año en el Templo y empezamos los entrenamientos, nuestras conversaciones cuando terminábamos eran variadas y entretenidas, muchas veces no nos dábamos cuenta de la hora, casi siempre terminaba durmiéndose, y debía quedarse en el Templo, la iba a dejar a una habitación, me quedaba un rato a su lado por si despertaba decirle donde estaba y no se asustará, pero siempre era al otro día que se levantaba. Incluso me decía que la próxima vez, si seguía con las visitas al Templo, sería más suave en la lucha porque la cansaba demasiado, pero era imposible, a ambos nos gusta probar nuestros límites. Me sentía intranquilo si no la acompañaba a su casa al otro día, y una vez allí aprovechábamos de meditar un poco más, luego mientras ella almorzaba yo leía algo de su biblioteca.

Sin darme cuenta la convivencia con Izbet me hizo cambiar, cuando nació Pan fui cariñoso con la pequeña, incluso ayude varias veces a Milk en algunas cosas. Luego fui humano, cuando volví a ser namekuseijin y aparecieron mis sentimientos de amor hacía ella casi me vuelvo loco, me costó comprender lo que me pasaba - siente el ki relajado de Yun - ella creyó que yo no deseaba tener hijos, pensó que la haría elegir entre él o yo, ya había decidido criarlo sola, siempre tan impulsiva - por un momento abre los ojos para ver a Izbet, su mirada se ensombrece - a pesar de lo que hemos vivido, me pregunto qué hubiera pasado si pudiera ver ¿Qué pensaría de mí? No soportaría que me mirara como la mayoría de los humanos, con ese miedo que he visto en ellos.

Yun: como todos están callados por mucho rato - ¿Estás enojada mamá? - no le gusta cuando sus padres se pelean entre ellos, se quedan callados, pasan semanas hasta que por fin uno empieza a hablar al otro, y las cosas se arreglan. A ninguno de ellos les gusta dar su brazo a torcer, en eso si se parecen, soy muy orgullosos ambos.

Izbet: De los dos yo no soy la enojona - no comprendo cómo los humanos se dejan llevar por lo externo de las personas, es por eso que muchos se asustan de Piccolo, desde que lo conocí no me dio miedo, ya que mi padre era casi tan alto como él, su estatura no me sorprendió para nada, tal vez será porque tiene una mirada penetrante, según me han dicho ¿Eso es lo que los asusta? Lamentablemente los humanos tienen miedo a lo que no es como ellos, a lo distinto, y para estar en paz lo destruyen.

Tiene una gran fuerza interior, su forma de querer parecer duro es muy tierna, todavía me encanta cuando conversamos, siempre son muy entretenidas esas charlas, tiene una cultura increíble para su edad... aunque eso es una contradicción, porque a pesar de ser joven, tiene los conocimientos de Kamisama, al menos 300 años de experiencias. Pero ni eso le ayudó a descubrir que cada vez que me "quedaba dormida" del cansancio por entrenar era para poder estar un poco más en el templo con él y que me tomara en sus brazos, sentía ese corazón latir lentamente, y su olor, igual al de un amanecer en el campo. Como se supone que estaba dormida, nunca he podido preguntarle porque se quedaba tanto rato a mi lado luego de dejarme en la cama, era una tortura para mí tenerlo tan cerca y no poder acariciarlo, tenía miedo de perder su amistad si descubría que estaba enamorada de él... Todavía me pregunto si acepte ir tan rápido acompañada al planeta donde estaba la Perla de la Sirena por no perder tiempo o para pasar tiempo a solas con Piccolo...

Mi forma de percibir el mundo creo que es la mejor, aunque una vez me falló, fue con Francois, no pude sentir que estaba desquiciado, pudo engañarme totalmente, pero gracias a Piccolo sobreviví. Siento que antes de conocerlo sólo vegetaba, mi existencia ha sido distinta desde que lo conocí, todo dio un giro en 180 grados pero para bien, he vivido aventuras que ni en sueños imaginé. Me dio su amor incondicional, y un hijo... tan fuerte, gentil y noble como él... me preocupa que Yun pueda adaptarse bien a su vida con los humanos, le falta la experiencia que teníamos su padre y yo a su edad... por eso le dolió tanto lo de Amanda. Por todo eso siempre quiero darle lo mejor de mí a Piccolo, él se convirtió en el Guardián de mi Corazón.

Además de lo que le dije esa vez al Gran Patriarca, lo que nunca le he reconocido a nadie es que me da miedo recuperar la vista. Hablan siempre de belleza, lo que es lindo, pero que significa eso ¿Es tener un color de piel especial? ¿Qué es un color? ¿Qué significa que una persona tenga buen cuerpo? ¿Es importante para ellos la voz? La de mi namekuseijin remece todo mi cuerpo cuando lo escuchó ¿Será que los humanos se enamoran de lo que ven? ¿Cuándo la apariencia cambia el amor que sienten se termina? He escuchado que el cuerpo perfecto de las mujeres son con las medidas 90, 60, 90, yo tengo 105, 88, 105 ¿Eso significa que soy gorda, y por lo tanto fea? ¿Quién habrá llegado a la conclusión que eso es belleza en un cuerpo femenino? ¿Y por qué todos se dejan llevar por esas ideas? ¿Será que el amor es distinto cuando uno envejece?

Piccolo: abre los ojos - ¿Estas bien Iz? - hace rato que está totalmente quieta - ¿Izbet?

Izbet: sobresaltada - ya está listo todo, a comer Yun... ustedes también acérquense.

Todos se acomodan, como siempre es muy amena la jornada, ya terminado todo, Yun se ofrece a ordenar para que su mamá pueda ir a mojarse los pies en el río como le gusta.

Izbet: ¿Seguro que no necesitas ayuda?

Yun: Puedo solo mamá.

Izbet: Bueno - se sienta al borde del agua, siente el ki tranquilo de Piccolo meditando; que bueno que nunca se ha molestado en serio por las locuras que hago, incluso antes de ser humano estoy segura que en el fondo lo divertían pero no quería reconocerlo... mmm... pronto será el día de los enamorados ¿Qué haré para sorprenderlo? Me acuerdo cuando todavía no teníamos a Yun, con Jenny aprendimos a bailar danza árabe, esa noche cene a solas con Piccolo en casa, le dije que esperara un poco en la mesa, porque tenía una sorpresa para él, me vestí con el traje de velos, sentí su nerviosismo al verme y sentir la música, todo iba perfecto, tragaba saliva cada vez que me quitaba un pedazo de tela, hasta que uno de los velos pasó muy cerca de las velas, termine con parte del pelo chamuscado, y el peto del traje quemado en el suelo. Conversaré con Jenny a ver si me puede ayudar con alguna idea.

Piccolo: Yun, puedes traerme agua, por favor - le lleva una botella - gracias hijo - el namekusejin mira a Izbet; desearía leerle la mente para saber por qué se quedó tan quieta recién, estoy seguro que si le pregunto qué ocurre me dirá que nada. Mmm... ahora que recuerdo pronto va a ser lo que los humanos denominan el día de los enamorados, debe estar pensando con que sorprenderme, como cada año. En el transcurso del tiempo me he dado cuenta que más que recibir obsequios, le gusta darlos, es feliz al sentir la alegría de quien lo recibe. Ojalá este año tenga una idea normal, no como esa vez que me bailó danza árabe, no se dio cuenta que la tela pasaba demasiado cerca de las velas, hasta que aparecieron las llamas, tuve que quitarle el adorno de la cabeza, pero no antes que se le achicharrará un poco el cabello, lo que tenía en el busto se lo rompí y lo tiré al suelo, así no alcanzó a quemarse el cuerpo. Quedó parada con lo que le quedaba de traje y el pelo con algo de humo. Por un momento al verla con la cabeza hacia el piso, pensé que lloraría, me sorprendió cuando empezó a reír, su respuesta cuando le pregunté por qué reaccionaba así fue que nunca pensó que ese baile fuera tan CANDENTE.

Dende se queda dormido por la tranquilidad, Yun luego de dejar todo listo también se tiende, cierra los ojos.

Yun: Mamá, está todo listo, descansaré un momento - invitaré a Bet a este lugar, claro que cuando no estén mis padres por aquí /se entristece/ me acuerdo lo alegre que estabas cuando te traje, te echo tanto de menos hermanita.

Izbet siente que su hijo está demasiado callado, está segura que debe haberse acordado de Amanda, así que decide hacer algo para distraerlo. Forma una esfera de energía dentro del río, y sin que nadie se dé cuenta la sitúa sobre Yun.

Izbet: Hijo, ayúdame por favor - él abre los ojos y entonces el agua le cae encima.

Yun: Pero... me las pagarás - corre hacía ella.

Izbet: se aleja volando - no te aproveches de esta pobre ciega, además soy tu madre.

Yun: Deberías mostrar más seriedad por tu edad.

Izbet: se detiene encarándolo - ¿Me estás llamando vieja?

Dende: con el ruido despierta - huye por tu vida Yun jajaja - el joven esquiva los ataques de su madre riendo, pero no se dan cuenta que uno va directamente a Piccolo, y le da en la espalda.

Yun e Izbet: gritan al mismo tiempo - el que llega último asume la culpa y el castigo - y salen volando lo más rápido que pueden hacía el Templo Sagrado.

Dende: ¿Está bien?

Piccolo: Sí. Por fin tendremos un poco de paz.

Dende: ¿No está molestó?

Piccolo: Sé que fue un accidente, Yun todavía está triste por lo de Amanda, Izbet sólo trataba de distraerlo.

Dende: Entiendo, era una niña muy dulce. También me voy al Templo, aprovecharé de llevarme las cosas, en su huida olvidaron todo.

Piccolo: Nos vemos más rato.

Fin del Recuerdo


Piccolo: Fueron buenos tiempos.

Izbet: Si, muy lindos.

Piccolo: Un día estuviste callada mucho rato, fue unas semanas después de lo de Amanda, incluso te quedaste muy quieta ¿Te acuerdas que pensabas?

Izbet: ... en cómo sería recuperar la vista.

Piccolo: ¿Y qué te parece ahora que puedes ver?

Izbet: mirándolo a los ojos - es muy hermoso para describirlo con palabras.

FIN
Se fuerte, hazte grande pero no pierdas la inocencia de tu corazón...

Imagen
Responder